Descendientes || La Hija de Hércules ||

Capítulo 6

Capítulo 6

-¿Dónde estabas? Te busqué por todo el lugar.- una voz me sorprendió por detrás.

-Estuve aquí Dext...- lo mire.

-No soy Dexter- río.

-Lo s-siento, estaba distraída.- mi sangre se esfumó.

-¿Podemos hablar un segundo?- hablo el peliblanco.

No me había dado cuenta de que lo que lleva el día, había estado evitando a estos chicos.

Si veían mi expresión al verlos, lo más probable es que me desaparezcan al instante.

-Cl-Claro.- sonreí. Aparte los libros en los que estaba metida.

Y le deje espacio en la banca en la que estaba.

Suspiro y se sentó. No me miró, lo vi suspirar y aparte la vista. Esto empezaba a ser de lo más incómodo.

-Escucha, no estoy seguro de que hacías ahí anoche, y probablemente te preguntas también que es lo que hacíamos nosotros. Y bueno...- se detuvo y sentí su mirada.

-No diré nada, lo juro... Yo solo soy demasiado curiosa... Y estuve... -Titubeé
-Solo lo siento ¿si?- Comencé a recoger mis cosas esto me estaba incomodando mucho.

-Hey Heath...- Tomó mi brazo para que me detuviese y lo logró. -Solo quiero que sepas que en realidad mi vida no es en lo más mínimo parecida a la tuya, hay cosas que simplemente vienen conmigo incluidas- medio sonrió.

No sé cómo se reacciona a esto, se estaba sincerando conmigo y yo tontamente me eh quedado paralizada.

-Lo entiendo si no quieres hablarnos, pero estamos intentado aprovechar la segunda oportunidad que nos dieron..- susurró y se levanto y emprendió marcha.

Deje mis cosas.

-Hey Carlos... yo... siento haberlos seguido, puedes confiar en mi, no entiendo mucho el por qué de la situación, pero yo no vi nada- sonreí.

Espero haya sido la reacción correcta.

Cuando lo vi sonreír de verdad, supe que si, si había sido la correcta.

Suspiré, realmente no sé cómo convivir con gente de mi edad.

Me di un golpe mental, recogí mis cosas y salí de ahí.

Justo cuando estaba por girar la perilla de mi puerta oí una voz dentro.

-No se cómo decírselo....- esperó.

-Yo sé que ya no puede subir... y lo sé señor soy su guardián... pero si ella no quiere quedarse aquí, no podré atravesármele, me haría añicos- río muy apenas

Era una conversación entre Dexter y mi padre.

Solté aire que no note que estaba reteniendo.

Esto es malo.

Mi cerebro emprendió una marcha a toda máquina para pensar la razón por la cual ellos estaban charlando.... no había roto ninguna regla o.... haber llenado la tina hasta desbordarla ¿Contaba?

Y si... el se dio cuenta de que salí anoche... ¡no se mentir! ¿Qué voy a hacer?
No les puedo decir la verdad.... un momento, ¿por qué no podía? Ellos son villanos, deberían regresar a donde pertenecen....

La puerta se abrió dejando ver a un Dexter pálido.

Mierda.