Nuestros amigos saltan del barco

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Por ratos mi hermano y yo nos turnábamos para controlar el barco. Resultó que el barco de Barbanegra se llamaba: El Vengador de la Reina Ana.

Cuando ya era de noche, yo no podía dormir, habías pasado tantas cosas en ese día, por ejemplo: la pérdida de Tyson.

Me senté en unas escaleras en el barco, apoyé mi cabeza en la barandilla y me concentraba en como el barco se mecía con el mar. Cuando de repente me doy cuenta de que James se había sentado a mi lado.

-¿Qué pasa Pamela?

-No...no lo sé. No quiero dormir, porque tengo miedo de lo que me digan mis sueños.

-Igual yo. Oye...gracias por salvarme, odio mi manera de complicar las cosas.

-No te preocupes, Annabeth también ayudo y tú no complicas nada, como ibas a saberlo.

-No sé, igual me siento culpable. ¿Te puedo hacer una pregunta?

- Sí, claro dime.

-¿En verdad estabas considerando la propuesta de Circe?

-Pues por un momento lo pensé, pero...la verdad es que no me gustaría ser inmortal, eso significaría dejar a mis amigos, a mi hermano y a mi mejor amigo.

-Oh. ¿Y...quien es ese mejor amigo ah?, sí puedo saber-dijo con aire de molestia. Parecía celoso.

-Hahaha-. me reí. Era ridículo que se ponga así.

-¿De qué te ríes?

-Nada, nada, solo me da risa tu reacción.- lo abracé-. Tu eres mi mejor amigo cerebro de búho-le susurré.

El sueño te llega cuando menos lo esperas, eso lo aprendí ese día. Poco después de dejar de abrazar a James, bostecé. Es sorprendente como los bostezos se contagian, porque James también hizo lo mismo.

-Oye, ¿Ya tienes sueño sesos de pez?-me preguntó.

-Un poco, ¿y tú?

-Creo que sí.

-¡James, mira!-señalé hacia el cielo estrellado.

-¿Qué?

-Una estrella fugaz-lo miré- pide un deceo.

Cerró los ojos y yo también. Pedí mi deceo, pero si piensan que se los contaré, sigan soñando.

Y así cuando abrimos los ojos nos quedamos mirando el cielo. Por desgracia, me dio mucho más sueño, así que me apoye en el hombro de James y seguí viendo las estrellas hasta que me dormí.

Esa noche, en mi sueño, regresé al Princesa Andrómeda.

Estaba observando el sarcófago dorado donde supuestamente se encontraban los restos de Cronos, la idea me seguía pareciendo repugnante. El sarcófago emitía una luz, la cual era la única en el lugar. De repente, algo hablo desde no sé dónde.

<<Así que esta es la hermanita de Percy Jackson. Gusto en conocerte Pamela. Supongo que aun no te han contado la verdad, sobre tu nacimiento y sobre tu verdadera madre. Es sorprendente que tu y Percy se hayan conocido, no sabes de quien es el. >>

Esa voz medio escalofríos y quise que parara. Saqué la espada que encontré en el refugio, tal vez podría destruirlo que había dentro de ese sarcófago, pero me sobresaltó la voz de lo que parecían ser muertos.

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⏰ Última actualización: May 12, 2016 ⏰

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 Pamela Jackson y los dioses del Olimpo: El Mar de los MonstruosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora