El Viaje De Mis Sueños » Jack J

Capítulo 18

—¿Johnson?-pregunto extrañada levantándome del banco al verle ahí parado delante de la entrada.

Se le ve triste.

Gira su cabeza y cuando me ve una sonrisa sale sobre su rostro.
Se acerca a mi a paso rápido hasta quedar frente a mí y en un repentino movimiento sus labios establecen contacto con los míos, una de sus manos se posa sobre mi cintura mientas que la otra sostiene mi mejilla suavemente. Qué bien sienta de nuevo sus labios sobre los míos.

—Lo siento.-dice cuando nos separamos de ese dulce beso apoyando su frente en la mía.—Me puse así porque estaba celoso y ni siquiera dejé que te explicaras. Me gustas. De verdad que me gustas mucho.

Una amplia y tonta sonrisa aparece en mi cara.

—Tu también me gustas mucho, Jack.

Deja un rápido beso en mi mejilla y se separa cogiendo una de mis manos.

—Pensaba que ya te habrías ido. ¿Tu avión no salía a las ocho?
—Si... Y ya habrá salido o estará saliendo, pero... he perdido mi pasaporte.-suelto lo último del tirón.
—¿Qué?¿Dónde?
—Si supiera dónde está no estaría perdido.
—Cierto, perdona.-dice con una sonrisa divertida.—¿Qué harás ahora?
—Buscar un hotel barato... llamar a mi madre e intentar recuperar el pasaporte cuanto antes.-el asiente serio, aunque si estoy con él no me hace falta darme taaanta prisa por encontrar el pasaporte.
—Claro, yo te ayudaré en todo lo que necesites Abril. Y no hace falta que busques hotel, nosotros tenemos una habitación libre.
—No quiero molestaros Jack.
—No molestas.-sonríe ampliamente y me guiña un ojo.
—De verdad, prefiero no molestar. ¿Sabes de algún hotel barato?
—Si–suspira—vamos.

Me guía hasta su coche donde meto la maleta en el maletero y me siento en el lado del copiloto.
Vamos con la música puesta, yo voy con la mirada fija en la ventanilla y de vez en cuando veo de reojo como me mira pero ninguno dice nada. Es un silencio cómodo y tranquilo.
Veo como nos alejamos de la ciudad y entramos en una especie de urbanización... Por aquí no hay hoteles...

—Johnson, ¿dónde vamos?-digo apartando la vista de la ventanilla y fijándola en el.
—A un hotel... gratis.-sonríe—A mi casa.
—Pero...
—Pero nada.-me interrumpe.—No quería que estuvieses sola en un hotel.

No digo nada más.
Aparca el coche al lado de un jeep negro. La casa a simple vista parece de dos pisos.
J saca mi maleta de la parte trasera del coche y intento cogerla pero el se niega y acaba llevándola el.

Entramos por la puerta y lo primero que se ve son unas escaleras, a la derecha una entrada que supongo que llevará al salón. Sigo a Johnson escaleras arriba y entramos en la última puerta a la izquierda. Es una habitación con una cama individual, ahí deja mi maleta y me mira.

—Gracias.-digo acercándome a la maleta y apartándola a un lado de la habitación. La verdad, se lo agradezco mucho.
—No hay de qué.-dice con una sonrisa.—Vamos a la cocina, seguro que G ya está ahí cenando algo.

Le sigo escaleras abajo y entramos por donde había visto antes, lleva al salón como había pensado.

—Jooohnson!-se escucha desde la habitación contigua a el salón—¿Has conseguido ver a tu chica?-se asoma por la puerta.—Oh, Abril, hola.-sonríe ampliamente como si no hubiera dicho nada.

Su chica. Suena bien.

Entramos por esa misma puerta y da a la cocina, en la encimera ya hay un plato medio terminado.

—¿Qué quieres cenar Abril?-me pregunta J abriendo la nevera.
—Lo que quieras, a mí ma da igual.

Prepara huevos fritos y cenamos, yo en frente de Gilinsky, que cuando aún no he terminado el se levanta dejando el plato en el fregadero. Johnson y yo acabamos más o menos a la vez y yo me pongo a lavar los platos, ya que me deja estar aquí gratis, algo tengo que hacer.

—No tienes porque lavar tu los platos.-J se pone detrás de mí con las manos sobre mi cintura.
—Claro que si, es lo mínimo que puedo hacer.

Acabo en seguida y Jack me acompaña arriba, me enseña dónde está el baño y me lavo los dientes.

—¿Vemos una película?-me pregunta el.
—Claro.

Bajamos de nuevo y nos sentamos en el sofá. Elige una película de Netflix, ni siquiera he visto el título, pero el actor es bastante guapo. Me quito los zapatos y me siento con las piernas cruzadas con la cabeza apoyada en su hombro. Nunca he estado tan cómoda con un chico.

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