Belleza mortífera. // Jackunzel

3 Años después.

   PDV- Autor. 

     Jack ya tenia 17 años de edad, a sus 14 se perforo por primera vez, a los 15 su primer tatuaje... Las iniciales de sus mujeres mas importantes:  Elsa, Anna y Ema. Pero ese solo fue el comienzo, le gustaba sentir el dolor de la aguja en su piel, era placentero de cierto modo, su brazo izquierdo era el que mas tatuajes tenia, su pecho, abdomen y espalda no se salvaban, hasta en sus tobillos y palma del pie tenia, muchas veces buscaba los puntos mas sensibles para tatuar, piensa en áreas sensibles del cuerpo y Jack tendrá un tatuaje o tiene un tatuaje ahí...¿y de donde sacaba dinero? fácil, de sus apuestas ¿donde y que apostaba? en El callejón oscuro, o simplemente, Callejón. Ahí era donde ocurrían las carreras clandestinas mas famosas y peligrosas de la ciudad, Jack era un corredor, casi todas las noches corría, y casi siempre ganaba las apuestas, eso si, solo corría por una cantidad de dinero mas alta de lo habitual.

Su tío Adam ya no tiene que ir a sacarlo de la celda tantas veces al mes como los primeros meses en que Jack entro al mundo de las carreras y apuestas, ya que bueno, después de tantas veces que lo pillaron, el ya aprendió a huir sigilosamente de los cuervos.

Cuando le da la gana Jack se tiñe su cabello blanco de negro, o lo corta, cuando quiere darle otro aspecto. Desde el accidente Jack lleva con el un encendedor azul plateado, que le regalo su hermana Elsa, por que le recordó a el, ahora cada vez que esta nervioso o ansioso el comienza a jugar con la tapa del encendedor, y muy pocas veces lo usa para encender  un cigarrillo... u otra cosa.

PDV-Jack 

     La asquerosa alarma sonó, trate de que se apagara sin ganas, no resulto, otra vez, sin resultado, hasta Agh! Maldito despertador, me dije y lo golpeé con fuerzas, por fin había dejado de sonar, salí de entre las sabanas y me senté a la orilla de la cama, y como supuse el despertador de pacotilla se hizo pedazos, debía dejar de comprar despertadores de tan mala calidad.

Salí de la ducha y me puse él uniforme de la escuela, que para los hombres era una camisa blanca pantalones grices, una corbata verde con líneas azules y me puse un poleron negro con bolsillo a los lados, por último unas zapatillas. Baje para comer algo, Adam ya estaba sentado comiendo unas tostadas con una taza de café, leía él diario, traía sus anteojos para leer, y no levantó su vista de él para mirarme, me senté y me prepare leche con cereal.

-Ya es tarde, yo que tu ya me voy apurando -Dijo sin mirarme-

-No llegare tarde -Conteste serio y también sin mirarlo-

-¿Acaso iras en tu moto? -Levanto una ceja, me quedo mirando con su taza de café en la mano-

-Yo lo mire juntado mis cejas como en señal de duda- ¿A caso crees que llevaré mi hermosa moto a ese lugar? ¿y dejar que los demás la miren?

-Adam bajo su vista- Si no fueras tan idiota y mezquino con tu motocicleta, no tendría que ir a tu escuela cada dos meses por que cierto muchacho llega tarde constantemente a clases-Hablo moviendo su vista por las líneas del periódico de hoy-

-Pues si tanto te molesta ir no vallas, o deja de obligarme a ir a perder mi tiempo! -Dije un poco molesto, ya que no tengo nada de paciencia-

Luego de terminar de comer subí a mi cuarto a cepillarme los dientes y arreglarme un poco mas, baje las escaleras y salí de casa, camine no muy deprisa, a esta hora él autobús que me sirve para llegar a la escuela se demora mucho en pasar. Pase por la casa de Dunbroch, pero supuse que ella ya se había ido, sólo logre ver tres cabezas de cabello rojo y riso, eran sus hermanos, ellos me vieron y comenzaron a hacerme caras feas, yo les devolví lo mismo. Al entrar a mi salón, después de un regaño de la inspectora por llegar tarde, me senté junto a la rojita, nos saludamos y el profesor nos hizo callar.

-Tenemos compañero nuevo -Me susurro sin dejar de mirar al profesor-

-¿y? -Hice notar que no me interesaba para molestar a Merida-

-Ella me dio un codazo-

Mire al chico nuevos, era como de mi edad, de cabello castaño ojos verdes y tenia unas pequeñas trenzas por su nuca ¿Sera un tipo serio o revoltoso? Mmm... Da igual.
Para él descanso con Merida nos sentamos en una banca y comenzamos a ver que tal era la nueva generación que llego a primer año, nada interesante... Hasta que mis ojos se detuvieron y concentraron en una rubia de ojos esmeralda, cabello largo, se veía un poco mas baja que yo, la quede mirando por un largo rato, hasta que... quizás ella noto que alguien la miraba, se giro y nuestras miradas se encontraron, nos miramos unos segundos, y luego note sus mejillas enrojecer, me dio la espalda, y él chico nuevo de mi clase llego a su lado...deje de mirar a ese lado inmediatamente ¿A caso eran novios?