Promise

Capítulo 8: El caso

Realmente me impactó ver a Jungkook así. El cambio de actitud entre la persona fría y grosera que habia estado conmigo por todo el día, y la persona compasiva y sensible que tenía al lado en ese momento, era inmenso.

Es difícil de explicar, pero no parecía él. Era como si su capa más interna hubiera salido a la luz para llorar y sufrir en su lugar, para luego volver a su interior y dejar a la capa externa libre de dolor y sufrimiento, como si fueran dos personas distintas las que controlarán su cuerpo.

Seguía pensando en el cambio brusco que se había producido en él, cuando paramos frente a un gran edificio y Jungkook, quien parecía haber vuelto a la normalidad de un momento a otro, me habló.

- Aquí vivo, ya me las arreglaré para llegar hasta mi departamento con él - Mientras dice esto, saca su celular del bolsillo y lo prende - Ah, no, espera. Son las 1:30, no podrás tomar transporte.

Estaba tan poco concentrado que tardé unos segundos en darme cuenta que era su forma de invitarme a quedar, cosa que agradecí infinitamente en mi foro interno, pues... acababa de recordar que al estar todo el día en aquel callejón, no me había conseguido un lugar en el cual quedarme.

Me limité a asentir y cargar el lado de Seokjin que me correspondía.

- Entonces, vamos.

Entramos al edificio y nos subimos al ascensor que se encontraba frente a la entrada. Jungkook presionó uno de los botones y el ascensor, luego de cerrar sus puertas, se dispuso a subir.

Nos quedamos en silencio todo el trayecto en ascensor, y al salir no encontramos con dos puertas que se encontraban una frente a la otra. Jungkook se dirigió a la que estaba en la izquierda e introdujo su llave, al abrir la puerta habló mirando hacia todos lados.

- Jimin ¿Estás aquí? - Soltó su lado de Seokjin y fue a mirar dentro de una de las habitaciones del departamento- Supongo que aún no ha regresado - Volvió a cargar a Seokjin y me habló - Por aquí.

Nos dirigimos a la habitación que Jungkook había ido a mirar hace unos momentos y dejamos a Seokjin en la cama perfectamente ordenada que había allí. Recorrí la habitación con los ojos, estaba vacía, sin contar la cama y algunos muebles. Después de que Jungkook acomodara a Seokjin, me habló.

- ¿Quieres pedir algo para comer?¿Una pizza? - Mientras decía esto, me hizo una señal para salir de la habitación, cosa que hice.

- Está bien, pero no me gustan las aceitunas.

- A mi tampoco.

- Jungkook, nos hemos preparado toda la vida para conocernos este día y formar parte del club anti-aceitunas.

Al decir esto, Jungkook me miró serio por unos segundos, hasta que de pronto estalló en carcajadas. Quedé desconcertado, no pensé que él pudiera reírse de una forma que no fuera burlándose, y sin pensarlo mucho, me uní a sus risas.

Después de haber bromeado unos minutos, Jungkook pidió una pizza (sin aceitunas) y nos sentamos en el sillón que había en la sala.

- Bueno Orejón, ya que te vas a aprovechar de mi hospitalidad quedandote en mi departamento, cuéntame sobre ti.

- ¿Orejón? - Hice cara de ofendido.

- Tus orejas son grandes - Dijo mientras las señalaba.

- ¡Oye! - Hice ademán de empujarle - Pues tu tienes dientes de conejo.

- Ok, cuéntame sobre ti Taehyung - Dijo entre risas, ignorando mi comentario sobre sus dientes.

- Mi nombre es Kim Taehyung, tengo 25 años y... no me gustan las aceitunas.