◇Especial 1/2◇

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"Estoy..... ¿Muerto?"

El tema más votado fue "Como ve Samuel a ____ después de que murió"
Espero que lo disfruten ^^

Narra Samuel!

Sentí un intenso dolor en mi cuello, y después... Nada... Escuché el grito de mi hermana, no se que ésta pasando, pero, no puedo moverme, ni... Respirar... ¿¡Por qué no puedo respirar?! Espera... Estoy... Estoy... ¿Muerto?... No, no, simplemente no, no puedo estar muerto, ¡NO!

??: ¿Samuel? ¡Oh mi niño! ¡No puedes estar aquí ahora!- Me giré, ahora podía moverme, quien había hablado, era..... ¿Mi madre? Corrí hacia ella y la rodeé con mis brazos fuertemente, ella me devolvió el abrazo.

??: Hijo, no puedes estar aquí, sólo tienes 24 años- dijo casi sollozando, y mi padre no es de los que lloran

Samuel: ¿Mamá?- Ella asintió- ¿Papá?- Él imitó el gesto que mi madre había hecho- Estoy... Bueno... Ya saben... ¿Muerto?- pregunté con miedo a la respuesta, aunque técnicamente ya la sabía, pero quería escucharlo venir de otra persona

Madre: Si... Yo... Lo siento mucho hijo- Asentí pesadez, me di cuenta de que estaba llorando, Yo estaba llorando, mis padres corrieron a abrazarme, joder, estoy putamente asustado, ¿Esto significa que no volveré a ver a ____? ¿O a Miranda? ¿O a Willy? ¿O a Frank? ¿Y que hay de todos mis amigos? Jamás volveré a tomar unas cervezas con Rubius, o escuchar los consejos de Luzuriaga, no.
Estoy muerto

{...}

Estaba sentado en una silla de madera blanca, no todo es blanco aquí arriba, pero todas las sillas son o blancas o de color crema, quien quiera que estuvo a cargo de decorar este lugar, tenía muy buen gusto, bueno, el caso es, que estaba acompañado por un tío de piel aperlada, ojos negros y cabello marrón del otro lado de la mesa.

Tyreese: Yo soy Tyreese, era uno de los ángeles que estaban a cargo de cuidarte, lamentablemente yo no estaba cuando...- hizo una pausa, como demostrandome que lo sentía, había dejado de llorar hace ya 2 o 3 horas, pero sigo sintiendo las lágrimas en mis mejillas- Cuando esto paso- dijo poniendo su mano en mi hombro en un gesto de apoyo- Tienes dos opciones, quedarte aquí o volver al mundo de los vivo- Lo interrumpí, poniéndome de pie de un salto y tirando la silla en la que estaba sentado

Samuel: ¡Quiero volver!- él suspiró

Tyreese: Dejame terminar- dijo soltando un suspiro- Si tu regresas, una de ellas dos tiene que morir- dos brechas se abrieron en el suelo, una me mostraba a ____ y otra a una niña de tan sólo 4 años (o es la edad que yo calculé)

Samuel: Entonces... Yo... Me quedaré- dije admirando como la niña corría a los brazos de su madre, y por otro lado, vi a mi hermana, ¿Matando a Sardothien? Corrí hasta allí, tan desesperado que casi caigo, Tyreese puso una mano en mi pecho.

Tyreese: Ah ah- dijo negando con la cabeza- No puedes bajar hasta que tengas, MÍNIMO- Dijo resaltando la palabra "mínimo"- Dos semanas aquí- me detuve, vi con horror como soltaba el arma y corría hasta mi cadáver, llorando

Samuel: Esto... ¿Ésta pasando justo ahora?- Pregunté, mirando a mi hermana llorar en mi pecho

Tyreese: No... Eso paso hace unas horas, no acosamos a los vivos Samuel- dijo con una sonrisa ladeada, yo le devolví la sonrisa- Hay ciertas cosas que necesitas saber, y ciertas reglas que tienes que seguir- asentí mientras caminaba con él a... No sé a donde- Cosa número uno que necesitas saber: Te daremos alas, regla número uno, no podrás salir de aquí sin mi autorización o la de cualquier otro arcángel- Wow, ¿Alas?, estar muerto no es tan malo después de todo...

{...}

Unas horas después de que Tyreese me hubiese dicho todas las reglas y "cosas" que necesitaba saber, me establecí en un pequeño cuarto que una arcángel llamada Sara me otorgó, ya quiero mis alas, me las darán en una semana, por ahora, no puedo ir a "El domo" el lugar más genial de... Aquí, desde ahí puedes viajar a cualquier parte del mundo, también están los registros de todos los ángeles y las armas que se les otorgaban, si, armas, no eran armas de fuego, eran armas blancas, espadas, hachas, cuchillos, látigos, arcos, etcétera.
A mi me dieron un arco y espadas gemelas, ambas armas las llevo colgadas a la espalda, la regla con ellas es que no debo usarlas a menos de que sea necesario, algo así como que me encuentre un demonio en la tierra, o algo así, nunca para matar, si no para defenderse, nunca me imaginé nada parecido a esto, pensé que una vez que morías, te quedabas vagando y viviendo una vida relajada, pero al parecer no, aquí también tenemos que luchar, es raro, pero es la realidad.

*2 semanas después*

Estaba en mi habitación, leyendo uno de los libros que Sara me había prestado, cuando Tyreese entró por la entrada principal, y es que en los últimos días se le había dado por entrar por la ventana, me miró con una sonrisa, bajé el libro y lo puse en mi mesita de noche.

Tyreese: Es hora de tu primera visita al mundo de los vivos Samuel- dijo con un tono de voz bastante alegre.

Sonreí.


El Anillo Negro (Guillermo/Willy Y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora