~XIII~
~El final de nuestra mutua soledad~
Song: Balance ost.
~~~~~~
Despertó sobresaltado y jadeante, el sudor corría por sus cienes y su cuello hasta perderse por el interior del haori blanco, sus acelerados latidos y la cálida sensación en la palma de su mano le confirmaron que lo que había soñado fue real, sin ningún ápice de falsedad, literalmente estuvo en el interior de Kagome -de forma figurada claro está- estuvo dentro de su alma y pudo ver a su compañera tenderle la mano y él ir a por ella, pero después...
¿Después qué?
No se acordaba y por desgracia no podía recordarlo, aunque sí que recordaría para toda su vida su patético encuentro sexual, se había corrido nada más entrar en ella, penoso y absurdo para alguien como él; un gran youkai de enorme prestigio, que en su larga vida se había convertido en un gran amante... y nada más pasar un momento con ella, ver su cuerpo y lamerlo hasta la glotonería, en el momento más crucial del momento, lo arruina.
Resopló con hastío y giró su cabeza mirando la vacía pared de la cueva, no había rastro de ella, solo quedaba en el aire su tenue aroma a rosas.
-Se ha ido- admitió Yako tristemente.
-Ya lo veo Yako, no hace falta que lo digas- Sesshomaru dobló la rodilla derecha y estiró la pierna izquierda, recostándose en la pared.
-Quería pasar más tiempo con ella, mucho más tiempo...
-Y lo haremos, solo debemos ser pacientes y encontrar una solución a todo esto, por Rin y por el resto de la manada- enunció, cerrando los ojos y abriéndolos al instante dejando ver su típica mirada distante y remota, pero aún así, sumamente hermosa.
-Y por nosotros, más que nada por nosotros, no lo olvides Sesshomaru, encontramos a nuestra compañera y la visión o sueño que vimos nos lo confirmó, tú mismo viste los hilos rojos, no me uniré a nadie más que no sea ella...
-Yako, prometí traerla de vuelta, sacar lo que ella lleva dentro y no me voy a rendir hasta conseguirlo.
-Hmp, querrás decir que NOSOTROS no nos rendiremos.
-Si, no nos rendiremos- declaró una vez más el peliplateado con una ligera sonrisa en su rostro.
[...]
Volaba entre las nubes del cielo anaranjado, despertó en la mañana al sentir los latidos de su corazón descontrolarse de nuevo, inconscientemente dejó libre acceso a Sesshomaru para que entrara en su mente y escarbara en lo más profundo de su ser hasta toparse con su otra parte, nada más presenciar el tirón que sentía en su pecho decidió romper la conección de manera brusca y repentina, sin pensar en las consecuencias que eso acarrearía después.
Salió de la cueva sin mirar atrás y sin decir nada a su compañero que se encontraba sumido en un sueño durante esos momentos, llenó sus pulmones de oxigeno con una gran bocanada de aire y saltó al vacío que representaba esa cueva en la montaña, con diez metros de diferencia entre las copas de los árboles levitó en el aire contemplando por unos segundos el cielo teñido de colores cálidos productos del amanecer y continuó con la búsqueda de los demás fragmentos de la Shikkon no tama restantes.
ESTÁS LEYENDO
~El Final De Nuestra Mutua Soledad~ (Sesshome)
Nezařaditelné- I-inuyasha...¿por qué? - preguntaba Kagome al borde del pozo. - ¡Nos traicionaste Kagome! ¡De la peor forma posible! ¡Después de todo Kikyo SIEMPRE será mejor que tú! Inuyasha me atravesó el estomago... ¿siempre...será así? ~~~~ Ha pasado un añ...