Capítulo 21 • Nate

423 29 6
                                    

Paseando por el centro comercial encuentro una heladería y como no, entro. Los helados son mi debilidad.

Mientras me estoy comiendo mi helado llamo por teléfono a Johnson, ya que ahora puedo, para preguntarle si van a estar mucho más en el estudio pero no me coge el teléfono. Estarán grabando, no les molestaré más.
Decido llamar a Tamara que enseguida me coge el teléfono tan alegre como siempre y quedamos en el paseo de Venice Beach.

Estoy sentada en un banco esperándola y en seguida veo una melena roja venir hacia mi.
Me levanto y nos abrazamos muy fuerte.

—¿Y eso que no te has ido a España?¿Cómo estás?¿Sigues viendo a Johnson?-me empieza a atacar con preguntas
—Wow espera más despacio.-digo riendo.—Vamos a pasear.

Comenzamos a seguir el camino del paseo en silencio pero enseguida me vuelve a preguntar cosas.

—¿Porqué no has vuelto a España?-esta vez solo hace una.
—Perdí el pasaporte y bueno, hasta que no lo encuentre no puedo hacer nada.-asiente ante mi breve explicación.
—¿Y estás en un hotel?
—No-de repente noto como el color sube a mis mejillas pero no sé porque.—En casa de los Jacks.
—¿¡QUÉ!? Vale cuéntame todo ya, ahora mismo, Abril Dios.

Río ante su reacción y me mira sonriendo negando con la cabeza.

—No te rías, quiero saberlo todo.-dice insistiendo.
—Pues solo he dormido ahí una noche, en otra habitación que tienen. Y no sé qué más decirte, es que no hay más.
—Johnson y tú hacéis tan bonita pareja...
—No somos pareja.-río nerviosa mirando al suelo.—Él... No se me hace sentir cosas que nunca había sentido jamás. Pero no somos pareja.
—No sois pareja... Aún.-sonríe ampliamente.—¿No habéis hablado nada?
—Me ha dicho que le gusto, y yo también se lo he dicho, pero nada más. Ahora dime, ¿cómo vas con lo de irte a España?
—Pues haciendo maletas y eso... Por lo menos os tendré a vosotras ahí.-asiento sonriente.

Cuando voy a preguntarle otra cosa algo choca conmigo, me quedo sin respiración por el golpe y caigo al suelo.
Noto mucho peso encima de mi, abro los ojos gruñendo y veo al causante del golpe encima de mi mirándome fijamente.

—¡Joder quítate de encima!-digo gritando.
—Perdón, mierda, lo siento.-se levanta rápido y me tiende la mano.

Dudo entre sí cogerla o no pero al final lo hago y tira de mí hasta que quedo de pie.
Hago una mueca de dolor.

—Podrías mirar por dónde vas.-levanto la mirada de mis rodillas hasta él.

Esta mirándome fijamente, no lleva camiseta y lo que más me llama la atención de él es su tatuaje del hombro. Son unas flores rojas con las hojas verdes.

—Lo siento iba distraído...-sonríe y unos grandes hoyuelos se le marcan en las mejillas.

Ay no, me encantan los hoyuelos. Joder.

—Me llamo Nate. Puedes llamarme Skate.-dice mirando por todo el suelo de alrededor buscando algo.
—¿Skate?
—Si, justamente lo que busco ahora mismo, mi skate.-me río, no se porque y el vuelve a sonreírme.—No te rías, a salido disparado cuando he chocado contigo.-se rasca la nuca riendo.

Miro alrededor y hay un par de personas paradas mirando, Tamara también mira, y parece sorprendida. La verdad que apenas me he hecho daño y ha sido un golpe fuerte.

—¿Tú cómo te llamas preciosa?-alguien le da su skate y susurra un gracias hacia la persona.

La gente se ha ido yendo cuando ha visto que estamos bien y Tamara sigue mirándonos.

—Me llamo Abril, y me tengo que ir ya.-digo caminando hacia Tamara.
—Abril.-le oigo decir mientras me alejo y le miro.—Espero volver a verte.

Me encojo de hombros sonriéndole y vuelvo a girarme.

—Joder que bueno que estaba.-dice Tamara cuando ya nos hemos alejado un poco.

Río ante su comentario y seguimos hablando de nuestras cosas hasta que suena mi teléfono.

—¿Diga?
—¿Abril?-puedo oír la voz de Johnson.
—Si soy yo, ya puedo llamar.
—Genial. ¿Vamos a comer juntos?
—Claro.-contesto sonriendo ante su petición de ir a comer aunque no me vea.

Tamara me mira frunciendo el ceño pero luego sonríe cuando le digo que es Johnson.

—Vale, ¿dónde estás? Para irte a buscar.

••••

Voy en el coche de Johnson mirando por la ventanilla. No tengo ni idea de dónde me está llevando. Llegamos a un parking de arena así que supongo que me ha traído a un restaurante de playa.

Bajamos del coche, lo rodea y entrelaza su mano con la mía. Caminamos hasta las escaleras de entrada del restaurante y subimos los escalones que tiene.

Nos paramos en una especie de recepción donde un camarero está de pie frente una libreta abierta. Por la decoración, parece un sitio caro.

—Tenía reserva para dos personas, a nombre de Jack Johnson.
—Sí , sígame señor Johnson, su mesa ya está lista.

Seguimos al camarero por las mesas y salimos a la terraza.

—Esa es, enseguida venimos con las cartas.-dice señalando una mesa al lado de la barandilla.

Vaya.

Johnson hecha hacia atrás una silla y hace un gesto para que me siente.
Nunca había estado con un chico tan caballeroso.

Me sonrojo y me acerco, me está mirando muy sonriente, me siento y me acerca a la mesa.

—Gracias.-consigo decir, noto mis mejillas ardiendo.

Se sienta enfrente y alarga la mano poniéndola sobre la mía.

—Que bonitas vistas.-digo mirando por la terraza al mar.
—Mis vistas son más bonitas.-desvío la mirada del mar y le miro a el.

Tiene su vista fija sobre la mía y con el pulgar acaricia el dorso de mi mano.

El Viaje De Mis Sueños » Jack J Donde viven las historias. Descúbrelo ahora