Me llamo Ángela Zignoli, vivo en Miami aunque soy española.
Mi vida es genial, tengo una hermana menor, se llama Raquel, o como me gusta llamarla a mí, Racky. Tengo 17 años y ella 16, a parte de ser mi hermana es mi mejor amiga.
En mi instituto soy...
Volví a ver a Dylan correr hacia aquel precipicio.- PARA DYLAN, PARA, ¿QUÉ TE CREES QUE ESTÁS HACIENDO IDIOTA? TE VAS A MATAR.- Paró en seco, se dio la vuelta y quedamos a centímetros, de nuevo.- Que más te da lo que yo haga, me odias, lo he echado todo a perder, ¿acaso no te gustó mi carta? Me amabas, ¿por qué él? TE ODIO, ¿no me habías perdonado? Te amo...- Y apareció una sonrisa en su rostro, el sueño continuaba pero no pude oír lo que decía, como siempre.
Me desperté tan alegre que incluso la cara me dolía de sonreír, escogí mi ropa y me metí al baño para arreglarme.
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Decidí ponerme un vestido granate corto, resaltaba mi figura y me quedaba de muerte.
Desayuné y me fui al colegio, encima era viernes, doble felicidad, CON DYLAN A PRIMERA HORA, triple felicidad.
Llegué a clase y él estaba mirando a la puerta, serio, pero cuando me vio entrar sonrió, me senté a su lado con mi labio mordido de nuevo, creo que es un tic, o que Dylan es tan sexy que no puedo resistirme. Ambas.- Hola.- Cogí su mano por debajo de la mesa.- Hola.- La apretó.- ¿Sabes qué?- Encogió sus hombros a modo de respuesta, él también tenía el labio mordido.- Te quiero...- Le susurré.- Y yo.- Respondió en un susurro.- ¿Me perdonas?- Me miró con los ojos achinados.- ¿Por qué?- Suspiré.- Por ser tan idiota, quiero ser sincera contigo Dylan, sabes que a mi hermana le gustas, bueno pues..., llevo bastante tiempo enamorada de ti todas esas veces que era idiota contigo te amaba. Pero no te lo decía por Raquel, ella me dijo que no me acercara a ti, que tú le gustabas, pero me da igual, tú a mí no me gustas, yo te amo. Yo, yo no quería salir con Scott, yo quería ser TU novia, aquel dibujo era para ti, destrocé la clase porque mientras dibujaba comencé a pensar, pensaba que tú no me amabas, que me veías como una amiga, que podrías encontrar a alguien mejor que yo, y eso es cierto, pero mientras no la encuentras quiero estar contigo.- Estaba sonriendo, bueno ambos sonreíamos.- No hay chica mejor que tú créeme, tus padres hicieron un gran trabajo.- Fue a besarme pero yo le aparté.- Se supone que aún salgo con Scott, al terminar E.F, se lo diré, solo una clase, solo una más.-
Él suspiró.- Vale, pero solo una clase más, no aguantaría sin darte un beso un día más.- Sonreí de lado y la clase comenzó.
Tocaba E.F, por fin , debería confesárselo todo a Scott, no quería hacerle daño, pero debería ser un poco egoísta esta vez, debería velar por mi felicidad, con Dylan, que fácil lo tendría si fuese mi hermana.
-Muy bien, hoy tenéis el examen de baile.-
Lo hicimos y nos puso un 10, lo hice con Dylan y él estaba que se moría de celos.- Scott, ¿puedo hablar contigo?- Todos estaban en los vestuarios, estábamos a solas.- ¿Por qué lo has vuelto a hacer? ¿Por qué siempre te pones con O'brien?- Esta era mi oportunidad.- Porque le amo.- Se dio la vuelta atónito.- ¿Qué?- Su voz se quebró un poco.- Lo siento Scott, me caes muy bien, no quería hacerte daño pero... Joder lo siento de verdad.- Lo abracé y noté como algunas lágrimas caía por sus mejillas y se deslizaban por mi pelo.- ¿Me has amado alguna vez?- Me preguntó, seré sincera como él lo fue conmigo.- No.... Solo salía contigo para olvidar a Dylan, lo siento de verdad Scotty lo siento mucho.- Me partía el corazón verle llorar. La imagen se distorsionó y vi lo que pasaba claramente, estábamos aún al principio de la clase, concretamente en los vestuarios, ¿todo había sido una alucinación? Joder, tendré que volver a pasar el mal trago.
