Capitulo 12

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MEGAN

Estoy en casa, Sebastián dijo que ya pasaba buscándome por lo que estoy lista, me vestí lo más sencilla que pude un vestido minifaldero color violeta y unas botas de tacón de caña alta que me encantan, me deje el cabello suelto y un sutil maquillaje, bien sencilla nada comparado como me ven por televisión, no quiero que piensen aaarrrggh que estoy pensando estoy nerviosa en realidad muy nerviosa. Escucho el timbre y voy rápidamente ah abrirle; abro la puerta y al verlo lo saludo.

-Hola Sebastián- esta que cruje unos pantalones que le hacen ver unas muy buenas piernas un polo blanco tan sencillo pero tan guapo. Dios ¿qué me pasa? 

-Hola ángel lista para ¿irnos?- me pregunta mientras me sonríe y me da un dulce beso en los labios, me encantan sus besos

-Si déjame buscar mi bolso, ¿estoy bien así?-

-Si cariño estas hermosa-

-Gracias-

Busco el bolso tranco el apartamento y le digo que estoy lista. Me toma de la mano y vamos hacia el ascensor vamos a ir en su auto así que él me llevara y me traerá a casa, llegamos al estacionamiento me abre la puerta pero antes de dejarme entrar, saca de sus pantalones una cajita negra contengo la reparación porque se dé que se trata, la abre y veo un fantástico anillo con un diamante en forma de ovalo solitario en una banda de plata, se aclara la garganta y me dice

-Nena antes de irnos me gustaría darte el anillo, se que tal vez no es lo que esperabas porque sé que no es a lo que tu estas acostumbrada pero me gustaría que lo aceptaras porque es especial, tal vez en otro momento antes de la boda te compre un anillo en cartier o en tiffany si es lo que quieres.-

Solo me le quedo mirando porque no tengo palabras el anillo es tan hermoso, pero no me gusta esta sensación de calidez cuando estoy con él, que él me hace sentir, no puedo olvidar que solo nos casamos por el contrato y nada más, aunque en estos momentos me gustaría que no fuera por eso por lo que estuviéramos juntos, sino porque me amara, Cristo Megan que te pasa me reprendo lo observo tiene el anillo con la caja abierta hacia mí y me observa.

Lo abrazo le doy un suave beso en los labios y le digo.

-Gracias cariño es perfecto no necesito otro este me encanta- y es la verdad, el me sonríe me besa y me hace entrar al auto entra y salimos del edificio para ir a casa de mis futuros suegros coloco música mientras vamos en un cómodo silencio ahora.

Quince minutos después llegamos, Sebastián para el coche en una gran casona muy linda lo apaga y se baja me abre la puerta y salgo, ahora los nervios van a dos mil tres mil ¡oh dios!

-Estoy nerviosa-

-Lo sé, tranquila estoy contigo.-

Traspasar la puerta de aquella linda casa era lo más sencillo, lo difícil fue entrar y ver como se me quedaban viendo extrañados claro no era de esperar le di una sonrisa nerviosa y apreté la mano de Sebas, una señora bonita no tan alta de cabello negro y sonrisa adorable se acerco y lo saludo a el primero.

-Hola tesoro has llegado- Le dijo mientras lo saludaba con un gran abrazo y luego se me acerco a mí, dudo y luego extendió su brazo y me dijo.

-Hola soy Ana la mamá de Sebastián- no sé porque pero en vez de darle la mano la abrase mientras le decía.

-Mucho gusto Ana, soy Megan, tienes una bonita casa- le dije sonriendo

Desde el patio se escucho que alguien grito

Mi Jefa o Mi EsposaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora