Eliott despertó al día siguiente con una sensación de somnolencia y cansancio, quería seguir durmiendo pero su reloj biológico lo había despertado a la misma hora que todos los días a pesar de que no era necesario. Dios, era navidad. Volvió la mirada al hombre a su lado y sonrío ligeramente, bueno, sí que había pasado una "nochebuena". Se estiró un poco y se levantó despacio para no despertar a su compañero y cuando se puso de pie le temblaron las piernas, dioses, ese hombre no se había contenido en lo absoluto, no recordaba haberse sentido tan saciado y cansado antes solo por sexo.
El somnoliento joven buscó su ropa por el piso y con dificultad la recogió, pensó en buscar otra habitación para bañarse a gusto, sin hacer ruido, seguramente habría una habitación de invitados por ahí. Intentó abrir la puerta pero esta se había trabado, extrañado tiró de ella pero la puerta no cedió, fue evidente entonces que tenía puesta la llave. Su mirada viajó inmediatamente al mueble cerca de la puerta, no había nada ahí y por instinto comenzó a buscar a su alrededor.
—¿Buscas esto?— escuchó la voz baja y ligeramente enfadada de Czar y al girarse a él lo encontró sentado en la cama, meneando la llave frente a su rostro— No pensé que realmente sería necesario ¿qué excusa me pondrás esta vez Eliott?— tenía el ceño fruncido y Eliott le medio sonrió sabiendo que el mayor estaba en todo su derecho de estar enfadado, pero era navidad y él no quería pelear.
—¿Qué tal "quería dejar dormir a mi amante"?— preguntó ladeando el rostro, Czar le miró con perspicacia, como preguntándose qué pensar de su respuesta.
Eliott se recargó en la puerta, estaba aún desnudo y lo único que le cubría era el montón de ropa en sus manos que cubría de su cintura baja a por encima de sus rodillas.
—¿Así que huías en silencio? – Czar se levantó, llevaba puesto un pantalón de pijama así que al parecer había tenido tiempo de vestirse con ropa de cama después de desmayarlo de placer la noche anterior.
—Sólo quería ir a otra habitación a bañarme, tenía la esperanza de volver y despertarte— le aclaró y Czar entrecerró los ojos con desconfianza. Eliott suspiró— Es en serio—insistió. Czar caminó hasta él y se apoyó en la puerta acorralándolo.
—¿No huías?— Buscó reiterar la respuesta y Eliott rodó los ojos, lanzó su ropa a un lado levantando los brazos para rodearle el cuello.
—Me duele todo, báñame— pidió simplemente y Czar sonrió de medio lado.
—Bien jugado— lo felicitó. Eliott ladeó el rostro con una sonrisa.
—Gracias— contestó y Czar lo levantó en brazos para llevarlo al baño.
—El de esta habitación es el mejor de toda la casa, no hay razón para que vayas a otro— le informó besando su rostro con cariño. Eliott bostezó y se acomodó contra su hombro.
—Quería dejarte dormir, es todo— aclaró nuevamente, perfectamente consciente de que era necesario decirlo muchas veces para hacer sentir mejor a su pareja. Czar le besó el mentón y como Eliott pidió le llevó a la tina y le ayudó a bañarse por el simple hecho de querer mimarlo. Ya limpios ambos entraron al jacuzzi y Eliott volvió a quedarse dormido un poco más. Czar lo dejó estar unos minutos pero finalmente lo sacó y le ayudó a secarse, le colocó una de sus enormes camisas y lo llevó a la habitación contigua para que durmiera un rato más. Cerca de las diez de la mañana Eliott comenzó a abrir los ojos nuevamente, estaba cálido entre los brazos del mayor, levantó la mirada y esta vez Czar estaba despierto.
—¿Cuánto dormí?— preguntó aún adormilado y Czar le acarició el cabello.
—No demasiado, son las diez de la mañana, hice que tu eficiente representante enviara el traje que usarás esta noche aquí y también un cambio de ropa más cómodo—le informó bajito, dejándolo despertar despacio.
Eliott se estiró y bostezó.
—Qué bien, quiero algo de ropa interior
—Qué bueno-, Czar acarició el rostro ajeno con su nariz-. Porque es lo único que te dejaré ponerte— le susurró y Eliott soltó una risita divertida.
—¿Quieres que ande en ropa interior por la casa?— la calefacción de Czar era por supuesto de primera pero no por eso iba a andar en ropa interior por todos lados en aquel lugar.
—Me gusta cómo se te ve mi camisa— confesó.
Eliott miró la que traía puesta.
—Bueno, también se siente muy bien— la tela de la ropa de Czar era suave y cómoda, no quería imaginar lo que la camisa que estaba usando de pijama costaba— Está bien, me quedaré con esto si me das un par de bóxers— concedió.
Czar se levantó y se los dio, él seguía solo con el pantalón de pijama. Ambos se asearon juntos, como si lo hubieran hecho siempre.
—Tengo hambre— Eliott se quejó cuando ambos terminaron de lavar sus dientes y rostro.
Czar pidió que les llevaran comida y a Eliott le sorprendió que desayunaran en la terraza de la habitación, podía ver algo de movimiento en el patio y eso le extrañó.
—¿Tendrás otra fiesta?— preguntó curioso y Czar negó.
—No, tenemos ya una fiesta agendada ¿recuerdas?— negó sin decirle a que se debía el movimiento.
—¿Entonces me dices que todo ese movimiento es normal?
—Es una sorpresa.
A Eliott le intrigó la sonrisa pícara que vio en el rostro ajeno y aunque tenía curiosidad no preguntó más. Desayunaron tranquilamente, casi no parecía que estaban pasando navidad juntos. Para cuando terminaron, todo el movimiento en la planta baja era casi nula y el mayor le pidió que le acompañara. Al bajar las escaleras a la estancia principal le dejó sin palabras la hermosa decoración navideña.
—Confieso que ayer no estaba prestando mucha atención pero puedo jurar que nada de esto estaba aquí— aseguró volviéndose a Czar y este asintió.
—No te equivocas, no pensé que fueras a estar aquí esta mañana, cuando te quedaste dormido llamé a mi decorador para que lo tuviera listo para el final del desayuno— explicó. Eliott entrecerró los ojos y Czar levantó las manos— Y antes de que me llames explotador, les di un generoso bono a todos y les he mandado a casa, les dije que en cuanto esto estuviera listo podían marcharse— agregó.
—Vale...— aceptó lentamente— Te creeré por ahora—regresó su atención a la habitación, era una decoración tan hermosa— Es todo muy hermoso— halagó admirado, se acercó al alto pino lleno de luces, esferas, listones y color— Siempre me ha encantado navidad ¿sabes?— le confesó con una enorme sonrisa y enseguida esta desapareció— Diablos— reaccionó alarmado— Debo llamar a casa— recordó que había dejado el celular arriba con su ropa y señaló el teléfono en una mesa junto a uno de los cómodos sillones— ¿Puedo llamar desde aquí?— preguntó y Czar le hizo una seña indicándole que era libre de hacerlo.
Eliott se sentó marcando y Czar se sentó a su lado. El menor se apoyó en él mientras esperaba que contestaran y Czar lo abrazó, cuando comenzó a hablar le acarició el cabello y finalmente Eliott terminó recostado en sus piernas mientras hablaba, disfrutando de las caricias en su cabello.
—Sí, feliz navidad también a ti, mamá— felicitó mientras se despedía aunque ya lo había hecho varias veces durante la llamada— También te amo, mamá— aunque al decirlo miraba a Czar y este le devolvía la cálida mirada. Eliott al fin colgó y Czar devolvió el aparato a su lugar para volver a concentrarse en él.
—¿No hay ni una palabra de cariño para mí?— preguntó y Eliott le miró a los ojos.
—¿Feliz navidad?— probó con una pícara sonrisa.
—Te amo-. Czar respondió simple llano y directo del corazón.
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Wuuuuuu los tengo todos consentidos, segundo capi seguido de arrumacos XD tienen que darnos crédito, les damos cositas bonitas de vez en cuando XD
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El toque de Czar
RomanceEliott es un actor que busca la gloria y Czar Kyros puede dársela, pero ¿cuál será el precio que tendrá que pagar? Historia relacionada con 'No te enamores de Ángel'