Cuidando Al Maldito De Mi Jefe ♢Yaoi/Gay♢

Capítulo cinco

...bien, calma, calma, todo esta bien... todo esta bien...¡No lo esta! Mierda mierda mierda.... tsk ¡¿por qué coño no llega?!

Estamos a punto de iniciar la reunión y el maldito de Dirk no llega, lo voy a matar... así al menos cumpliré uno de mis sueños y quizá el de muchos de matar a su jefe...

-Buenas tardes a todos ustedes y hoy como sabrán es la cuarta reunión del año y toca la presentación de nuestra empresa principal con el jefe Dirk y vicepresidente Carter-

Mierda... me levanté de mi asiento y cuando iba a hablar y disculparme, ese imbecil apareció junto con una mezcla de felicidad y desesperación.

Yo igual debía hablar por ese, ¿qué sentido tenía que viniese?

-disculpen mi tardanza- vaya, vaya, aparenta modales...mmm... quizá sea por las dos chicas que están aquí. 

Deseaba dejar que la tierra me tragase de una vez, no deseaba oírlo y menos que me tuviesen que ver como el compañero de...Dirk... no quiero, sé que suena infantil, pero eso pensaba y deseaba a la realidad que obviamente no fue cumplido. 

-Hoy nuestra empresa al fin puede dar las ideas que nos llevarán más allá, pequeños pasos que nos den más poder ante la multitud y la sociedad en si...-

Dirk sorprendentemente fue impecable, no sé como lo hizo, como ante cualquier probabilidad de que hiciese algo mal o de tartamudear, no lo comprendí...quizá... sólo quizá... me he equivocado al juzgarlo tan duramente.

Narrador Omnisciente

Una vez acabada su presentación de la empresa se sentaron juntos, Sam deseaba felicitar a Dirk, disculparse ante su infantil conducta con el por capricho y celos, pero se quedó en silencio tal como Dirk hasta acabada la reunión. Salieron ya cuando era de noche.

-disculpeme, soy Diana, debo felicitarlos, fue una gran presentación, tenga-dijo dandole una tarjeta de presentación de su empresa a Dirk- si quiere conversar sobre nuevas ideas-

Luego de aquellas dos chicas que le entregaron sus tarjetas se fueron de la sala.

-Dirk-lo llamó feliz cuando salieron de la sala y caminaron hasta el ascensor solos, esto lo miró sin emoción-...¿pasa algo?-preguntó preocupado.

-... dudo que te importe mi vida, tú me odias-susurró mirando afuera del ascensor, se veía la ciudad.

-... lo siento... yo no te odio, sólo...-suspiró intentando no retractarse- sólo estaba celoso, pero sé que eres grandioso cuando te comprometes y eso es algo impresionante... nunca pensé que harías una presentación así solo, te traté mal y lamento hacerte eso... quisiera conocerte y que confíes en mi- no pudo evitar sonrojarse al decir eso, pero sintió que estaba más aliviado y aquel ambiente cambió a uno cálido, no quería verle a la cara, pero se lo merecía al tratarlo así de mal.

-gracias-susurró más animado, Sam estaba muriendo de vergüenza y sentía aun que algo faltaba cuando bajaron, lo abrazó al verle adelante.

-no le digas a nadie que dije todo esto-susurró ocultando su rostro en Dirk.

Escuchó su risita y sintió sus brazos rodearlo- no lo haré-

-dime que te pasa-pidió aun sin mirarlo.

-... sólo es mi hermanito, se enfermó y lo tuvimos que llevar de urgencia, no me dejaron verlo cuando fui en la mañana y a esta hora menos, me siento horrible-

-no pensé que te preocupara tanto alguien-

-es mi hermanito realmente lo aprecio y fue lo único que me hizo dudar de mudarme y aún así este me visita-

-que lindo eres con el-susurró sonriente- pero aún así, ¿hace cuánto está así?-

-hace dos días, creo que tiene algo relacionado con la vista, no puede caminar porque no puede equilibrarse-

-...¿cuándo inicio así?-

-cuando fui a verlo luego de la escuela, se notaba mal y le avise a mis padres...mañana se suponía que estaría con el...-

-¿quieres que te acompañe?-preguntó amablemente.

-...ahora es mi momento de preguntarte algo, ¿te sientes bien?-

-...es que me siento en deuda contigo-

-si es por el trabajo no es nada, somos equipo-

-...no es sólo eso, por como te trate, te insulte, me siento mal no quiero eso... ¿me dejas compensarte? ¡si quieres vamos a comer a algún lugar!-

Sam intentaba ser bueno con el, todo por más miedo a como estuviese realmente, hace días estaba raro y que se comportara bien... presentía que era lo peor que podía hacer aunque fuese el compañero perfecto a su parecer.

Esas semanas Sam se preocupó tanto por Dirk al punto de desear llevarlo a tomar o algo, lo que fuese por animarle, claro no lo hacía, no deseaba hacer el ridículo.

Pero una de esas se atrevió.

-D-Dirk... -

-¿si?...-Sam se debatía en hablar o no, pero a los segundos Dirk habló nuevamente- ¡Espera! Termino esto y nos vamos juntos, hablamos entonces-

Sam no se opuso y se fue a su oficina rojo de vergüenza y impaciente por hablar con él.