Callando mi Amor.

Quiero recuperarte

-Es mi culpa... yo le dije que lo odiaba...

-¿Le dijiste eso? -sonrió con burla y me miró en reproche- No pues, con razón huyó... no le dices eso a alguien que está enamorado... menos si ya te acostaste con él.

-¡Yo no se lo dije! -grité ofuscado mientras apretaba su camisa- ¡Lo grité al vacío! Yo no sabía que él estaba... ¡se suponía que él no estaba ahí!

-Kanon... -suspiró con decepción- Ponte en su lugar. Dime... Si tú y yo tuviéramos sexo...

-Eso jamás pasaría...

-Es un ejemplo... Si tú y yo tuviéramos sexo y yo misteriosamente desapareciera en la mañana sin dejarte alguna pista de donde iré o si voy a regresar, sin decir nada sobre lo que pasó... ¿Como te sentirías, que pensarías?

-Sentiría que... no fui suficiente. -respondí con la mirada fija en el suelo- y que no te importo..

-Exactamente... eso está sintiendo él en este momento. Que lo usaste para el placer de una noche y ya.

-Soy un idiota..

-Lo eres...

-Tengo que hacer que de nuevo me quiera, así arreglaré las cosas.. -sonreí ligeramente- así verá que si me importa, que todo lo que cree no es más que un simple mal entendido.

-¿Y como planeas hacer eso? -dijo terminando de bostezar y sentándose en el sillón de cuero negro que había en su sala-.

-Esa es la parte complicada... Me dijo que no volviera hoy a casa..

-Eso es malo... significa que está más herido de lo que yo pensaba.

-Lo sé, es malo... pero tengo un plan.

-Iluminame... -se vió confundido-.

-Ya lo verás.. -sonreí y me dirigí a la puerta- ya lo verán...

-Está bien...

Salí del departamento con más entusiamo, bajé usando el ascensor y con una sonrisa me dirigí al centro de la ciudad, entré al restaurante favorito de Saga y le compré su platillo favorito, su bebida favorito, hasta su aderezo favorito. Tomé todo y fui a casa.

Cuando llegué, marqué el tercer piso en el ascensor y esperé a llegar.. fueron los segundos más lentos de toda mi vida. Al instante en que se abrieron las puertas tuve que hacer uso de toda mi voluntad para moverme hasta la puerta, no podía entrar así como así o me lanzaría al rostro cualquier cosa que encontrara. No era mejor tocar la puerta, lo hice un par de veces y esperé lo mejor..

-¿Quién es? -escuché su voz del otro lado- Si eres tú Kanon ya te dije que...

-Emm... entrega señor... -fingí una voz lo mejor que pude, era algo grave. Un poco parecida a la voz de alguno de esos narradores de programas importantes que solían salir en la televisión-.

-Debe ser un error.. -dijo mientras quitaba el seguro de la puerta- yo no ordené nada... -se quedó como roca al verme ahí parado-.

-Saga déjame explicarte... -me miró por un instante y trato de cerrar la puerta, pero se lo impedí poniendo mi pie frente a la puerta- solo dame una oportunidad... por favor hermano.

Nos quedamos así por un par de minutos, en silencio. Poco a poco fue disminuyendo la fuerza de su lado y me dejó abrir la puerta. Fijé mi mirada en la suya, vi como en sus ojos se reflejaba una gran tristeza y me sentí aún más miserable. De nuevo quise abrazarlo y alejarlo de todo el dolor que estaba sintiendo, pero entendí que si hacía un movimiento en falso acabaría con todo.

-Te traje algo de comer.. -dije por lo bajo y con la mirada fija en el suelo- de tu restaurante favorito..

-¿Esperas sobornarme con comida? -me preguntó en ese tono frío y distante que usaba con las personas en las que no confiaba-.

-N-no.. no es un soborno, es parte de mi disculpa..

-Tienes suerte de que tenga hambre... -tomó la comida y fue a la cocina. Lo seguí desde cierta distancia, paso uno completado. Hacerlo que me escuche- ¿tú ya comiste algo?

-No, al menos que consideres cantidades industriales de café como comida.. -sonreí un poco, lo miré y aunque trató de evitarlo; también rió por mi comentario dejandome escuchar su dulce risa- Me gusta tu risa...

-..... -no me dijo nada, pero pude ver como su cuerpo se tensaba. Era hora del paso dos- kanon no creo que...

-¿Que? -murmuré mientras me acercaba a su cuerpo y lo abrazaba por la cintura- perdóname por ser tan idiota, Saga..

-Q-quiero que te vayas...

-Lo de Milo no es más que una mentira... -me aferré más a su cuerpo- Saga, jamás quise dejarte solo... es solo que... -suspiré- ¡soy demasiado idiota! Sabía que si me quedaba lo arruinaría...

-Por eso te fuiste...

-Sí, pero igual lo arruiné... -me separé de su cuerpo y retrocedí unos pasos- te hice sentir que no significabas nada cuando la verdad es que..

No pude continuar hablando, de pronto sentí que mis labios eran sellados en un suave beso. Yo no lo esperaba en lo más mínimo; así que quedé un poco impactado en el primer instante. Fue ahí, en ese pequeño segundo que pude entender cuanto amaba y necesitaba a Saga, era lo único que tenía y todo lo que quería. Cuando sus labios se unían con los míos todo tenía un sabor dulce y un tanto embriagador; era como si sus labios detuvieran el tiempo; no podía dejarlo ir. Lo atraje de la cintura y lo uní más a mí, necesitaba sentirlo cerca, aún más cerca..

-Te amo Saga...

~^O^~

HOLA LECTORAS!! Vengo a dejarles este hermoso capítulo que escribí con mucho amor... espero que lo disfruten, que voten, comenten y me digan que les pareció. También quería decirles que ya casi termina esta historia ): pero que agradezco todo su apoyo... de paso informarles que mi celular está algo... averiado y no se cuanto tiempo me tome actualizar... eso es todo, me despido...

Att: TenshiNekoS