-Y justo cuando leo, felizmente, su mensaje...me decepciono en completo. Eso es lo que quiero decir, que a él le gustas.-
Los grillos de la noche hacían sonidos en eco fuera de la habitación de Jane, pero aún eso le recordaba a su sueño.
-Que te digo que no, Jane. Y no me hagas hablar más porque ya sabes como soy, a veces hablo sin pensar...-
-Pero, ¿de qué no quieres hablar?.- Podía estar imaginándose a Grace mordiéndose el labio en ese momento a través del teléfono. Algo ocultaba.-
-¿No podemos cambiar de tema y hacérmela más fácil? No quiero que te enojes conmigo, ya sabrás...-
-Per...-
-Jane, por favor no te enojes pero tengo que ir a comer, ¿si?.- Jane suspiró acostada en su cama y asintió aunque nadie la estuviera viendo.-
-Está bien, buenas noches.-
-Nos vemos mañana, adiós.- Y colgaron.-
Jane no entendía qué era lo que estaba pasando. ¿Ahora Grace y Allen le ocultaban algo? No quería creerlo. Pensó seriamente en ir a la casa de Allen...miró la hora. Las diez y cuarto de la noche.
Qué estaba pensando, no iban a dejarla salir a esa hora y no pensaba en escaparse ya que no era buena idea y lo decía por experiencia...
Pero quería verlo, hablar con él.
Aunque no. Ya había sido mucho. ¿Cómo iba a verlo luego de aquella charla por teléfono? Había sido muy rara...no. Creo que por esa vez, se iba a quedar en casa.
-Jane...- Su madre tocaba a la puerta.- ¿Podrías bajar a comer?.- El famoso revoleo de ojos en la chica apareció.-
-No tengo hambre.-
-Jane, tienes que comer.-
Su madre entró a la habitación y se quedó callada al ver a Jane recostada en su cama con un ánimo verdaderamente bajo.
Se acercó a su hija y justo al lado de sus piernas se sentó.
-¿Qué pasa?.-
Jane la miró el mayor tiempo que pudo, lo que no fue mucho, hasta que se le comenzaran a llenar de lágrimas sus ojos. Su madre pasó a poner un gesto triste también y suavemente, aunque dudando de cuál sería la respuesta de Jane, se acercó para abrazarla. Jane, sorprendentemente, se inclinó para adelante a abrazar a su mamá también.
-¿Por qué todo lo malo tiene que pasar junto? ¿Por qué no pasa así con la felicidad?.-
Amy no contestó al segundo. Quería apreciar ese momento más que nada en el mundo.
-Tal vez porque así es más fácil. Si todo lo malo pasa junto, aunque te cueste más, lo superas mejor. En conjunto.- Seguían abrazadas. La voz de su mamá era cálida y serena...hace mucho, pero mucho tiempo no se encontraban así.- Tal vez pasan más momentos felices de lo que nosotros creemos, pero nunca terminamos satisfechos, entonces exigimos mucho y cuando eso pasa, las cosas se pueden volver negativas.-Tragó saliva y cerró los ojos.- Pero todo se aprende.-
-Cuando nos vayamos, ¿crees que podríamos volver? ¿Pronto?.- Su mamá sonrió.-
-Mientras tu y Melany no lo impidan, no creo que haya problema...- Las dos rieron un poco.- Pero Jane, no pienses en lo que podríamos...vive ahora, ahora estamos aquí, tu tienes amigos y tienes que disfrutar el momento. No hay nada como disfrutar el momento.-
Jane que sentía tan intensamente las palabras de su mamá, la apretó un poco más fuerte y cerró sus ojos un poco más que antes. Extrañaba eso.
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Te volveré a ver
Novela JuvenilJane Adams es una adolescente particular, con sufrimientos jamas contados y una rebeldía como consecuencia de dolor. Gran gran parte de su vida cambiará cuando conoce a Allen, un chico totalmente diferente a ella pero el cual los dos juntos pueden l...