24. LA CENA

90 12 0
                                    

Es mi primera "cita" desde que pasó lo de Draco, y lo cierto es que a pesar de que sea con uno de mis mejores amigos, estoy nerviosa. Supongo que es por el hecho de tener que volver a "enfrentarme" a la gente.

El poder desahogarme con George ha hecho algo de bien en mí. Saber que él está ahí, ayuda mucho.

Luego está el pequeño detalle de que el muy estúpido de Fred se niegue a hablar conmigo y lo estropea todo. ¿Qué mas quiere de mi? Si, me equivoque, pero creo que bastante caro lo estoy pagando ...

Llego al gran comedor y lo busco con la mirada. Ahí está.

Carraspeo gusto antes de sentarme a su lado y darle un beso en la mejilla.

- Oh vaya, pensé que no vendrías a nuestra cita. - Dice él achuchandome muy fuerte.

- ¿Como iba a faltar a una de las citas mas importantes de mi vida? - Rio, y por primera vez en mucho tiempo, es una risa sincera.

- Me alegro de que estés de vuelta renacuaja.

Hablamos durante mucho rato. No puedo parar de reir con sus hazañas de estos meses. Me cuenta cuando hizo desaparecer a Fred uno de sus jerseys favoritos tras perder un partido por su culpa y de como él sigue buscándolo.

También hablamos un poco de mi aunque, en esta parte, las risas escasean y la tristeza asoma. Él lo nota y enseguida cambia de tema.

- Bueno, ¿cuando piensas presentarme a esa hermanita tuya de 22 años? - Dice arqueando las cejas.

- Oh venga George, te saca 4 años ¿no crees que eres un poco pequeño para ella? - No puedo parar de reír al imaginarme a Rasa con George.

- No seas sabelotodo anda, mis intenciones con tu hermana no van mas allá de una bonita amistad... - Dice haciéndose el indignado, para luego añadir - de momento.

No puedo parar de sonreír.

- Gracias George.

- Emm ... No te pillo Saeli.

- Gracias por hacer que vuelva a sonreír. Hacía tiempo que no reía tanto. Debo confesarte que los días siguientes a la ruptura... Me sentía tan triste... - Digo agachando la mirada.

- No te preocupes pequeña, todo después de un tiempo te deja de doler o te deja de importar. Solo date tiempo. - Dice el pelirojo justo antes de abrazarme.

- Esto ... George. Perdona que te interrumpa pero tengo que hablar contigo.

Es Wood, el capitan del equipo de quidditch. Se le ve algo preocupado.

- ¿Que pasa Wood?

- Bueno, verás ... No te preocupes pero ... Fred está en la enfermería, se ha peleado con Malfoy y le ha roto la nariz...

- ¿QUÉ? - Me adelanto a George, que me mira con cara de pánico, seguramente intuyendo mi reacción.

- Saeli... Tranquila, dejame hablar con él.

- Ni hablar, tu hermano me va a escuchar. Digo que si me va a escuchar.

Salgo del gran comedor mientras escucho como George va murmurando tras de mi siguiendo mis pasos.

Entro en la enfermería como un huracan en una librería.

- ¡ Tú, Weasly ! Explicame que ha pasado, ahora mismo. - Le increpo a Fred despertandolo.

- Na.. Nada. Solo tuve un pequeño desencuentro con Malfoy. ¿Qué querías que hiciese? Tenía que dejarle claro que contigo no podía jugar ...

- ¿Como te atreves? Desapareces de mi vida durante meses. Me ignoras cuando pasas por mi lado. He llegado hasta el punto de pensar que mi simple presencia te molesta. Y ahora te las das de machito dandote de hostias con Malfoy. ¡No tienes ningun derecho Fred Weasly! Tú decidiste alejarte de mi y yo tuve que aceptarlo. No te tuve cuando más te necesite. No necesito que le partas la cara a nadie por mi. Se cuidarme yo solita. - Estoy tan furiosa.

- ¿Qué sabes cuidarte tú solita? No me hagas reir Saeli. Mirate. Cuando me aleje de ti estabas completa, ¿y ahora? Date cuenta de que te has equivocado, de que han jugado contigo y tú se lo has permitido.

Dice esas palabras y me hace demasiado daño.

- Si sabías que me equivocaba quizá debiste quedarte a mi lado, como hacen los buenos amigos, para poder levantarme cuando me cayese. Pero no, tú preferiste marcharte, haciéndome saber que no te importaba una mierda.

Me marcho antes de que me diga nada. No pienso darle el gusto a Fred Weasly de verme soltar una sola lágrima.

El otro gemelo, espectador en primera fila de la discusión, intenta detenerme pero le aparto el brazo.

- Estoy bien George. Como bien has dicho, todo, después de un tiempo, deja de doler.






La pequeña de una familia muggle. (DRACO/FRED) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora