Breaking point

ALEK

Despierto con un agudo dolor de cabeza pero sin embargo me siento cálido. Probablemente estoy en un hospital.

Abro los ojos con dificultad y de inmediato me doy cuenta de que esto no es un hospital es un galpón sucio. Mi primer pensamiento es que estoy secuestrado pero de inmediato me doy cuenta de que no estoy atado si no cubierto por varias mantas viejas en un colchón en el suelo. Trato de ubicarme y de repente la veo. Un pequeño bulto en el piso cerca de mí. Esta sobre una manta vieja, abrigada con una manta raída. Su cabello claro cae a los lados de su rostro. Parece un puto ángel cubierto de mugre. Trato de incorporarme pero el dolor se hace más fuerte y el brazo me duele horrores y suelto un gemido de dolor. Eso despierta al ángel en el suelo. Sus ojos extraños me miran soñolientos. Se levanta y se acerca a mí y me dice con suave voz ronca

_ no te levantes, estas herido _ la miro y bajo toda la capa de suciedad es realmente hermosa

_ ¿ Como... llegue aquí...?_ digo con dificultad como si mi lengua estuviera cubierta de algodón. Ella toma una botella con agua, la abre y me da unos sorbos.

_ te encontré en el callejón Big boy, no sé cómo llegaste allí pero te veías mal, tienes un corte en la frente pero no es profundo ya lo cure pero el brazo es complicado creo sinceramente que debe estar fracturada tu muñeca_

_ ¿cómo me trajiste hasta aquí?_

_ técnicamente te arrastre, este lugar está justo donde caíste volvía de buscar algo para comer cuando te vi Big boy_ dice y noto su acento

_ ¿de dónde eres?_

_ De Texas apuesto a que me delato el maldito acento_ dice y ríe... jodidamente ríe y su risa es como un suave tintineo ronco

_ Si eso parece... _

_ ¿tienes hambre Big boy?_

_ Alek... me llamo Alek... si tengo algo de hambre_

_ espera un momento_ dice y se levanta del suelo. Lleva unos pantalones raídos y sucios, las convers deben haber sido blancas en algún momento y el suéter es demasiado grande para ella.

Vuelve unos minutos después con dos tazas de latón. Las deja en el sueño y se acerca a mí

_ ven aquí Big boy siéntate_ dice y me ayuda a pesar de ser pequeña tiene mucha fuerza. Me da una taza y se sienta en el colchón frente a mí. Sorbo un poco de la sopa caliente y aunque he comido en los mejores restaurantes del mundo esto me sabe a gloria

_ ¿cómo te llamas?_ pregunto mirando a esos increíbles ojos

_ Érika _ dice con simpleza sorbiendo su taza_ debo pedirte disculpas necesitaba dinero para la farmacia y comprar la sopa y tome cien dólares de tu cartera_ dice sacando mi billetera del bolsillo y devolviéndomela. Me parece extraño, si alguien quiso robarme ¿porque demonios no se llevó ni mi cartera ni mi reloj? miro mi cartera y veo que el dinero y las tarjetas están intactos, esta chica no tiene nada, es una sin hogar y solo tomo cien dólares de los 1500 que tenia

_ no te preocupes Érika, ¿qué edad tienes?_

_ oh... esto es una cita Big boy_ dice y ríe de nuevo haciéndome reír hacía mucho tiempo que no me reía, no sinceramente_ tengo 21 _ dice y realmente parece más joven _ ¿tu?_

_ 30_ digo sorbiendo la sopa hasta el final_ ¿hay más?_ ella asiente toma las tazas y desaparece detrás y vuelve unos segundos después con las tazas llenas.

_ Érika ¿cómo terminaste aquí desde Texas y sin hogar?_ creo que ella va a molestarse con la pregunta pero solo suspira con tristeza

_ ¿ tienes ganas de una historia triste Big boy? Nací en Texas como Érika Swan, no sé quiénes son mis padres, me dejaron en una estación de policía recién nacida. El nombre me lo puso una de las agentes que me recogió y Swan es un apellido muy común que le dan a quienes no tienen identificación en Texas. Pase mi infancia en hogares de acogida, algunos horrendos, otros buenos. A los 16 llegue a mi último hogar, la gente allí era realmente espantosa, nos trataban mal, no les interesaba si estudiábamos o no... le pagaban al oficial de guarda para que hiciera ojos ciegos sobre lo que pasaba allí. Nos hacían robar para ellos. Estaba a punto de cumplir 18 cuando nos obligaron a robar en una casa de gente con muchísimo dinero. Yo tenía un mal presentimiento sobre esto. Estaba a semanas de mi libertad y no quería que nada impidiera estar libre por fin. Pero no obedecerlos significaba días sin comer y una paliza segura. Así que yo y otros dos chicos más jóvenes fuimos obligados a entrar en esa casa. Según ellos la familia estaba de vacaciones y habían hecho un arreglo de dinero con el guardia de seguridad. Entramos a la casa por una ventana entreabierta del primer balcón. Los chicos comenzaron a recolectar cosas de valor y debíamos ir a la oficina porque según los Miller allí guardaban dinero en unos cajones. Yo llevaba la mochila con las joyas y relojes que habían sacado de las habitaciones. Entramos al estudio y los chicos comenzaron a buscar. No había mucho dinero en realidad solo pequeños fajos como si fueran ahorros. Yo tenía un mal presentimiento erizándome la piel cuando les dije que nos fuéramos pero no me hicieron casi seguían buscando. Entonces todo se volvió un caos. Tiraron la puerta de entrada abajo y aunque intentamos escapar estábamos rodeados de policías. Al parecer el estudio tenía una alarma silenciosa. Nos detuvieron a los tres. Nos llevaron a detención en celdas separadas para que no habláramos. Los Miller vinieron más tarde y sacaron a los dos chicos pero a mí me dejaron allí. Le dijeron a la jueza que yo los había obligado a robar conmigo. La jueza era familiar del guarda de familia que debía cuidarnos y se las tomo contra mi cuando declare que él era cómplice de los Miller. Me envio 2 años a un reformatorio para adolescentes..._