~X~
El final de nuestra mutua soledad .
Song : Half demon dog.
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- Flash Back -
Las hojas secas del suelo eran pisadas por los delicados pies de la Daimiko de ojos azules, el sonido de las tobilleras chocando producían eco en el silencioso bosque, Kagome caminaba con paso lento pero firme, con sus cabellos azabaches ondeando por el viento otoñal, su mente pensaba en minutos atrás cuando había ordenado indirectamente a Kohaku irse a tomar un baño frio de agua, recordaba los ojos del puberto cuando le había descubierto en plena situación vergonzosa, era normal que a los niños de su edad empezaran a interesarse en el sexo feminino, como no, empezaban las poluciones nocturnas y los alivios manuales en los adolescentes que empezaban a conocer su cuerpo vigen, ella no tenia ningún problema en que la gente se masturbara, claro está, no le importaba porque ya no le importa nada, ella solo vive para matar a Naraku, destruir la perla y reinar cuando todo eso acabara, pero, cuando sintió la mirada de Kohaku recorrerle el cuerpo un ramalazo de orgullo femenino fluyó por sus venas con fuerza causando que su ego se inflara un poco, sentía como la satisfacción se prolongaba en su cuerpo sabiendo lo que le podía causar en los hombres, era deseada por Kohaku, Sesshomaru y si no se equivocaba también por Koga, aparte que no se olvidaba de las miradas de algunos aldeanos. Las comisuras de sus labios subieron un poco, el sentimiento de sentirse única para un hombre, todo lo que Inuyasha le había negado a ella ahora lo tenía a montones, era indescriptible pero sabia que tenía que parar con sus pensamientos, ellos solo eran pirzas de ajedrez que movía estrategicamente para acabar con el hanyou araña, y en ese juego, ella era la reina ganadora.
Sacrificaria a quien quiera para conseguir sus objetivos.
No le importaba nada ni nadie.
Aunque el sentirse deseada le gustara, ese sentimiento de vanidad era otro que tenía que desechar al momento.
Volviendo a ser lo que era desde hace tres años, un cuerpo vacío y sin alma que lo único que tenía era odio por cada parte de su cuerpo.
[...]
Detuvo su paso cuando llegó a la montaña del anciano Totosai, miró hacia arriba y divisó la cueva del herrero, con impulso se elevó en el aire llegando rápidamente a la entrada de la cueva donde Totasai la esperaba.
- Es un placer tenerla es esta humilde cueva, Kagome-sama- saludó cortés el anciano.
- Lo mismo digo, Totosai-sama- responde la chica, posando sus delicados pies sobre la piedra - ya sabes a por lo que vengo.
- Hai, se me encomendó la tarea de perfeccionar armas acordes con su personalidad y destreza, he de decir que me sorprendieron los resultados obtenidos por la diversidad de éstas y estoy completamente seguro de que usted sabrá manejarlas a la perfección. Cigame.
Kagome empezó a caminar detrás de Totosai, adentrandose de poco a poco en la calurosa cueva, después de unos cuantos minutos andando, que estuvieron sumidos en un silencio sepulcral, Kagome encontró varias armas delante suyo.
- Este es uno de los armamentos que se me ha ocurrido, aprendisteis muchos tipos de modalidades guerreras, entre ellas, la ninja, por eso os entrego uno de los armamentos mas complejos.
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~El Final De Nuestra Mutua Soledad~ (Sesshome)
Random- I-inuyasha...¿por qué? - preguntaba Kagome al borde del pozo. - ¡Nos traicionaste Kagome! ¡De la peor forma posible! ¡Después de todo Kikyo SIEMPRE será mejor que tú! Inuyasha me atravesó el estomago... ¿siempre...será así? ~~~~ Ha pasado un añ...
