¿MI JEFE ME INTIMIDA?

CAPÍTULO 2

—¿Porqué lo dice?—Seguía sin mirarle a los ojos. De la nada encontré más interesante mirar en dirección a una persiana ¡UNA PERSIANA!

—No haces contacto visual conmigo. Es extraño.—Se acercó aún más.

—E-e yo so-soy así señor Harry, nunca hago contacto visual con las personas.— Volvió la tartamuda. Comenzaba a sudar, lo cual me ponía muy nerviosa ya que no quería quedar en ridículo frente a Harry. Se alejó y caminó hacia su escritorio, sentí un gran alivio y pude respirar mejor.

—No me digas señor de ahora en adelante solo dime Harry, me haces sentir viejo. Ya puede retirarse señorita Ailaan.—Sonrió.

—Está bien, con permiso.— Esta fue la escena más extraña en todo en tiempo que he trabajado en esta empresa, tanto en verle sonreír, como en acercarse tanto a mi. Caminé lo más rápido posible hacia mi oficina, exhalé al ver el bloque de documentos que había en mi escritorio comencé a ordenarlos por mes y año, son documentos muy importantes y no debo equivocarme.

Era la hora del almuerzo salí en busca de mi mejor amiga, pero no se encontraba en su escritorio, miré a todos lados buscándola con la mirada pero sólo vi a Harry cuando abrazaba a una mujer muy simpática de cabello largo color marrón, ojos verdes y muy elegante vestida, luego le agarra ella la mano y besa su mejilla, en este momento me pregunto ¿Por qué no soy bonita?, mi corazón se parte en dos, voy para dos años trabajando en esta empresa y desde que lo vi fue como amor a primera vista, yo sola me enamoré claro, pero nunca se ha fijado en mí ni por lástima. Al pasar los minutos porfin veo a mi amiga entrar como siempre con una enorme sonrisa.

—Ailaann ¿es su novia?—Me preguntó.

—No lo sé, pero parece que sí.— Ambas continuábamos mirandolos.

—No importa Ailaan, él se lo pierde. ¿Sabes?

—¿Qué?

—Puedo ayudarte en tu imagen. Quedarías hermosa.

—No lo sé... no creo que sea bueno que me haga un cambio de imagen en estos momentos.—Dudé.

—¡Oh vamos!, ya es tiempo de que tengas pareja, eres joven aún para vestirte de esa manera tan anticuada, ni mi madre, ni la tuya se visten así.

—Creo que tienes razón, pero ¿ves la diferencia entre ella y yo?—Ambas miramos nuevamente a la chica que estaba con Harry.

—Sí, la diferencia es que ella tiene belleza plástica y tú real, sólo que está oculta.—Y enserio era plástica porque tenía más senos que trasero, reí por dentro.

—Gracias.—La miré con una gran sonrisa.

—¿Porqué?—Me miró extrañada.

—Por ser mi amiga.—Sonrió.

—Eres tan afortunada, yo desearía tener una amiga como yo de genial—Dijo burlona.

—¡Vaya! ¡ pero qué humildad!—Reí.

—Es broma, eres una buena amiga y por eso es tiempo de que salgas de ese caparazón...Ahora me voy, nos vemos en la salida, comenzaré tu cambio hoy mismo.

—¡¿QUÉ?!