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La chica guardó ese papel y miro si había más. Lo dejó en su sitio, ya que su madre esperaba la carpeta. Una vez le dio la carpeta, volvió a por esos papeles y subió rápidamente a su cuarto. Empezó a leer y vio que era adopta. Y para colmo unos de los papeles ponía que habían pagado a la agencia de adopción para que fuera parecida a ellos y que fuera recién nacida. Según los papeles, la dieron a los 5 días de vida, a los que ella había creído que eran sus padres biológicos. Miró la cantidad que había costado todo eso que pidieron y era un paston, 1.000.000 pesetas, ella se acababa de enterar que era Española. Miró todo lo que la rodeaba y se le callo el mundo en cima. Toda su vida era mentira. Por su cabeza pasaba una pregunta una y otra vez «¿Por que no me dijeron esto?».

- Hija, tu novio esta a bajo esperándote. *Dijo su madre abriendo la puerta*

- Ya bajo mamá. *Ella sentía algo raro, pero no cambió eso de sentirla como una madre*

- ¿Que haces con eso? *Dijo con la cara palida al ver el sello de unos de los papeles que estaba en el suelo*

- Me habéis mentido, ocultado esto a mí.

- Nessy, lo siento.

- ¿Por que mamá?

- Por que queríamos que nos llamarás de verdad mamá y papá. No como ahora.

- Mamá, yo te quiero, por que tu me has enseñado todo eres mi madre, me da igual quién me tuvo.

- Hija, baja ahora. Y por favor no dijas nada.

- No diré nada. Pero quiero saber el por que.

- Cuando tu padre regresé, te diremos todo.

- Vale mamá. Voy a ver a Malcon.

- Sí, claro mi niña, esta en el salón y voy a dormir.

- Descansa mamá.

Malcon estaba jugando con sus dedos, sentado en ese enorme sofá solo.

- Ya estoy amor. *Se tiró a lado de Malcon*

-Al fin, rubia mía. *Mordio su labio a verla con su pijama*

Llevaba un pijama de raso verde, de tirantes finos, y pantalones cortos. La miro de arriba a bajo, y cada vez que se fijaba mas, más duro se ponía. Verla que no llevaba sujetador, y que ese pantalón era tan corto que al sentarse se le veía algo su perfecto trasero, se tuvo que morder el labio, y respirar ondo.

- ¿Y tus padres?

- Mi madre se fue a dormir y mi padre no está.

Eso le dio vía libre a sus deseos. Agarró por la cintura a su novia y empezó a besarla con tanto deseo que no se lo penso dos veces para recostarla en el sofá y bajarle el pantalón.

- ¿Que haces? Mi madre esta arriba y a parte no quiero ahora.

- Calla, tu quieres lo que yo quiera.

Volvió a besarla, ignorando lo que le dijo. Se deshizo de las bragas y del chaleco de su novia, empezó a besarle los pechos y ella intentaba quitarselo de encima sin hacer ruido, pero no tenía fuerza para empujarlo.

MENTIRASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora