Capítulo 03.

9.1K 534 38
                                    

|¿Amor a primera vista?|

Catrina.

Me levanté en una habitación desconocida. Al principio estaba desorientada pero después recordé que había tenido un accidente o algo así. No sabia con exactitud.

Lo primero que vi fue a un hombre increíblemente perfecto. Un adonis griego, mejor dicho; se suponía que era un doctor por su vestimenta. ¿Existían doctores tan guapos?

Sus hermosos ojos de color inexplicable me miraban con suma ternura y atención. Era imposible no querer derretirme como un cubo de hielo en el microondas. Él extrañamente despertó una ilusión dentro de mi; un sentimiento que no conocía.

¿Quizás podría ser amor?

El color de sus ojos era una combinación perfecta. Un gris azulado que me daba demasiada atención y lograba intimidarme. Su barba de algunos días lo hacía ver interesante y mayor. Y ni hablar de su gran sonrisa acompañada de un par de hoyuelos, iluminaba el lugar entero.

Me sentía en las nubes. Su voz era el sonido más hermoso que alguna vez hubiera oído, estaba soñando y era un poco fantasiosa. ¿Por qué no soñar? ¡Cómo en los libros que relataban el amor a primera vista!

Mejor dicho en esas novelas en la que se miran y no pueden dejar de hacerlo. Dos almas se encuentran y se unen para siempre.

—¿Cómo te llamas? —me preguntó sacándome de mis quiméricos pensamientos.

—Catrina. —contesté con timidez.

—Martín, un gusto. —él extendió su mano y tomó la mía en forma de presentación. Me brindó una gran sonrisa que arregló mi día por completo.

¿Recuerdan esas películas en las que nos muestran como dos personas se tocan y sienten una extraña electricidad correr por su cuerpo?

Descubrí que esos clichés eran pura mentira, esas películas nos engañaban porque no se sentía eso.

Se sentía algo peor.

Su mano fría me hizo temblar y aunque estaba acostada mis articulaciones fallaban. No podría hablarle si él continuaba mirándome de esa forma.

Un doctor.

Un guapo doctor que en vez de curar mis dolores, alborotó mis temores, esos temores de amar a alguien y salir lastimado. La idea de que no pudiera corresponderme atropellaba mi ser.

Mi mente estaba en otro lugar. Me estaba dejando llevar por mi imaginación. ¿Qué se sentiría besarlo? ¿Cómo se sentiría tener sus labios sobre los míos?

Sería un beso de amor.

—¿Te sientes mal? —preguntó al verme tan distraída. Reaccioné nuevamente.

—No, no, no. —acomodé mi garganta—. Ya estoy bien.

—Ya te revisé y por suerte estás completamente bien. Sólo que el golpe te hizo desmayar, el susto fue más. —explicó mientras yo me perdía en sus carnosos y rosados labios—. Te recetaré un médicamente para prevenir el dolor.

Era terrible que no le volvería a ver.

A menos de que me rompiera una pierna y con tal de verlo me la rompía yo misma.

¿Existía el amor a primera vista?

Porque estaba segura de que me había enamorado.

Enamorada de un doctor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora