Ver a tanta gente bailar y tomar como descontrolados, no era lo mío. Onew lo sabe y aún así me hace acompañarlo a la fuerza. Ninguna voluntad de mi parte hubo cuando irrumpió en la oficina sin tener la decencia de trabajar como se debe, tenía todas las ganas de disfrutar el ascenso del señorito aunque no debería de importarle pero ahí estábamos: Onew bailando con una chica cerca de Taemin quien lo hacía con un chico mientras se lanzaban miradas que parecían balas de metralladora llenando el cuerpo de cada uno. El señorito estaba junto a otro chico, se notaba su declaración sexual de inmediato.
Y yo... Pues yo estaba sentado como un idiota; sólo como un perro. Por lo menos, el trago era mi única compañía hasta que alguien se sentó de imprevisto en nuestro rincón exclusivo.
—Hola —la voz melosa de una chica se hizo presente. Aish~ Como detestaba esto.
—Hola —respondí para no ser descortés con ella. Aunque en realidad fue muy confianzuda en entrar aquí sin permiso de alguien y me imagino que debe ser porque esta bien pasada de tragos.
—¿Vienes a menudo? No te había visto por aquí.
—Ahí tienes tu respuesta —corté todo seguimiento de conversación de una.
La verdad es que no tenía ganas de hablar con nadie en este momento y sólo quería irme a casa a descansar. Tampoco quería echar a patadas a esta chica que de seguro no cumple los 17 años creyéndose mayor de edad siendo que le dieron pase ya que éste lugar es más libertino que el propio come pollo.
El estar absorto en mis pensamientos gastados en alguien que no importa que me hizo dar cuenta de que la niña ya se había ido. Gracias por haberla retirado sin que lo hiciera a mi manera y de mala forma, mentalicé a Dios.
Las horas iban pasando y no veía señales de nadie en la pista, ¿será que me habrán dejado abandonado? ¡Los maldigo! Me levanté y fui directo al baño ya que mi vejiga estaba tan llena por tantos tragos. Cuando iba de camino, dándome paso entre la multitud, me di con la gran sorpresa a lo lejos de que Onew se estaba comiendo a besos a Taemin. ¡Que asco y en un lugar público! Tuve que correr para ocultarme pero me encuentro con otra sorpresa: el señorito a punto de besarse con ese chico desconocido.
Que cuál era mi pregunta en este momento: ¿En dónde me habré metido? Sí, caí en el lugar más pecaminoso donde doblando la esquina, había gente que fornica. ¡Dios ayúdame!
—Oh, lo siento por interrumpir —controlé mi impresión a un estado nulo.
Ambos me miraron pero uno más preocupado que el otro. La casualidad que el más nervioso ahí era el señorito y el otro chico quería seguir en lo que quedaron siendo por el mismísimo Kibum quien detuvo todo acto. Susurraron un par de cosas antes de oír como la puerta era abierta y cerrada de golpe mientras yo estaba en el cubículo. Tienen que haber salido por lo desvergonzado de la situación, pensé. En fin, ¿qué me importaba?
Al salir del cubículo, me llevé otra sorpresa: el señorito seguía ahí, cruzado de brazos mientras estaba apoyado en el lavamanos.
—Perdón por arruinar tu momento —hablé con tranquilidad cuando fui a lavarme las manos.
—No hay que perdir perdón —dijo muy serio. Ups, ahora sí que estaba enojado el señorito.
—Bueno, cómo digas.
Mientras seguía en mi labor de asearme las manos, hubo un silencio sepulcral. No sé cómo debería describir la situación y por la simple razón de sólo pensar en una que pasaba por mi mente, debía esar loco.
—Oye, si te preocupa tu orientación sexual, no me importa.
—No estoy preocupado por eso —admitió sonriente —. Creo que te diste cuenta desde que entré a la empresa.

ESTÁS LEYENDO
El Favorito del Jefe [MinKey/SHINee]
FanficKim Kibum es un chico que ha trabajado durante años en distintas empresas, trayéndole supuestamente "mala suerte" a cada una de éstas. Desea un trabajo pronto y lo encuentra en Choi International, donde es recibido por un atractivo ejecutivo que, fi...