Capitulo 60

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MEGAN

-Nena-

-Mmmmm-

-¿Qué haces pequeña?- Me pregunto con diversión en su voz

-Oh nada amor- le conteste inocente, mientras mis manos seguían bajando y se encontraban con la tira de su pantalón de chándal

-¿Qué crees que estás haciendo? mi chica traviesa- en un momento yo ya estaba debajo de el

-Solo intentaba darte un masaje cariño- realmente este juego me divierte

-Creo que te daré  uno yo ahora, te quedaras tranquilita-

-Sebas no se vale, se supone que yo te lo haría a ti- me quejo

-Yo te lo hare a ti nena- y me presiona su erección en mi centro

¡Oh dulce niño Jesús!

-Empecemos- no traía casi nada puesto solo una bata y unas bragas así que no se le haría difícil tenerme desnuda de un momento a otro. Toma el borde de mi pequeña batola y me lo saca y dice

-¡Wala!- exclama sonriendo

-¿Ahora que sigue querido mago?- le pregunto divertida

-Oh señora mía no apresure las cosas primero algo de diversión- si claro diversión a mi costa. Lo fulmine con la mirada pero eso solo hizo que soltara una carcajada... Empezó besando desde mi pie y fue subiendo por mis piernas pero antes de llegar a mis mulos se detiene. Hice un ruido loco quejándome y solo sentía su risa contra mi piel, primero una pierna y luego la otra

-Sebas- gemí joder me estaba volviendo loca, su boca me hacia estremecer

-Tranquila pequeña- siguió con su tortura, no dejaba de besar mi piel y acariciarla

-Eres tan hermosa ángel- susurro pero yo lo pude escuchar una bonita sonrisa se pego a mi rostro... al fin había llegado donde yo lo quería tener en un instante mis bragas ya estaban fuera

-¡Tachan!- si poder evitarlo reí por sus locura, aun así lo amaba, lo amaba más que a nada

-¡Cariño!- estaba impaciente lo necesitaba ahora

-Shhh- no me beso donde quería sino que subió besando hasta llegar a mis pechos no sin antes besar mi vientre y susurrarle a nuestras hijas que las amaba. Sus labios se cierran sobre mi pezón y pierdo todo pensamiento coherente esto es lo que él me hace, después de entretenerse y jugar mucho con mis ahora grandes amigas por fin se digna de volver a mi parte baja, vuelve hacer la misma operación baja dejando besos húmedos y calientes en mi piel hasta que llega al lugar que quiero que este planta su boca ¡oh si gran boca! en mi muy reciente y depila vagina

-¡JODER!- siento como ríe, pero no por eso deja de atacarme, abre mis piernas separando mas mis muslos y me besa profundamente, su lengua empujando y jugando con mis pliegues y en mi interior. Llevo mis dedos a aquel cabello grueso, sedoso y se lo jalo cuando creo que esto no va a ser mejor lame mi clítoris y empuja un dedo dentro de mi haciendo movimientos exquisitos, no creo poder aguantar más mi cuerpo se tensa

-Vente mi pequeña- sus palabras logran hacer que estalle en millones de pedacitos de miles de colores que me hacen subir y subir hasta sentir que puedo tocar el cielo con mis manos.. Unos momentos después cuando ya vuelvo al planeta tierra y bajo de esa nube gloriosa en la que me encontraba Sebas ya estaba besando su camino de regreso a mis pechos nuevamente chupando mis pezones hasta dejarlos erectos me besa salvajemente y puedo sentir mi sabor en su boca, gimo y envuelvo mis piernas en su cadera levantando mi pelvis para que me llene con su polla, pero no lo hace todavía, sus manos encima de mí; su pene encajando entre mis mulsos. Su respiración es irregular al igual que la mía sus hermosos ojos verdes brillan con intensidad.

Mi Jefa o Mi EsposaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora