Volver a SER

48 8 2
                                    

Somos puzzles. Rompecabezas sin cordura, cada uno de una calamidad, una incógnita, puros enigmas.

Nos rompemos la cabeza para encontrar esa unión, la conexión que nos permita crecer, alcanzar nuestro ser... Y ese día llega, te despiertas estiras los brazos hacia el espacio y rozas el infinito, acaricias tus latidos que te infunden valor.

Sin embargo, un día te rozan sonidos, silencios o metralla, no importa pero algo falla, y otra vez las piezas se desparraman, se separan o dudan si es el lugar al que pertenecen. Otra vez a recomponerte, la historia de siempre... Entonces aprendes que las conexiones dependen, que las piezas pueden cambiar, que ese precioso puzzle no es una imagen, y que sus colores se enfurecen o se desvanecen, y dejas de ser el de siempre...

No por ello menos fuerte, porque esa composición única, esos impulsos que desprendemos al caminar, esas ideas que nos alientan y calientan en las nocturnas madrugas, son nuestra identidad, nuestro vigor para continuar y avanzar.

Que por más que aterricemos de bruces contra el suelo y las preocupaciones nos asfixien, tenemos que desplazarnos a contra-tiempo, amarrar ilusiones con ahínco y esmero, y no mirar atrás hasta alcanzar los sueños, anhelados deseos. Y volvamos a ser. Seres compuestos, miles de pedacitos que se atraen entre sí para sonreír de nuevo.


Sueños utópicosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora