Capítulo 4

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💪🏽

-¿Perdona?- mi nivel de molestia empezó a elevarse.

-Te perdono- se rió. Escuche la explosión de mi tolerancia.

Me levante con la intención de romperle su bonita cara.

-Hey ¿Cuál es tu problema?- se acercó Dexter y se paró justo entre el chico y yo.

-¿Y cuál es el tuyo?- espetó una chica de cabello azul que apareció detrás del joven.

-Lo que yo vi, fue que tú torpe amiga, golpeó a mi amigo- esta vez apareció una chica de cabello violeta.

«Pero las princesas de aquí no se tiñen el cabello así...»

-Dex...- sentí mi sangre abandonar cada parte de mi cuerpo.

-¿A quién le dices torpe?- me defendió e interrumpió Dexter.

-Dex...- intenté llamar su atención de nuevo.

Mi cerebro me gritaba que saliese corriendo, que me ocultara antes de que algo malo me sucediera, podría ser fuerte pero con la magia, ahí no sirve de nada mi fortaleza, y vamos, son hijos de villanos que se puede esperar. ¿Qué sigan la regla de prohibición de magia? Vamos.

Empecé a retroceder, di medio paso cuando choque con alguien más.

«Hoy no es mi día definitivamente.»

Pasaron un brazo por sobre mis hombros.

«Cercanía, demasiado cerca, mi espacio...»

-Aléjate de ella- ladró el pelinegro.

-¿Y qué si no?- dijo una voz masculina. Sentí como se apretaba más a mi.

Mi tolerancia se hizo polvo.

Tire mi brazo hacia adelante y con mi codo asesté un golpe en el estómago de quién me detenía.

Oí su quejido. Y cómo caía casi un metro detrás de mí.

No me importaba quiénes fueran o quienes fueren sus padres, se metieron con la chica equivocada.

Tomé el brazo de Dexter intentando sacarlo de ahí mientras me veía anonado.

-Ya armaron un escándalo ahora termínenlo- me jaló del brazo el chico moreno, note que los 4 chicos iban vestidos de cuero, y colores oscuros, excepto el chico que golpee el iba de blanco, rojo y negro.

-Exacto- ladro la chica de morado intentando acercarse a mí.

-No te metas- se atravesó Dexter.

-Ni tú- lo vio de pies a cabeza

-No me toques- espete acumulando toda mi valentía. Me zafé de su agarre.
-Entonces termina lo que empezaste.-

-¿Eso quieres?- empecé a subir la voz.

Estuvimos a centímetros de que esta discusión se convirtiera en una pelea.

-Jay, Heather y todos los demás ¡A mi oficina!¡AHORA!- Gritó o mejor dicho, chilló una voz quebrantándose de ira.

No había notado que había un círculo de personas a nuestro alrededor, expectantes.

-Pero...- trato de defender el chico peliblanco. (Que por cierto apenas lo vi por completo.)

-¡Ahora!- volvió a chillar el Hada Madrina.

🎨🖌

-No puedo creer que termináramos el primer día castigados- refunfuñé tomando una de las máscaras quirúrgicas, (cubrebocas, barbijo o tapaboca.) me la puse dificultosamente.

Descendientes || La Hija de Hércules || Donde viven las historias. Descúbrelo ahora