-¿Qué?- Le dije con un tono de asombro.
-Quiero ser el único hombre de tu vida.- Me respondió viendo a mis ojos.
-Jin, ¿de qué hablas? Yo soy una chica de talla grande, jamás puedes estar con alguien como yo, así de...
-¿Así de qué?- Me corta en medio oración. Me quedo callada.
-Respóndeme.-Me dice con una cara de enojo.
-Así de gorda.- Le conteste casi que en un tono de susurro.
-Tú te lo buscaste.- Me dijo, y se levantó de donde estaba sentado, agarró mi mano y me llevó hacia la cocina.
-¿Qué haces Jin?- le preguntó preocupada.
Me lleva hacia una pared lisa de la cocina y me tira hacia ella.
-DEJA DE DECIR QUE ERES GORDA.- Me dice, ya enojado.
-Jin...
-Tú eres hermosa. Y yo he cometido un enorme error al hacerte pensar lo contrario.
-Jin... No hagas esto. Yo sé que lo haces por pura lástima.
-¿Pura lástima?- Me dice al acercarse más a mi.
-Sí. Y creo que ya es hora de que te vayas.
-No, déjame enseñarte que lo que siento por ti no es lástima.
-Jin... Déjame salir de este espacio tan pequeño, ocupo respirar.
-¿Tú crees que te voy a dejar ir? Tú ya no eres de nadie más. Tú eres mía. ¿Te queda claro?
-¿Tuya?
-Sí. No quiero que le hables a Hoseok tan íntimamente como lo haces, no quiero que él venga a tu apartamento, no quiero verte abrazada con alguien más que no sea yo.
Yo quedo petrificada al escuchar semejantes palabras.
Aún arrinconada hacia la pared, veo a Jin. A una de las 7 maravillas del mundo. Al hombre más guapo. Solo lo veo a él. Enseñándome sus sentimientos, que no entiendo. Lo quiero solo para mí, pero... ¿Qué hago?
Mi pierna derecha pesa más que Jin completo. ¿Cómo va a querer estar conmigo?
Al hundirme en este pensamiento, Jin me despierta de este mismo con un beso.
Me besa apasionadamente, y yo igual. Él es mi todo, en este momento siento que encajamos. Siento que somos uno para el otro. Somos uno solo.
Me separo al pensar en lo malo de esta situación.
-¿Qué pasa?- Me pregunta Jin.
-Nada...- le respondo.
Él sabe lo que estoy pensando. Así que jala de mi y me da un abrazo.
-No te sientas mal, te lo ruego.- Me dice Jin al abrazarme.
Yo sigo sin entender, me está tratando como si enserio le gustara.
Veo el reloj de la cocina, y miro que ya es casi media noche, y yo tenía que trabajar el siguiente día.
-Creo que es hora de que te vayas. Es muy tarde.
Me pone las manos en los hombros. Y con una cara de tristeza me dice:
-Nos vemos mañana, ¿verdad?
-Pues tengo que trabajar dándoles clases a todos ustedes, así que sí.
-No me refiero a eso.
-¿Perdón?
-Mañana lo veras. Duerme bien, por favor come algo antes de dormir. No me agrada que estés con el estómago vacío.
Agarra su abrigo, y en la puerta me dice:
-Te has metido en un gran embrollo conmigo.
Y sale.
Yo, en un estado de shock, comencé a saltar como una loca. Jin, me besó, en este día, 4 veces. ¡4 VECES!
¡Soy la mujer más feliz del mundo! Pero... Yo soy como mil veces más pesada que él. No me puede alzar, ni llevarme a caballito, ni nada de eso. Y la sociedad coreana me tratará horrible cuando se de cuenta que Jin y yo tuvimos algo.
Me fui a acostar, ese día fue un día largo.
Al día siguiente, me vestí, y cuando iba a ponerme mis zapatos a la entrada de mi apartamento, vi la carta de Hoseok.
La abrí y decía:
"Mañana te tengo una sorpresa, nos vemos en tu oficina.
Acuérdate de que tenemos una cena pendiente, hoy no pude quedarme porque tenía algo muy importante que hacer, lo siento Annie.
Besos,
Hoseok (J-Hope)"
Me pongo a pensar en que podría tenerme y me pongo ansiosa por verlo, ya que odio las sorpresas.
Al llegar a la compañía, bajé de mi auto y me maree un poco.
-Nada pasa Annie, sigamos.
Sigo caminando con la cabeza en alto.
Miro mi teléfono, que Jin había dejado en el sillón de mi apartamento, y mi en mi horario veo que a las 4pm tengo que ir al gimnasio, hasta las 6pm.
Entré al edificio, y miro a Jimin.
-¡Annie! ¡Annong!
-¡Annong Jimin!
-Te ves pálida, ¿te encuentras bien?
-Sí, tranquilo. Creo que es el cansancio.
-¿Segura?
-Sí, tranquilo.
-¿Te puedo preguntar algo?
-Claro, ¿qué pasa?
-De casualidad... ¿Jin te ha dicho algo sobre el tema del...? ¿...amor?
¿SABRÁ DE AYER?
Nerviosa le respondo:
-Ehh... No... ¿Por qué? Jaja.
-Hmm, bueno. Por nada...- Me dice con una pequeña risa.
-Okay..- Me río junto a él.
Nos subimos al elevador, y en el elevador estaba Jin, junto con Suga y Tae.
Jimin me estaba contando chistes antes de entrar al elevador y yo me estaba riendo demasiado junto a él.
Jin me miró y hizo una cara de enfadado. Yo los saludé a todos y subimos al tercer piso, donde estaba mi oficina, y ellos siguieron hasta el cuarto piso. Al bajarme en el tercer piso, veo a Rapmon, y le digo:
-Rapmon, ¿qué haces acá?
-Hola Annie, te ves hermosa con esa ropa. Busco a Hoseok, ¿lo has visto por acá?
-No, pero los demás chicos ya subieron.
-Seguro está arriba... Bueno, ¡gracias! Y otra cosa... ¿Jin te ha insinuado algo?-
¿Otra vez? ¿Sabrán algo de ayer?
Sigo nerviosa y respondo:
-No... ¿Por qué me preguntas?
-Por nada, ¡me voy!-Se ríe.
-¿Adiós?- Me río.
Me mareo de nuevo, me siento mal. No importa, mejor sigo.
Entro a mi oficina, y veo fotos de mi.
En todas las paredes hay fotos de mi, riendo, haciendo muecas, concentrada y una en especial en la que estaba sonriendo hacia algo.
Veo todas las fotos con admiración y cuando veo mi escritorio, está Hoseok con una cámara en sus manos, tomando una foto de mi expresión.
-¿Cómo y cuándo has tomado todas estas fotos?
-Tú no miras los detalles.
-Esto es hermoso.
-Pues yo opino lo opuesto.
-¿Qué?
-Tú eres la hermosa.
Me quedo sin palabras y me sonrojo un poco.
-Me tengo que ir, pero nos veremos más tarde. Rapmon ya me ha llamado como 17 veces, y creo que ya está entrando en pánico.- Me dice y se ríe.
-Gracias Hoseok, esto es hermoso, enserio.
-Descuida, lo hice con cariño.
Y se va.
Me vuelvo a sentir mal.
No importa, no pasa nada.
Escucho mi teléfono sonar, es Jin.
-¿Te encuentras en tu oficina?
-Sí, ¿por qué?
-Te veo en 5 minutos.
Y me cuelga.
¿5 minutos? ¿Me veré bien? ¿Me veo presentable? Rapmon me dijo que me veía bien.
Me siento mal.
Me siento mal.
Trato de sentarme, pero caigo al piso.
Jin entra y me ve en el suelo, solo escucho que me dice:
-¡¿GLORIANNE, ESTÁS BIEN?! ¡¿QUÉ TE PASA?!
Con muy poca fuerza le digo:
-Me gustas.
Y todo se tornó negro.
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La Plus Size.
RomanceSoy una chica como cualquiera, lo único diferente sobre mí es mi peso. Sí, me pueden considerar una talla grande o bien una "plus size". Tengo piernas grandes al igual que mis caderas y mis pechos, pero a pesar de eso iré a Corea a perseguir mi sueñ...