Capitulo 21

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Capitulo nuevo mis queridas chansoo's DISFRUTENLO !!!👉🙈❤😘

D.O me miraba asesinamente, mientras que yo me lo comía con la mirada. Kris estaba concentrado en decirme algo, pero aun no lo hacía.
-Muchachos, muchachos ¿Por qué no nos calmamos un poco? -dijo Xiumin. Los tres nos giramos a verlo. Asentí con la cabeza y volví mi mirada a D.O.
-De verdad estoy dolido -le dije y volví a tocar mi pecho -Jamás me lo imaginé de ti, de ti que te veías tan correcto.
-Y ahora lo ves incorrectamente deseable, ¿verdad? -dijo Kris -Hagamos un trato primo, te consigo una noche con él y me cedes tu cuarto.
-Echo -le dije sin siquiera vacilar.
-Óyeme, ¿Acaso mi dignidad vale menos que una buena cama? -le preguntó D.O sin poder creerlo.
-Por mi pobre espalda si -le dijo él rubio.
-Esa no es manera de convencerme Kris -dijo él moreno.
-Y tampoco creo que sea la adecuada -acotó Xiumin.
- ¿Lo ves? Eso se llama ser amigo -dijo Kyungsoo y se acercó para abrazar al chico de anteojitos.
-Está bien, está bien -dijo mi primo -Mmm, ¿Qué tal un beso?
Él moreno lo miró fijo por unos cuantos segundos. Soltó un leve suspiro y me miró.
-Está bien -le dijo y se puso de pie. Se acercó a mí. Y cuando estuvo lo suficientemente cerca se puso en puntas de pie. Sus labios rozaron los míos -¿Puedes agacharte un poco? No llego.
Bobamente obedecí a su petitorio. Me incliné y choqué despacio contra sus labios. Y cuando intenté mover mi boca, para obtener un poco más de ello, se alejó -Listo, su cama ya es tuya Kris.
-Pero, ¿Acaso yo no tengo poder de palabra? -pregunté.
-Ese es el máximo grado de intimidad que lograras conmigo, Park -me dijo él moreno.
-Chan, lleva mis valijas al cuarto ¿sí? -dijo mi primo.
-Yo creo que es justo -habló Xiumin.
- ¿Acaso tú solo hablas para hundirme? -le pregunté -¿Por qué me odias? No, no es justo. Ese no fue el trato Kris. ¿O me das una noche con él o no hay cama?
-D.O, ¡por dios! Dale lo que pide -le rogó.
-No, ya te lo dije. Mi dignidad vale más que una cama.
-Por favor, amigo. Por favor -le suplicó poniendo su mejor cara de sufrimiento.
Quizás lo consiga, y al fin obtenga mi noche con él moreno. De solo pensarlo ya me emociono más de lo que debería.
Todos observamos como D.O miraba fijamente a Kris, de seguro estaba pensando en cómo decirle que no, que ni loco lo haría. Hasta que se giró a verme.
- ¿Sabes Chanyeol? Pensé que eras un caballero... no se creo que fue una mala impresión. Después de todo siempre te has mostrado generoso y respetuoso para con los que quieres, y como Kris es tu primo... tu único primo por lo que he oído, y por como él habla bien de ti y lo mucho que te ama, pensé que el sentimiento era mutuo. Pero no... Si lo amaras y fueras un caballero le cederías tu cama. Creo que me equivoqué contigo -dijo y apoyó su mano sobre su pecho.
Entrecerré mis ojos y lo miré fijo por unos cuantos segundos.
-¿Sabes que ese es un chantaje muy barato, verdad? -le dije. Él sonrió.
-¿Funcionó? -me preguntó. Suspiré levemente.
-Si, funcionó -tomé las valijas de mi primo -¿Están son todas?
-Si primito lindo. Muchas gracias, te adoro, eres un encanto -me dijo él. Miré al moreno.
-Me debes una -le dije mientras caminaba.
-Cuando quieras -dijo él y los tres rieron divertidos.
Yo creo que de verdad está intentando volverme loco. Él de seguro quiere jugar conmigo. Acabo de conocer al verdadero D.O Kyungsoo. Del mismo material que mi primo, fue hecho solo para volverme loco. Aunque si debo admitir que D.O tiene algo que Kris no.
Sabe cuando decir que no, y dejarlo muy en claro. Sabe como enredarte y hacerte desear. Sabe como dar en el blanco y sabe como hacerte sentir un imbécil.
Dios mío, creo que me saqué un boleto directo al infierno. Un boleto a la locura y a mi perdición. Pero él no va a poder conmigo, él va a terminar rendido a mis pies. Eso se los puedo asegurar.
La semana pasó bastante lenta para mi gusto. Aunque algo divertida debo admitir. Sehun intentó seducir a mi primo, y el terminó siendo el seducido. No deja de hablar de él, ya me tiene loco.
Mientras tanto Luhan está haciendo todo lo posible por averiguar cosas sobre su angelito diabólico. Estos chicos ya cayeron más bajo de lo que yo creía. Ambos parecen unos idiotas detrás de unos muslos complicados.
El timbre de salida sonó, hoy es viernes. El bendito viernes. Hoy tendría mi conquista de la semana. Y ahora tenía que verme con él, para arreglar unas cositas.
-¿A dónde vas tan apurado? -me pregunto Kris.
-Tengo que hacer unas cosas -le contesté.
-Oye, ¿no te enojas si hoy vienen a dormir D.O y Xiumin? -dijo él.
-No, no hay problema. Hoy saldré -dije. Él sonrió.
-Perfecto primito, te veo luego -dio una pequeña palmada en mi brazoy apuró su paso.
Salí de salón y divisé a Hoseok a unos metros de allí. Con discreción me acerqué a él y le hice un gesto para que fuéramos al gimnasio.
Cuando estuvimos ahí caminamos hasta detrás de las gradas que estaban allí.
Él sonrió pícaramente y tomó mi corbata para cercarme a él y comenzar a besarme. Lo miré bien, mientras nuestras bocas se unían.
Pero entonces pasó de nuevo. Quien estaba frente a mí no era Hoseok, era D.O. Sus manos se colocaron alrededor de mi cuello y me acercó más a él. Instantáneamente mis ojos se cerraron y lo apreté más contra mí. Como me gustaba besarlo, como me gustaba sentir su lengua sobre la mía. Como me gusta D.O...
Bajé una de mis manos hasta su muslo y decidi acariciarlo. Lo levanté con cuidado. Entonces él se alejó un poco de mí.
-Espera Park, estamos en la Universidad -dijo agitado.
Esa no era la voz, ni el olor de D.O. Y al alejarme el espejismo se desvaneció y el encanto se perdió.
Él me dijo algo, y no escuché lo que dijo. Solo acerté a asentir con la cabeza. Se acomodó la camisa y la volvio a meter adentro del patalon. Me iba a volver a besar, pero me moví y el beso frío apenas alcanzó la comisura de mis labios.
-¿Qué sucede? -me preguntó.
-Nada bebe, ve tranquilo -le dije y me alejé más de él. Él frunció el ceño.
-¿Sabes? He notado que a todos nos dices bebe, lindo o dulce. Pero solo le dices cariño a D.O.
-No, eso no es así -dije.
-Si, puedo asegurarte que si.
-Pues entonces... no nada. Ve, ve, creo que va a ser mejor que esto lo dejemos para otro día.
-¿Qué? -preguntó.
-Si, recordé que hoy tengo... tengo que hacer unas cosas y no podré verte. Lo siento dulce...
-Él tenía razón -me dijo. Lo miré bien -Estas muy cambiado...
Se fue de allí dejándome bastante confundido. Salí del gimnasio y ya casi todo el mundo se había ido. ¿Cambiado? ¿Yo estoy cambiado? Al parecer si, y esto no puede estar pasando. Fui hasta mi moto y me subí en ella. No quería volver a casa aun. Mejor iré a dar unas vueltas por allí. Cuando la noche llegó al lugar, decidí volver. Entré a mi departamento, y escuché un par de risitas graciosas provenientes de mi habitación. Recordé que Kris me había dicho que hoy vendrían a dormir D.O y Xiumin. Mi primo salio del cuarto y me miró bien.
-¿Qué haces aquí? -me dijo.
-No quiero preguntas, no estoy de humor Wu -le dije.
-Uuuuh, que carácter -dijo mientras se acercaba a la heladera y buscaba un poco de agua.
-¿Qué hacen? -le pregunté.
-¿No era que no querías que te hable? -me dijo.
-Solo quiero saber.
-Estábamos hablando, y estábamos por mirar una película -me contestó.
-¿D.O está? -dije. Él arqueó una de sus cejas y me miró fijo.
-Si, si esta ¿Acaso viniste a casa porque D.O iba a estar aquí?
-No, claro que no -dije rápidamente -Solo tuve un pequeño problema y... ¿Por qué tengo que estar dándote explicaciones? Está es mi casa y vengo cuando tengo ganas.
-Como sea, malhumorado -me dijo y se fue de nuevo a la habitación.
Dejé mis cosas sobre la mesada y entré al baño para darme una ducha. Cuando salí toque la puerta de mi cuarto y Kris salió. Me miró.
-¿Qué quieres? -me preguntó.
-¿Puedes darme un poco de ropa? -le pregunté, mientras intentaba mirar hacia dentro.
Tal vez podría ver un poco de D.O.
-Ahora te la alcanzo -me dijo y entró cerrando la puerta. Volvió a salir y me dio un pantalón de dormir y un calzoncillo.
-Gracias -le dije y volví a la sala.
Me puse mi cómodo pantalón de dormir y me quedé sin remera. Hacía algo de calor esa noche. Me tiré pesadamente al sillón y prendí la tele. Volví a escuchar risas y la curiosidad comenzó a molestarme. Pero no me moví de mi lugar.
Tenía que quedarme en donde estaba. Encontré una interesante película y me quedé allí tranquilo. Un bostezo involuntario salió de mí. Miré la hora y el reloj marcaba las 2 de la mañana. ¡Vaya que el tiempo puede pasar volando cuando uno está muy concentrado!
Apagué la tele y me acosté bien en el sillón. Coloqué mis dos brazos detrás de mi cabeza y cerré mis ojos. Pero mi cabeza no dejaba de pensar. Escuché unos pequeños pasos, pero aun así no abrí mis ojos. De seguro era Kris. Escuché como la heladera se abría.
-Maldito Chanyeol, no tiene nada orgánico -musitó con enojo -Es un carnívoro.
Entonces levanté mi cabeza y divisé su pequeña figura buscando algo dentro del refrigerador. Sin hacer ruido me puse de pie y con sigilo, como un león a punto de cazar, caminé para acercarme más a él. Sentí que iba a enloquecer al verlo con esa pijama que constaba de de unos pequeños shorts que dejaban ver sus apetecibles muslos y que se amoldaba perfecto a ese suculento trasero y su playera pegada a su abdomen. Uno de mis ojos se entrecerró por la luz que proporcionaba el refrigerador abierto.
-Herbívoro, busca bien. En el cajón de abajo hay manzanas -le dije.
Él ahogó un grito y se giró a verme.
-¡Maldita sea, Chanyeol! ¡Casi me matas! -dijo mientras respiraba algo agitado y ponía una de sus manos sobre su pecho. Lo escaneé de arriba a bajo. ¡Diablos, se veía condenadamente bien así!
-No fue mi intención, pero que lindo levantarme y tenerte así en la cocina -le dije y lo volví a mirar de arriba a bajo. Su cabello estaba despeinado como si hubiera despertado apenas. Sus piernas doradas y suaves se veían deseosas. Que ganas de...
-No me mires así -me ordenó con autoridad -Mírame a los ojos.
-Ya se de memoria tu rostro, y tus bellos ojos -dije y me acerqué un poco más a él -Trato de memorizar otras partes...
Me acerqué más acorralándolo contra la pared. La luz del refrigerador era lo que nos iluminaba. Él hizo un escaneo nervioso a mi torso desnudo. Abrió la boca para decir algo, pero las palabras no le salieron.
-¿Qué? ¿Qué vas a decirme? -le dije y me acerqué más, apretándolo contra mí -Estás en mi casa, y todo lo que está aquí es mío. Lo toco y lo miró cuando se me da la gana...
-Resulta que no soy una cosa, y también resulta que no soy tuyo -me dijo.
-Mírame fijo a los ojos, y vuélvelo a decir... no puedes, porque una parte de ti, ya es mía.
Él guardó silencio, mirándome fijo. Posé mi vista en sus labios. Esos labios carnosos y calientes que me hacían perder el control. Como necesitaba besarlo...
-Ese ego tuyo, hasta medio dormido es inmenso -me dijo.
-¿Quieres saber que otra cosa es inmensa? -le pregunté con la voz ronca.
-No puedo creer que hayas dicho eso -me acusó nervioso y algo agitado.
Sonreí divertido y negué con la cabeza.
-Las ganas que tengo de ti D.O... ¿O que pensaste?
-La inmensa estupidez que puedes llegar a tener -dijo él rápidamente.
-Hasta media dormido, eres mal pensado -dije divertido.
-Ahora apártate, quiero ir a dormir.
Entonces aquello fue más fuerte que yo. Rápidamente me acerqué a su boca y lo besé intensamente. Abrí más sus labios con mi lengua, y toqué la suya con necesidad. Él intentó alejarse, pero coloqué una de mis manos en su nuca y lo acerqué más a mí. Un leve gemido escapó de su boca, cuando lo apoyé más contra la pared, apretándolo con mi cuerpo. Sus manos se quedaron quietas sobre mis hombros, mientras nuestras bocas se conocían más y más, era un movimiento violento y casi insano, pero no podía detenerme. Mi necesidad de saborearlo era apabullante. Él soltó otro gemido, cuando mordí sus labios suavemente...
Entonces logró alejarme de él y sin decir nada, su mano sonó contra mi mejilla. Agitado volví mi vista a su rostro. Pude ver la confusión en sus ojos, mientras que su respiración agitada caía sobre mi boca.

Dangerous ObsesionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora