POV'S AUSTIN.
Hace como ya 2 semanas que no se nada de Maddie, bueno creo que exagero, Dany me dice siempre como esta, aveces le mando cartas y ella me las responde, varias veces le pedí perdón y ella las acepta, pero yo no siento que con un ''perdón'' no es lo suficientemente bueno, yo hice que se lastimara, por mi ella esta aquí.
-Hola dormilón.- dice Lu entrando a la habitación, ella y yo hemos estado compartiendo bastante tiempo en este mes, es muy buena persona la cual me comprende.
-Hola Lu.- le respondo con una radiante sonrisa.
-Adivina que! Un pajarito me contó que hoy te podrían dar de alta.- dice contenta, sentándose en la cama.
-Enserio Lu?!- digo sentándome de repente en la cama lo que hace que ella suelte una pequeña risita.
-Si.-me responde con una hermosa sonrisa- la doctora me lo dijo, ya que no pudo contactar a tus padres.- ah no les conté? Mis padres no se aparecieron para ver cómo estaba, creo que ni se enteraron que no llegue a casa, bueno, a ninguna de las dos casas.
-Ah...
-No te pongas triste mi vida, yo me las arreglé para decir que sos mi hermano y yo te puedo cuidar, no necesitamos ningún padre.- Lu es la mejor sinceramente, en este mes me cuido como nunca nadie lo hizo y creo que ya comencé a enamorarme de ella.
-Gracias Lu, en este mes has sido muy cariñosa conmigo, sos muy buena persona.- Si definitivamente me gusta.
-No hay que agradecer, eres mi amigo, para eso estoy- Dice con una hermosa sonrisa la cual le contesto con otra.- ahora... Tienes que descansar...
-Oye... Hoy si puedo ir a ver a Maddie? Los doctores me dijeron que si podía hacerlo...
-Puedo hablar con las enfermeras de la sal de Mad, pero no te aseguro nada.- me responde Lu, en este mes trate de ir mucho a la sala de Maddie pero las enfermeras de ahí no me dejaban, ya que es una sala de cuidados intensivos y solo entran familiares.
-Esta bien gracias de nuevo.- le dedico una sonrisa, mientras ella se levanta y sale de la habitación.
No voy a dormir lo último que quiero es dormir, así que tomo mi celular y reviso mis mensajes y redes sociales, nada nuevo.
Tomo el control de la mesita de luz que está a mi derecha y enciendo la tele, busco los canales de fútbol y me concentro en un partido del Barcelona contra el Real Madrid, van empatados 0-0.-Hey Brother!!!- entra Dany cantando la canción tan famosa de Avicii.
-Hola.- contestó riendo.
-Como estás hermano?
-Bien, olímpico, vos?
-Todo bien por suerte y me alegro por vos.
-Y yo por vos... Has visto a Maddie?
-Emm... Si, estoy por ir a verla y si vienes?
-SI.- salto de la cama, una idea bastante estupida porque me duele todo.
Dany acerca la silla de ruedas a mi cama y me ayuda a sentarme, luego se posiciona detrás de mí y empieza a empujar la silla, abre la puerta, pasamos y nos dirigimos al elevador.
-Crees que siga enojada conmigo?.- preguntó cabizbajo.
-Obvio que no hermano, ella quería verte.
-ENSERIO!?- no voy a mentir que la idea me emociono un poco.
-Si.- dice soltando una pequeña carcajada debido a mi reacción.
Bajamos del elevador, todas las enfermeras posan su mirada en nosotros, yo miro a Dany preocupado pero él solo me sonríe, transmitiéndome confianza.
-Hola, puedo ayudarlos?- dice la secretaria de este piso, ella es alta muy linda y rubia, con sus ojos delineados, labios rojos y una coleta, de vestimenta un suéter blanco y supongo que algo por abajo, pero no logro ver.
-Venimos a ver a Maddie, la paciente de la sala 31?
-Ah cierto y ustedes son familiares?- pregunta ella.
-Si.- contestó tirándole una mirada cómplice a Dany- yo soy su hermano y él es el primo.
-Ah muy bien, pasen tranquilos.- finaliza dedicándonos una sonrisa la cual devolvemos.
Con Dany nos movemos a la habitación 31. Llegamos y tocamos la puerta.
-Pasa tu primero, hermano.- me dice Dany rompiendo el silencio.
-Muchas gracias.
Abro la puerta, entro y cierro. Me acerco a la cama donde una Maddie sonriente me espera.
-Hola hermosa.- "hermosa" que?
-Hola chico.- dice ella con una voz tierna y una sonrisa hermosa.
-Como estás?- digo posicionándome al lado de su cama.
-Todo bien por suerte y tú?
-Me alegro, yo bien.
-No creo que estés tan bien, por qué estás en esa silla de ruedas?- pregunta preocupada.
-Ah esto.-miro la silla- Estoy bien solo me la dieron y no te miento si te digo que me facilita todo.- ella se ríe lo que hace que yo ría también.
-Que vago.
-Me conoces... Y tu? Te duele algo?
-No siento mis piernas, el doctor me dijo que tendría que empezar con ejercicios para recuperar la movilidad de ellas otra vez.- quedo shokeado, le saque sus piernas literalmente!
-Oh por dios, Maddie lo lamento mucho , debí prestar más atención a la calle y no hacerme el capo para impresionarte, lo siento Mad todo es mi culpa y...
-Ya cállate.-me interrumpe- todo está bien, los dos sufrimos y yo sé que voy a salir de esta, la fisioterapia funciona mi vida.- dice con una sonrisa.
-Te voy a ayudar te lo juro, te llevaré a la clínica en moto.
-No te ofendas pero me quiero alejar de las motocicletas por un buen tiempo.- dice, mientras suelto una risita nerviosa- está bien enserio, pero si, me encantaría que me acompañaras.