Mi pinche alocada tia Emy

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Todas adoptamos a Emy como nuestra tía, a pesar de la diferencia horaria que hay entre Argentina y México ella tiene su ratito para conectarse al " GreySteell" y envellecernos con sus locuras y sobretodo con su vos.

***

La noche se tornaba tranquila en el sanatorio, Emy había pasado las nuevas historia clínicas de los pacientes ingresantes y a pesar de ser viernes era muy tranquila, se dirigió a la sala de doctores para prepararse un café, cuando ingresó a la sala oyó unos ruidos provenientes de la sala continua y para su asombro ahí estaba el cirujano Luis en un acto totalmente sexual con la enfermera Salomé, Emy pensó en irse y volver a su lugar de trabajo pero la curiosidad traspaso los límites, el morbo y la excitación pudieron más y Emy quería ver mucho más. Al escuchar los gritos de placer de Salomé Emy no pudo parar y salió de su trance y volvió a su escritorio, su respiración era acelerada y en su mente no podía dejar de pensar lo que había visto.

Luego de media hora Salomé llegó a la recepción, se le veía muy contenta, Emy no quería ponerse nerviosa para que no se diera cuenta que había presenciado lo de la sala, pero Salomé llegó hacia ella y le dijo: te gustó lo que viste? Porque si fue así Luis querrá probar que tan rico sabes.

A Emy se le aceleró el corazón a mil y no supo que contestar, justo en ese instante Luis entró recién bañado anunciando que su turno ya había terminado, Emy, Emy donde andas viajando? Dijo Luis
Perdón Doctor: dijo Emy
Qué necesita? La ficha Emy, para marcar la salida: dijo Luis. Emy se la entregó , Luis marcó y se retiró no sin antes desearle buena jornada y hacerle un giño.

Emy pensó que jamás un doctor se le había de esa manera. Su turno continuó normal hasta finalizar la jornada. La semana transcurrió y Emy no podía dejar de pensar en el doctor Luis, era apuesto de unos 32 años, alto, siempre lleva barba de tres días y su contextura física es adorable ya que recurre toda la semana al gimnasio del sanatorio.

Llegó viernes por la noche Emy estaba dando vueltas a su cena en la sala de doctores su imaginación volaba pensando en Luis, en el momento en que se dirigió a la bacha para lavar su plato, la puerta se abrió y Luis un ingreso con un café en la mano, hola Emy: dijo Luis. Hola : dijo Emy; en menos de un segundo Emy sintió a Luis detrás de ella.

Emy hueles muy bien: dijo Luis
Doctor: tartamudeo Emy
Me gustas Emy y se que yo también te gustó o no? Dijo: Luis
Yo, yo, yo Decía Emy, tu no digas nada y besame: dijo Luis.

La puerta de la sala de conferencias se cerró y lo que esa noche se vivió en aquella habitación fue tan excitante que se volvió a repetir...

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