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Danielle se había quedado congelada, no podía mover ni un músculo de su cuerpo, se sintió tonta al no poder hacer nada mas que observar, tal vez venir con ellos fue una mala idea, seria un estorbo como lo estaba haciendo ahora

El demonio se acerco con pasos lentos pero decididos hacia los dos hermanos, Walter y Jonathan estaban escondidos hasta que sea el momento de salir, no podían hacerlo ahora, miraron a la chica, estaba asustada, eso era mas que evidente, todo se sobresaltado cuando el demonio dio su primer golpe en el costado de Thomas, haciendo que este cayera por el impacto, Danielle ahogo un grito, estaba preocupada por su hermano, por su mate

-Retrocede Danielle
La voz de Thomas la hizo reaccionar, ella obedeció e intento regular su agitada respiración, el joven lobo, miro a el demonio, de nuevo se acercaba a él, el chico sin mirar sus ojos, lo golpeo, pero sólo hizo que el demonio retroceda un par de metros de él, la chica miro a el demonio que de un momento a otro, como si una ráfaga fuese, ya estaba frente a su mate, tomando de este del cuello, haciendo que el chico cierre los ojos con fuerza mientras su cuerpo esta elevado

Danielle preocupada por el lobo, camino hacia ellos, sin que su mente se diese cuenta de ello, camino con pasos firmes, Jonathan había visto que era el momento de su entrada, pero Walter con un gesto había negado, el hombre lo miro mal, debía de cuidar de sus sobrinos o Madeline lo matará

Danielle estaba a solo unos pasos de estar entre el demonio y su mate, este quería derribar a el demonio para este junto a su hermana, pero su agarre era demasiado fuerte, estaba intentando respirar con dificultad, la chica sin tener conocimiento de sus actos elevó una mano en dirección a el demonio, una ráfaga de viento los envuelve cuando de Danielle sale una luz azul, que llega a el pecho del demonio y lo derriba soltando a Thomas y este cayendo al suelo aun con la sensación de tener las garras del demonio en su cuello, pero sin poder creer lo que había hecho su mate, el demonio que pronto se levantaba los miraba, los cuernos habían desparecido, el demonio que había sido controlado por William se había ido, lo había reemplazado un demonio, un demonio común, como Garry, Danielle se desplomó en el suelo, quedando inconsciente ante los ojos de los presentes, Jonathan y Walter salieron y fueron directamente a el cuerpo de la joven mujer, el demonio aun perplejo se acerco a ellos

-Que estoy haciendo con ustedes?
El demonio los miraba a cada uno, no se acordaba de nada, no sabia como había llegado hasta allí, porque estaba con ellos, si bien ahora los demonios tenían una clase de contacto con vampiros y lobos, aun no sabia  que hacia en ese lugar con ellos allí

Madeline intentaba controlar la sangre de William, pero por alguna razón no podía, al rededor de su cuerpo hacia un escudo, un escudo que lo protegía de todo lo que quisieran hacerle

-Madeline no servirán de nada tus poderes tan mediocres
La voz del joven al que había amado alguna vez se había convertido en el peor sonido, Madeline lo enfrento cara a cara, este sonrió con descaro, pronto vio como de las manos de el hombre había un hilo blanco, casi transparente, pero allí estaba, su sonrisa socarrona se ensancha mas al ver a la mujer se había fijado precisamente en su control

-marionetas
Dijo el hombre, la mujer lo miro aún sin entender, aún sin poder creer que ese hombre estuviese haciendo todo aquello- sigues siendo una tonta, por lo que veo mi querida Madeline- la voz del hombre dispara veneno, sus ojos llenos de odio, una sombra lo envuelve, haciendo notar su maldad- Marionetas, como se escucha en el norte, juguetes que puedes controlar, con solo unos hilos haces que ellos se muevan como tu quieras, por su puesto que el que lo hace, debe saber como hacerlo, así como yo, controlo a mis marionetas Mi dulce pelirroja, ya saber, su mente, invadiendo cada uno de sus pensamientos, razonamientos, miedos, todo- la mujer lo miro con los ojos muy abiertos, sin creer lo que acaba de decir el hombre, le sonrió y llego hasta ella, las cadenas que la envolvía se movieron haciendo un sonido gutural por toda la cueva, la tomo del mentón y con un fuerte movimiento poso sus labios sobre los de ella, separándose al instante de lo sucedido y empleando un sonrisa ahora triunfante y burlona hacia la mujer

-me das asco
Dijo la mujer con repugnancia, quería que su marido estuviese con ella, abrazando su cuerpo y protegiendo la, aún sentía los labios de William contra los de ellas, a pesar que sólo había sido un segundo la sensación de asco y repugnancia no se apartan de ella

-Es irónico que pienses eso, cuando hace algunos años, querías  casarte y tener hijos conmigo
El hombre la miro con odio sin embargo aun llevaba una sonrisa de medio lado

-no voy a negarlo, era otra época, era mas inocente, ademas, mi prometido era diferente
El hombre soltó una carcajada amarga, y la miro y volvió a acercarse a ella a tal punto que sus narices rozaban, pero la pelirroja no aparto la mirada, no dejaría que ese hombre la intimida, no lo hizo cuando conoció a Gabriel no lo haría ahora que William ha regresado de la muerte

-tu me hiciste así, esto es tu obra,no te quejes que tu haz hecho esto conmigo maldita perra!
Soltó antes de darle una fuerte bofetada que hizo que su cuerpo se estrelle en el duro suelo Pedroso quedando inconsciente...

Almas descontroladasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora