4 años antes.
-Uy Idris ¿no te quieres quedar a comer?
Elena escucho esos gritos otra vez. Cada que ese trio pasaba por el lugar donde ella y sus amigas estaban comiendo siempre tenían que mencionar a ese tal Idris y gritar como si estuvieran a kilómetros de distancia, y no lo habría notado si no fuera por su amiga Constanza porque Elena como siempre tan distraída con otras cosas jamás se hubiera dado cuenta por si sola.
-sabes Elena, ese chico esta muerto por ti
Le dijo Constanza muy animada y con cara de picara, esa donde alzas mas las cejas de lo normal y tienes una sonrisa como de boba entusiasmada hasta le brillaban los ojos.
-estas loca, nisiquiera eh visto a ese tal Idris, en que grupo va, quizá es un sordo que sus amigos tienen que gritarle tanto para que el les escuche bien.
Constanza comenzó a reírse a carcajadas
-eres muy bruta amiga, yo me encargare de que lo conozcas.
-oh vamos Cons, no es necesario, no necesito un novio
-claro que lo necesitas, todos necesitamos un novio –exclamo muy dramática que casi cae de la silla.
-claro que no, tú necesitas un novio, yo necesito terminar de comer y regresar al salón a terminar de hacer la tarea.
-mira, esa cara de niña boba a nadie engaña Elena, te mueres por un hombre que venga en caballo blanco y un ramo de rosas
Ambas juntaros sus manos a la altura de su pecho y suspiraron mirando al cielo, cual niñas soñando.
-vale si, quiero un novio, más no lo necesito. Pero aquí- señalo la escuela –no lo voy a encontrar, y menos como lo imagino, eso solo pasa en la universidad, de otros países, en películas y libros solamente, no aquí, no a mí, no a ti.
-eres una pesimista.
En el otro extremo de la escuela Preparatoria del centro Idris quería ahorcar a sus amigos, llevaban toda la semana haciéndole burla con esa niña, solo porque una vez no pudo dejar de mirarla pues estaba guapa con ese vestido que se había puesto pero no es que estuviera enamorado o algo por el estilo solo estaba, ¿Cómo era la palabra? Ah sí, impresionado.
-es un año menor no me interesa. –decía Idris.
-¿y qué? Harían una bonita pareja Idrisito.
-luna ya basta, la pobre ni siquiera me voltea a ver, a de creer que estamos locos –se desesperó y entro al salón de clases
-Idris vamos no seas aguafiestas solo es broma –le respondió Lolo quien estaba recargado en la puerta con los brazos cruzados, su segundo mejor amigo, su mano izquierda, el chico divertido y relajado del trio.
-solo ya dejen de hacerlo, no quiero pasar una vergüenza con ella, por cierto, ¿Cuál es su nombre?
Los tres se miraron sin saber que contestar.
En la salida de la escuela, en las bancas antes del portón junto a las rosas del señor Hernández, Constanza y Elena esperaban que dieran las 2 para salir corriendo.
-mira Elena, él es Idris –señalo disimuladamente a la parte de la explanada donde Idris estaba sentado solo con su celular sin percatarse que las chicas lo estaban observando. –es guapo ¿no?
Elena lo observo de arriba abajo, le pareció un chico muy simpático y se sintió muy linda al pensar que él estaba apuntando hacia ella.
-bueno, no está mal.
-okey, déjamelo todo a mí –sonrió Constanza tan ampliamente que parecía que tenía la sonrisa del gato de Alice in Wonderland
Pasaron los días y ya se acercaba el final del año escolar y las burlas de Luna y lolo no paraban, incluso Idris ya no quería pasar cerca de Elena, pero ella se había ilusionado bastante, lo había buscado en todas las redes sociales y estaba esperando que el decidiera ya dar el paso para conocerse
-te digo que tengo que hacer todo yo siempre –le dijo Constanza a Elena.
-no tienes que hacer nada, si él no quiere acercarse yo no tengo que ir a rogarle nada –respondió Elena
Pero era demasiado tarde Constanza se dirigía hacia el trio risueño durante el descanso. Elena no sabía dónde esconderse así que se quedó parada atrás de un árbol donde ella pudiera observar con detalle los movimientos de su loca amiga. Se empezó a tronar los dedos, primero uno a uno y luego todos de montón, quería hacer lo mismo con los de los pies y tal vez morderse algunas uñas. Constanza llego a donde estaban comiendo Idris y sus amigos y lo único que podía ver es que ella animadamente estaba explicando algo y haciendo gestos y moviendo las manos, mientras que los demás le ponían mucha atención, de repente Constanza señalo hacia el árbol donde se encontraba Elena y lo único que pudo hacer fue agacharse, se sentó debajo del árbol tomando sus rodillas entre sus brazos esperando que Constanza no se acercara con Idris detrás.
-Elena... -escucho la voz de constanza
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Idris
RomanceIdris es un fotógrafo de corazón con una carrera a punto de concluir, su mejor amiga que siempre ha sido la modelo de sus mejores fotos no puede ayudarlo con su nuevo proyecto. Idris no ve nada que no sea con el lente de su cámara y así por medio d...