Capítulo 2

149 9 1
                                    

Capítulo II

POV SAMANTHA

Entre al aula de cálculo avanzado y tomé uno de los lugares al frente, esta es una de mis clases favoritas y no quiero perderme nada, aun es muy temprano así que decido sacar algo para leer mientras pasa el tiempo, pero entonces sucede, noto como sus ojos color avellana me miran mientras entra al aula, aparto la mirada y sigo leyendo mi libro favorito. Mi día no puede ir mejor, primero me topo con un idiota y ahora resulta que esta en todas mis clases, por que no muero de una vez, seria menos doloroso y más divertido.
-Hola, soy Peter- lo escucho decir mientras toma el lugar a mi lado.
Genial el idiota tiene un nombre y cree que puede hablarme.

¿Que es lo que quiere?, acaso no sabe que nadie le habla a una chica cuando esta leyendo.

-Hola- conteste irritada sin despegar la vista de mi libro.
-¿Qué es lo que te pasa?, sólo quiero ser amable contigo.
- Uno, lo que me pase no es asunto tuyo y dos, por si no lo has notado estoy ocupada- dije señalando lo que tenía en mis manos- Así que no molestes y aléjate.
Abrió su boca para decirme algo, pero fue interrumpido por nuestro nuevo profesor. El es algo viejo y anticuado, sólo habló de tonterías que hasta un niño de preescolar sabe.

Al sonar la campana tome mis cosas y salí.
Me dirigía a mi casillero cuando mire a Emma, es más alta que yo, sus rizos de ángel son hermosos, cualquiera puede perderse en sus ojos color azul, tiene un cuerpo envidiable, toda ella es felicidad y buena vibra, ni siquiera se como somos mejores amigas siendo tan distintas.

-Mira lo que tenemos aquí- dije mientras me acercaba
-Hola Sam, ¿que tal tus vacaciones?- pregunto con una sonrisa perfecta.
Me encongi de hombros y suspire -Ya sabes, la misma mierda de siempre.
-Yo...Yo... lo siento- dijo mientras su rostro tenía una expresión triste
-Bueno, tengo que irme, nos vemos Emma.
-Adiós Sam.

***

-Mamá ya estoy en casa- grité al cruzar la puerta principal, pero ella no contestó.
Camine a la cocina para tomar un poco de agua y una nota en el microondas llamó mi atención:

"La cena esta dentro, tu padre y yo tuvimos un compromiso, regresamos más tarde, ten cuidado.

Mamá"

Mi padre, claro.
Subí a mi habitación, parecía que un huracán había pasado por aquí así que decidí ordenarla un poco, al terminar me recosté en la cama y poco a poco me quedé dormida.

Peter... Peter... Peter

El golpe de la puerta me saco de mi sueño, podía escuchar a mis padres discutir como cuando era una pequeña.

-¿Qué me acabas de decir?- dijo el ya molestó
-Sólo creo que has bebido demasiado, deberías ir a descarsar- contestó mi madre asustada mientras me hacía una seña con la mano para que subiera a mi cuarto. Iba a mitad de camino cuando escuche su voz.
-¿A donde vas pequeña rata?

Las pisadas fuera me sacaron de mi pensamiento, me coloque los audífonos y subí el volumen, como tantas veces lo hice antes, dejando de pensar en tanta mierda.

Polos Opuestos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora