¡Buen día para vos! Digo... sí, te volví a confundir.
Esos rasgos que me recuerdan todo lo que no quiero recordar. Esa sonrisa que me hace pensar en ella. Esa sonrisa que me asquea. Me asquea al punto de anhelarte, de quererte tanto, que no comprendo mis sentimientos. Esos ojos que dicen tanto, transmiten inocencia. Recuerdan dolor. Llega tu mirada y la suya, penetrando como un masaje; que da placer, pero duele. ¿Soportaré el dolor con tal de seguirte viendo? Con tal de sentir que me pertenecés, y que yo a su vez te pertenezco.
¿Te pertenezco? Quizá lo haga, aunque espero que con el tiempo no cambies tu pensamiento. Me gustaría serlo todo para vos. Todo. Será cuestión de seguir añorando tu abrazo, tu voz, tu cuerpo lleno de vida, colorido. Tu alma, que pinta mi mundo y lo transforma, adaptándome a uno extraño... con tal de verte sonreír. Con tal de que esa sonrisa sea para mí.
Crezco, crezco y vos también. Van pasando los años y nuestras mentes se hacen más firmes. Consolidamos el pensamiento. Escuchame, ¿querés?
Y la distancia canta nuestras canciones, uniendonos a través de un hilo invisible, el hilo de la memoria. El hilo de la mente que no para de tensarse. Muchas veces hasta pienso que se va a romper. Suelo pensarlo cada vez que en tu nariz, se perfila la de ella. Cada vez que tu boca dice aquello que no entendés, pero seguís repitiendo.
Yo espero que por más débil que el hilo pueda estar alguna vez, nunca llegue a cortarse. Que el pensamiento nos una, y las lágrimas sellen nuestro amor. Querida familia, ser prioridad más allá de mi misma. Cuando estás vos, yo dejo de ser, dejo de tener valor, dejo de importar.
Puedo escucharte mediante una pared, que vive en mi mente.
Puedo observarte, tras la pantalla de mis ojos. Tu imagen como lente de contacto, gracias a ella veo con claridad. Gracias a ella sigo adelante en el mundo. No te empañes, por favor.
Tu voz, la melodía que marca mis pasos. Tu risa, la que me da el coraje a seguir. Tus ojos, sus ojos... que escena tan compleja. Es dar un paso al frente, para luego retroceder. Es sentir asco, hacia lo que más quiero, por ver a alguien más.
Es odiarme a mí misma, por sentir lo que siento. Es no entender el por qué. Es no saber el cómo ni el cuándo. Es ver todo alrededor y no encontrarle sentido. ¿Por qué vivo? ¿Para quién vivo, si no es por los que realmente quiero? Pero... estoy condicionada a adaptarme, camaleón de la vida. Me crece un paraguas cuando llueve, y me aparecen lentes con el sol. Sin darme cuenta me transformo, al ideal de con quien me encuentre. Quisiera saber el tuyo. Tu expresión... me confunde. Tan bella y frágil, por dentro, por fuera.
Y tengo miedo de romperte. No sé qué decir, no sé qué responderte. No quiero hacerte pedazos, no más de lo que involuntariamente ya te están haciendo. Sin saberlo te destruís, te destruís a mis ojos. Y no ves lo rota que estoy para vos. No podrías juntar mis pedazos, como yo no sería capaz de juntar los tuyos. Sería un malgaste de cinta, de pegamento. Los pensamientos son el adhesivo mayor, y es difícil modificarlos. Para bien y para mal.
Lloro, lloro para no verte derramar una lágrima por mí. No podría. Y te veo, pero no sos vos, es ella. Su pensamiento. Su odio, sus prejuicios. Y vuelvo a llorar. Quiebra mi voz al intentar decirte que me mires, con tu cara de muñeca. Porcelana forjada a los ojos de quienes te crearon. Poniendo cada botón como ellos querían. Esos creadores de madera, que intentan arruinar una obra de arte, creyendo que la embellecen. El arte abstracto se aprecia distinto. Y el arte abstracto ve diferente. Lo distinto, a los ojos del que se cree perfecto, es defectuoso.
Agradezco el ser abstracta.
Agradezco la objetividad de la vida.
Agradecería aún más que tus persianas se cierren pensando en mí, pensando bien de mí. Amándome y apreciándome como bella, como yo te veo a vos. Admirándome para siempre.

ESTÁS LEYENDO
Antología de cartas
Cerita PendekCartas varias a personas o elementos que de alguna forma u otra dejan marca en mi vida