El canto de los ángeles

Capítulo 1:''El encuentro''

''En un sólo segundo me hipnotizaste y, no paso mucho tiempo para qué me rindiera,
sumergido en limerencia absoluta a tus pies,
en unas horas aquéllos ojos que presumes, se convirtieron en mi fría y tranquila prisión.''

Una chica se encuentra caminando a
altas horas de la noche, por las calles húmedas y solitarias de la cuidad, con los pasos fijos y concentrados en las solitarias casas y edificios que la rodean, el cielo vacío y obscuro le traen cierta nostalgia de su niñez la cual poco recuerda. Los ecos de sus pasos se escuchan en la inmensidad de las calles, pero no se atreve a mirar a sus alrededores. Una pequeña brisa acaricia su cabello que siente ondular por su cintura, aquel cabello castaño claro, llegando a naranja diría, se balanceada a sus espaldas y la mantenía un poco menos frívola. Luego los pasos se cortan;la chica oye una risa grave seguido de un disparo dirigido hacia su persona, el disparo roza su rostro y sin ningún tipo de miedo o preocupación se acerca hacia quien sostiene el arma con sus manos.

*Narra Natsu*

Me encontraba caminando, centrada en mis pensamientos mientras miraba con indiferencia las calles de mi cuidad, era de noche y la poca luz que alumbraba el pasó de mis pies me hacia entrar en una profunda nostalgia, parpadeé con tristeza y seguí caminando cuando mi concentración fue interrumpida; una bala había pasado justo al lado de mí cabeza, luego oí una repugnante voz y risa.

Oh...parece que fallé es una lastima....hahahhaha...-dijo el demonio con una horrible y enorme sonrisa-.

Tanto su sonrisa horrenda cómo su insoportable risa me irritaron, por lo tanto no pude evitar fruncir el seño al subir la cabeza.

Me prepare para la pelea, saqué dos dagas en cada mano. Nos encontrábamos en un callejón obscuro y aislado, se sentía el olor a humedad en cada esquina además de un fétido olor a podrido.

El comenzó a disparme y esquivé cada bala pero sin darme cuenta me encontraba en desventaja, al esquivar las balas poco a poco me fue moviendo al principio del callejón. Me quede acorralada y con una enorme oscuridad a un pie detrás de mi; temí que estuvieran mas criaturas esperando mi caída en esa obscuridad, por lo tanto mis nervios subieron. El demonio se acercaba cada vez mas y mas hacia mi, en una reacción rápida comience a tirar dagas a lo loco, por puro instinto y luego de lazar la primera oí un grito detrás del demonio.

-¡AAAAAAH!-grito la voz masculina asustada,el demonio luego de oírla se giro y en un momento se esfumo en la oscuridad de la noche-.

-¡¡Ten mas cuidado!!¡¡¡casi me matas!!!-me grito el chico, era alto con cabello negro y en las puntas poseía un color rojo intenso, sus ojos eran celestes claros; poseían una hermosura única que me dejo inundada por unos segundos, se sentían como un mar tranquilo y placentero, pero el sonido de sus pasos me saco del trance-.

El chico se dirigió directamente hacia mi, vestía un saco negro y una camisa blanca, tambien pantalones negros y zapatos del mismo color; al principio no me di cuenta de que tenía dos aros en su oreja izquierda pero tampoco me sorprendió ya que en esta época es normal ese tipo de cosas.

Aunque había visto sus dos ojos tenía un flequillo que tapaba uno. Me centre en su peculiar rostro mientras caminaba hacia mi y aunque era algo extraña su apariencia no dejaba de ser hermosa, su piel palida se veía perfecta al lado de sus ojos celestes claros.
El posó su mano en mi hombro y me hablo con una cara tranquila y un poco nerviosa:

-Debes tener mas cuidado,podrías llegar a lastimar a alguien y allí realmente estarías en problemas.

-Son asuntos particulares, no los comprenderás.-dije con seriedad pues aunque estuviera en presencia de el, el demonio seguia esperando una oportunidad para atacar-.