El amor todo lo puede.

En total somos tres.

Era un día soleado, los árboles crujían a la tonada de el canto de los pájaros, el viento soplaba lentamente con su aspecto fogoso de calor que
rondaba por el parque de Berlín, Tiergarten, el lugar perfecto para que los adolescentes inunden las calles de alegría y amistad junto a sus amigos y familia. Para mi ese día era como cualquier otro en sí, lo que más apreciaba era mi cama y mis dvd's cuando chica, es que esos momentos me hacían recordar cuando no era la niña a la que los padres no les importaba sus necesidades y cosas en especial que una adolescente piensa. En el día lo único que podía mejorar era en compañía de Chad y Támara, mis dos mejores amigos, no era una amistad pasajera, ¡No señor! Eran de esas amistades que no cambiaban aunque pasaran los años...
-Esto es un asco, odio el día así, en verdad lo prefiero gris y otoñal...aparte tengo hambre y Chad no se apura.
-Dios mío, ya Rita puedes parar lo entiendo y en lo único que estoy de acuerdo es en que Chad no se apura...¡Idiota ven acá!. Muero de hambre y jamás me perdería las hamburguesas de Mr. Smoty. No señor.
**Chad se acercaba con su respiro agitado y mal gastado**
-¿Qué sucede? ¿Acaso no tienen sueños malditas?
-Si tenemos sueños, los cuales ya te los dijimos, pero jamás me hagas esperar por una hamburguesa porque juro que vas a sufrir las puras consecuencias. (Chad tenía cara de que no me importaba nada porque sabía que el enojo de Tamara se iba a ir)
-En fin como les contaba, tengo más de 140 fotos que tengo que revelar, y si es antes de mes mejor. ¡Es que estoy tan emocionado!
Miraba tan atentamente como Chad decía lo que tenía ganas de hacer antes de fin de mes, que empezó a contar cosas tan graciosas que Tamara como venia tomando un refresco hizo que se le saliera por la nariz...lo cual no pude aguantar de la risa y como también soy propensa a orinarme no pude contenerme y salió como una catarata. Obviamente mis amigos me vieron, era los más vergonzoso que me pudo llegar a pasar en un parque, pero en fin... Ellos no paraban de reír y bueno yo y mis torpezas causaron una carcajada que se escucho a más de media cuadra.
-Ya van a ver malditos idiotas!!! *decia yo a través de carcajadas* ojalá que les pase esto a ustedes!
-HAHAHAHAA OKEY REINA DEL PIS, ASEGÚRATE LA PRÓXIMA DE TRAER PAÑAL!
-HAAAAA YA TAM, DEJÉMOSLA...BUENO NO!
Todo el camino a Mr. Smoty se convirtió en pura risa, hasta llegar al lugar esperado, el lugar soñado de Tamara. Nos quedamos como aproximadamente más de 4 horas en ese lugar al que muchos llamaban asco, es que era un lugar un poco oscuro y ya estaba la mayoría de las cosas muy desgastadas, pero no era nada malo para poder pasar un buen momento y comer con mis amigos en paz...
Se hizo de noche. Eran ya las 20:30 y tenía que estar en casa antes de que mi mamá llegara, tardamos un buen rato en caminar ya que las calles se condensaban de lo frías que estaban, el viento soplaba ráfagas como si su trabajo fuese el más importante en el mes, se nos congelaron las manos, la temperatura era de -4 grados con una gran probabilidad de que nieve. Cuando mis amigos llegaron a destino pude notar un gran alivio a mi alrededor, no era que haya odiado su compañía, pero tenía ganas de disfrutar un momento a solas. Mi alma, y yo éramos las únicas que merodeaban en la zona. El clima era tan seco y frío que ni el vagabundo estaba dormido en la vereda...
Llegué, al fin llegué!- exclamé- subí las escaleras y me acurruqué en las sabanas sin más nada que hacer.