Al paso de unos cuantos peldaños crucé por una habitación, lo recuerdo bien, mi hermano y yo solíamos dormir en literas al lado de una pequeña repisa con libros infantiles para dormir.
Al asecho observé a mi madre cruzar por aquella puerta con David en brazos.
Seguí mi camino, hasta una puerta al estilo francés, El Ático. Giré la perilla y di rumbo hacia otros peldaños próximos en dirección al a mi habitación.
Subí cada uno temerosa hacia mi calabozo. Recuerdo cuando mi hermano jugaba las escondidas junto a mi, subía al ático porque sabia que no me gustaba, y nunca subiría pasara lo que pasara.
Y ahora resulta que este lugar será donde viviré los próximos años.
Todo es blanco, blanco perla, a excepción de una cortina asemejada al color del vino, ubicada en unas ventanas que me dejaba a la vista el patio trasero, otra pequeña ventanilla circular que me mostraba el jardín delantero.
Tenía vitrinas, las mismas vitrinas de los cuentos infantiles para dormir, sonreí al ver aquello.
- Veo que es lo que mas te gusta de tu nueva habitación, hija. – escuche la voz de mi madre a mis espaldas. Voltee enseguida.
- Mamá... -
- No tienes mas palabras que no sea solo mamá? - Dijo riendo en dirección a mi. – Traje algunas galletas, son las mismas que solía hacerles a ustedes dos. – Dijo depositando la bandeja en una pequeña mesa a un lado de la habitación. – Hija... - Tomó mis manos, las sostuvo fuertemente y lo siguiente fue un beso en la frente – Vaya que haz crecido. Te he extrañado todos estos años. Cómo está tu padre, el está bien? - No pude más que juntar un poco los palpados cerrando mis ojos un poco. – Si Gray, todavía lo amo. Solo que no podemos estar juntos. – Negué con la cabeza y la abrecé fuertemente.
- Te extrañé... Mamá – Dije sincera.
- Mi hija... - Sus lágrimas empezaron a rodar por sus mejillas. Me separé un poco de ella y las sequé con mis pulgares. -
- Descuida. Ya no me iré. – Le sonreí.
Y así permanecimos una junto a la otra.
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El bosque de la vida
FantastikLa vida es un misterio, no una pregunta. No es un rompecabezas que resolver, no es una pregunta que debe ser respondida pero es un misterio para vivir, un misterio para ser amado, un misterio para ser bailado. -Osho