Condéname | Larry Stylinson | Camila Pinilla.

Capítulo 45

Capítulo 45.

Zayn se sentía incómodo al saber que Liam estaba en el baúl del auto. Quería y a la vez no quería verlo. Porque al verlo, se sentiría feliz y a la vez triste, porque Liam no lo recuerda. Era un completo lio de sentimientos.

Zack los llamó y les dio indicaciones de un refugio nuevo. Llegaron a una casa no muy grande, ésta estaba junto a una pequeña laguna que estaba repleta de peces anaranjados.

Todos bajaron del auto, Zack salió de la casa, se veía agitado.

- ¿Están todos bien? – Pregunto

- Sí, todos bien – Respondió Niall.

- ¿Tienen a Liam? – Volvió a interrogar Zack.

- Si, está en la parte de atrás. – Dijo Félix.

- Llevémoslo adentro. – Zayn sintió su corazón latir desenfrenado.

- Esperen, yo...no quiero verlo, entrare primero si no les importa.

- No hay problema, Zayn. Adelante es tu casa.

- Gracias, Zack – Agradeció tratando de sonar amable a pesar de todo el dolor que Zack le había causado.

- Voy contigo Zayn. – Comento Harry.

Harry siguió y Louis siguieron a Zayn. Entraron al recibidor y subieron unas largas escaleras de caracol, entraron a una de las habitaciones compartidas. Había cuatro camas. Cada uno se sentó en una de ella, minutos después entro Félix.

- Niall se ofreció a interrogar a Liam junto a Zack. Vendrá más tarde.

- Siéntate, Félix. – Pidió Harry. Félix obedeció.

De pronto escucharon a Liam, tratando de luchar contra los agarres de Niall y Zack. Lo que Zayn escuchaba era Liam gritando, decía era, "Suéltenme" Una y otra vez. Se acostó en la cama, cerró los ojos y puso la almohada sobre su rostro.

Odiaba escuchar como Liam sufría. Lo detestaba con toda su alma.

Zack y Niall entraron a Liam a la casa, Liam trataba de soltarse de sus agarres y gritaba mucho.

- Hay que llevarlo al sótano. – Dijo Zack con dificulta. Niall asintió.

- ¡Suéltenme maldita sea! – Gruño Liam.

- ¡Quédate quieto Liam! – Respondió el irlandés.

Bajaron las escaleras, aunque con Liam así era complicado. Un guardia abrió una puerta de metal reforzado, entraron y otros dos guardias los esperaban.

Zack tenía demasiada seguridad. Prefería estar seguro que en peligro, como todos.

- Sujétenlo a la silla – Ordeno Zack.

Los dos guardias tomaron a Liam y lo aferraron a una silla de madera. Lo amarraron con una soga, así Liam no podría moverse. Zack y Niall se acercaron a Liam.

- Liam, te haremos unas cuantas preguntas, quiero que las respondas con honestidad. – Hablo Zack.

- No les diré nada – Dijo serio y mirándolos con odio.

- No nos hagas ser malos contigo Liam. – Volvió a hablar Zack

- ¿Dónde está? – Pregunto Liam.

- ¿Quién? – Hablo Niall.

- Zayn.

Valla, aun se preocupa por él. Se dijo el rubio.