Existencia marchita

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Prototipos aclamados, venerados

Ensalzados por la audiencia

Chantajes de modelos en escarlatas pasarelas

De delgadas y talladas figuras,

De corroídos sentimientos.


Sociedad vigilada, pendiendo de cuerdas

Nos seducen como a bobos

Pero, ¿qué ocurre con los disconformes?

¿Los que no se mimetizan con los inservibles alborotos?

¿Los que sienten el dolor del otro?

¿Los que prefieren un libro a un espejismo de oro?


Una trama maquillada en tonos turquesas

Mas, tras esa espesa capa, se camufla la violencia,

la Existencia marchita, maldita, que juzga y asedia a nuestra razón,

Ajustando las cadenas

Que nos esclavizan el corazón

Pues solo dicen lo que debemos creer, ser

¿y todo por qué?


Porque somos títeres

Que alimentamos sus chismes,

tenemos que ser mansos, guapos

Esclavos del sensacionalismo y el escándalo

Su propósito, las etiquetas que oscilan en nuestras cabezas

Mientras nuestros reflejos se hayan truncados en espejos envenenados

Para distraer a nuestra mente, de la verdad pura y dura

Países desolados, guerras olvidadas, niñas violadas, jóvenes armados...


Es triste la vida en un planeta, donde lo único que vale

Es un intelecto dormido y una cara bella.


Sueños utópicosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora