The Teacher |Z.M.|

39-. La cena

Violett's POV

Ver a Harry recargado contra la puerta de su Audi sólo hizo que se incrementara en mí aun más ese sentimiento de culpa.

No había sido suficiente ese par de luces en rojo que ignoré, ni tampoco las señales de alto que me pasé, nada de eso había sido suficiente porque llegué con un "elegante" retardo de 20 minutos a casa.

Involuntariamente me miré por el retrovisor antes de salir del auto y mi vista se enfocó en aquella marca que había en mi cuello.

¿A quien intentaba engañar? La culpa que me embargaba no se debía al hecho de haber llegado tarde, sino a Zayn y Harry. Era como si el peso de lo que acababa de hacer por fin hubiera caído completamente sobre mí. ¿Cómo se supone que iba a poder estar con Harry después de haber estado con Zayn? Esto era como jugar a las dos puntas, y sinceramente no me gustaba sentirme de esa forma, corriendo de un lado a otro mientras intentaba que el barco no se hundiera.

Acomodé mi cabello antes de abandonar el hervidero de ideas en el que se había convertido mi auto. De nada iba a servir que pensara más en ello, no podía echarme para atrás ahora. Además, esto era por el bien de Harry, lograría que el aprobara la clase.

Eso es, repítete eso hasta que sea lo bastante convincente como para que te deje dormir.

-Estúpida conciencia –murmuré entre dientes.

-Hola –sonrió haciendo que ese adorable hoyuelo apareciera sobre su mejilla izquierda.

-Lamento haber llegado tarde –me apresuré a disculparme mientras pasaba de largo. No pensaba besarlo, no cuando acababa de besar a Zayn.

-No pasa nada –la sonrisa aun permanecía en su rostro. ¿Por qué diablos no estaba molesto?-. No llevo mucho esperando.

-Iré a dejar mi mochila y regreso.

No esperé a su respuesta y corrí hacia el interior de la casa, topándome con mamá mientras iba escalera arriba.

-Harry lleva esperando media hora afuera.

-Lo sé, pero no pude librarme de mis tutorías de historia.

-¿Tutorías?

¡Maldición!

Podía escuchar sus pasos detrás de mí.

-¿Historia o matemáticas? ¿O ambas?

¡Maldición! Ella ahora sí estaba molesta. ¿Cuándo diablos iba a aprender a mantener mi bocota cerrada?

-Historia. Pero no te preocupes –sonreí forzadamente-, tengo todo bajo control. Liam es un gran tutor y...

-¿Liam? ¿El adorable joven de ayer?

-Supongo.

Mamá dejó salir un largo suspiro.

-Espero que tengas razón, Violett.

-¿Cuándo no la he tenido mamá?

Ella no me contestó, sólo me dirigió esa mirada de "no me hagas hablar" y se fue.

Tiré la mochila sobre la cama y comencé a buscar en mi closet algo con que cubrirme el cuello.

(...)

Pensé que Harry me llevaría a cenar una pizza o una hamburguesa, pero debí haberme dado cuenta de que eso no ocurriría cuando lo vi vestido tan elegante.

Él me había llevado a cenar a un restaurante italiano, el Ravioli's ese lugar era demasiado selectivo con su clientela, a él sólo iban personas de la clase alta de Londres.