Hace mucho, mucho, mucho tiempo, una mamá pug dio a luz a tres pugs: Ziva, Zuri y Zeus (mejor conocidos como las tres z's); que no eran ni mágicos ni maravillosos.
Pasaron los años y los pugs crecieron. Se volvieron adultos. Entonces, las tres z's, un día fueron a cagar juntos al bosque y en eso, mientras estaba cagando, Zeus escuchó un ruido raro y decidió ir a investigar.
Caminó y caminó hacia el oeste siguiendo aquel ruido raro.
Eventualmente, se encontró con un pozo de los deseos que irradiaba colores ¡como el arco iris!, decidió acercarse y en ese momento vio a una niña, que se veía rara de algún modo, abajo, en el fondo del pozo.
–oye, tú, ¿qué haces ahí abajo?¿no ves que te pinches puedes lastimar?–. ladró (pero traducimos para que entiendan).
La niña que se veía rara de algún modo no respondió y solo se agitaba extrañamente. "parece que le está dando un ataque epiléptico", pensó Zeus con su cerebro de tamaño de cacahuate rancio.
Zuri, preocupada por su hermano, decidió ir a buscarlo.
–¡¿qué chingados haces, estúpido?!
Detrás de Zuri iba Ziva, con una telaraña en la cara y gritando como perra loca. Lo único que se escuchó después fue:
¡PUM! ¡PUM!...¡plop!
Zeus se había caído al pozo de colores ¡como el arco iris!
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La historia del Pug mágico y maravilloso
MizahPugs. Arco iris. Colores. Caca de helado. Unicornios. Patatas. Todas estas cosas juntas en La Historia del Pug Mágico y Maravilloso.