Narrador omnisciente.
-¡Joder! -Jadiel golpeo el escritorio que estaba en frente suya, lanzándolo a la pared que estaba en frente, asustado a los cazadores, haciéndole pensar que accionar sus armas era buena idea.
Pero también estaba la posibilidad que Jadiel no tuviera el mismo efecto que los demás demonios.
Por otro lado, Jadiel estaba que echaba fuego por la boca, se estaba saliendo todo de control, su enemigo tenia las cosas muy bien planeadas.
Matthew y Jefferson habían despertado y se estaban recuperando ya de poco a poco, hasta que Dereck despertara y pudiera regenerar más rápido aquellas heridas y poder darle la sangre a ambos.
-¿Podrías calmarte? No es para tanto -aquel cazador le estaba provocando, quería sacarle de sus casillas como le había indicado aquel demonio.
Acabaría con aquella raza que había amenazado a la suya tantas veces.
-Largo todos, menos el estúpido que acaba de hablar.
-Pero...
-Que se vayan -la voz de Jadiel asusto a los demás cazadores, ya que era una más profunda además de siniestra, que hasta había causado un eco en aquella oficina.
Todo salieron, menos aquel que había indicado que se quedaría, pero no por su cuenta, ya que le estaban temblando las piernas, las manos, todo en general.
-¿Te crees muy gracioso no? -seguía sin voltearse, las sombras empezaron a alborotarse.
Jadiel estaba enojado si no es que algo más.
-Pues es verdad... No es para tanto... Aquellos ataques.
-Claro -Jadiel se volteo, dando la cara aquel cazador, la iris de sus ojo ya estaba lila, además que ciertas venas de sus ojos tenían la misma tonalidad.
Estaba furioso.
-A ver, cazadores de pacotilla -una sombra negra, algo delgada, empezó a rodearle, haciendo un circulo mientras giraba y giraba a su alrededor -, ¿qué pasaría si alguien golpea a tu mujer? -la sombra se elevó cuando Jadiel tendió su dedo índice, haciendo una pequeña capa en frente suya, mostrándole la imagen de su mujer, golpeada, con el rostro desfigurado -, ¿qué pasaría si alguien ataca a tu hijo? -de nuevo, la sombra de un lado suyo se elevo, mostrando la imagen de su hijo, de igual manera que su mujer, estaba desfigurado del rostro -, ahora dime, ¿qué pasaría si tu hija estuviera en coma? -de su otro lado salio aquella imagen que le perturbó la mente, haciéndole gritar de terror, su hija tenia desfigurada la cara, al igual que, tenia varias partes de su cuerpo vendadas y otras le faltaban.
-¡Basta! ¡Deja de hacer esto!
-¡Reponde hijo de puta! -aquellas imágenes desaparecieron, dándole paso a una llamarada, el fuego no le quemaba, sin embargo, hacia que se asfixiara -, ¡Responde maldito cabrón! ¡¿Qué sentirías?!
-¡Jadiel! ¡deja de hacer lo que estas haciendo! ¡huele todo el puto pasillo a humo! -la voz de Zeus resonó detrás de la puerta, tratando de calmar a la bestia que se había soltado.
Más que bestia, era un demonio, la viva reencarnación de un ser, creado por Lucifer.
-¡Callate Zeus! ¡estoy atendiendo asuntos!
-¡A mi no me callas intento de satán! ¡le bajas a tu rollo o yo mismo voy y te saco de un huevo!
-¡Vete joder! -Jadiel extendió su mano, al igual que su palma, el fuego fue creciendo a un lado de el cuerpo del cazador mientras iba cerrando su puño el fuego se acercaba lentamente a él, y a medida que se acercaba, le empezaba a quemar.
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Cuando El Cielo Se Caiga (Yaoi)
VampirosEl trató de Lawliet es aquel que mantiene a los vampiros, demonios, brujas y licántropos a raya con los humanos. Pero este mismo no afecta a los humanos. Hay una organización llamada "Cazadores de Vampiros" que no solo cazan vampiros si no todo ti...