No supe que hacer así que corrí, corrí todo lo que pude hasta aislarme completamente de todo, no soportaba seguir escuchando el dulce sonido de su respiración, no aguantaba el maldito olor de su cuerpo a escasos centímetros del mio, no podía con esos labios rogando un beso eterno fundido en las caricias que me daba, decidí huir, huir de ese extraño sentimiento al que la gente llama amor, esconderme y callar lo que mi corazón decía a gritos. Aunque nada es para siempre, todo acaba y vuelve a empezar como una canción. Al principio no te gusta ese sonido, pero de tanto escucharla acabas por aprendértela y cada día la odias un poquito menos que el día anterior.
Me encontraba una vez más en la pequeña sala de música abandonada, mi lugar especial... donde empezó todo con Alex. Este lugar tiene algo particular, como si ya hubiera estado antes aquí, sentada en el mismo escenario, esperando a que todo acabara de una vez y poder seguir con mi vida tal y como era antes, sin los Miller, sin el.
Es estúpido como todo esto ha cambiado, mi vida era... normal, estaba con mi familia y solo me centraba en los estudios y en poco más. Alex esta cambiando todo, no puede llegar y poner mi mundo patas arriba, no puede, no puede llegar y... y arruinar todo lo que yo he luchado, no puede ser que con una mirada consiga descifrara todo mi cuerpo, mis pensamientos, mis sentimientos...Me niego ha aceptarlo.
- No puedes seguir aun con eso... venga ya Aliss, no puedes ser tan ingenua - Esa voz... la misma de la que trataba de huir, volvía a estar aquí, en frente mío, desordenando más las cosas.
- Pero ti que te narices te pasa he Alex, que crees que puedes llegar así como así y luego marcharte como si nada? Pues no, no puedes hacerme esto te queda claro, no quiero verte nunca más, eres un imbécil. - Mi voz sonó, rota, destrozada y todo era por su culpa.
-Un imbécil, si puede que si pero eso no cambia tus sentimientos verdad que no?
- Y tu que sabes de mis sentimientos? - Pregunte conteniendo mis ganas de llorar, aunque en ese momento no me importaba nada, ni siquiera que el me viera llorar.
-Se mucho más de lo que tu te crees Alicia Stone. - Contesto con esa voz tan fría que un escalofrío recorrió todo mi cuerpo.
Estaba a punto de marcharse y no podía permitirlo... necesitaba respuestas... lo necesitaba a el, a e cerca de mi.
-No te vallas- Conteste rota de nuevo - No te vallas por favor...- El siguió caminando como si nada le importase, ni si quiera yo.
- ALEXANDER! - Grité
oh. oh.
NO VUELVAS A LLAMARME ASÍ NUNCA... ENTIENDES? NUNCA, TE JURO QUE SI VUELVES HA HACERLO....- Estaba a escasos centímetros de mi, agarrándome por el cuello con mucha fuerza y de verdad que me dolía, había pasado todo tan rápido que no me había dado tiempo a reaccionar, cada vez me apretaba más y empezaba a faltarme el aire...
- Alex, pero que haces suéltala, te volviste loco? es que a caso quieres matarla- Puede distinguir la voz de James justo antes de caer rendida al suelo, James había apartado a Alex de un solo empujón y se había arrodillado en frente de mi para ayudarme.
- Alis yo.. yo.. lo..lo siento no quería... - Alex intentaba disculparse.
- VETE! VETE! NO QUIERO VERTE ¿SI? - Conteste rompiendo a lágrimas sin querer ni poder evitarlo.El desapareció, literalmente, solo pestañee y el ya no estaba.
Aliss cálmate vale? Todo esta bien, ya se ha ido, tranquila - Contesto James mientras yo me abrazaba a el, no quería estar sola, odiaba estar sola.
(...)
- Eres un tramposo! hiciste trampa!! - Grité, me negaba a perder. Jack y yo estábamos en la cafetería del insti, nos habíamos apostado, si el se atrevía a quitarse la camiseta y coger el megáfono de las animadoras y anunciar " Me llamo Jackson Teid, y estoy disponible para todas las chicas" Si el hacía eso y accedería a tener una cita con el, esta vez sin Alex. Para mi mala suerte logró hacerlo pero cuando acabo, me cogió como a un saco de patatas y anunció " Pero esta preciosidad de aquí es la única que me interesa" Yo seguía pataleando para que me bajara, pero no funciono, medio instituto nos miraba sin ninguna disimulación, y al instante Jack me sacó de la cafetería y me llevó a una especie de descampado, era precioso.
- Me debes una cita asique aquí estamos. - Yo comencé a reír sin parar.
- Y no hubiera sido mejor quedar esta tarde ¿he? chico malo - Conteste aun riendo.
- Pero entonces no habría sido tan especial.- Dijo eso último justo antes de besarme, fue un beso lindo, pero extrañaba los labios de Alex, tampoco me aparte de Jack, no podía hacerle eso, yo sabía a cerca de sus sentimiento y tampoco quería romperle e corazón.
- Ves... a sido especial. - Continuo cuando nos separamos.
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ALEXANDER
Paranormal-Quédate conmigo, no te vallas, no desaparezcas de mi vida. -Sabes que no puedo hacer eso. -¡LO PROMETISTE! - grité en un acto de desesperación Y se fue, destrozándolo todo a su paso. ALEXANDER MILLER...