Por ti volaré El reencuentro

Capítulo 21

-______... –Oye, despierta princesa. –Escuché dificultosamente decir a Zayn.

Poco a poco abrí los ojos y me encontré con que seguíamos en el sofá. Observé por un rato a Zayn mientras trataba de recordar cómo terminamos dormidos allí, él solo me miraba gracioso.

-Buenos días. –Le dije aún algo somnolienta.

-¿Dormiste bien?

-Dormí en un pequeño sofá en el que no estaba sola, ¿tú qué crees? –Le respondí entre una leve risa. -¿Cómo dormiste tú?

-Dormí de maravilla.

-Oh por supuesto, por eso mismo mueves así tu cuello que apuesto está adolorido. –Dije con sarcasmo.

-Lo sé me duele todo el cuerpo, pero eso no importa, ¿sabes por qué?

-Créeme, no tengo idea.

-Porque dormí contigo. –Me dijo mientras me enviaba una tierna sonrisa.

-Iré a tomar una ducha, vuelvo en un instante. –Le dije tratando de cambiar de tema.

-Puedo acompañarte si quieres. –Me dijo enviándome una sonrisa pícara.

-Ni lo pienses. –Le dije lanzándole un cojín que estaba a mi alcance. Zayn solo soltó una sonora carcajada.

Al cabo de aproximadamente media hora ya estaba lista, así que tomé algunos libros que necesitaba y me dispuse a irme, pero cuando pasé por la sala me di cuenta que Zayn seguía allí pasando canales.

-¿Qué haces aquí, por qué aún no te has ido?

-¿Irme? Por supuesto que no. –Dijo riendo.

-¿Qué hay de tus cosas para la universidad?

-Las puse en mi auto anoche ¿Qué te parece si te invito a desayunar?

-No sé por qué preguntas, si no vas a aceptar un no por respuesta.

-Buen punto vamos. –Me dijo poniéndose de pie.

-Gracias por el desayuno Zayn, todo estuvo delicioso, te veo luego. –Le dije mientras me despedía de él depositando un rápido beso en su mejilla.

-Genial, te veo luego. –Me dijo guiñándome el ojo.

-John... Oye John espera... -Le llamaba mientras trataba de alcanzarlo en la universidad.

-¿Qué pasa? –Me preguntó sin dejar de caminar.

-¿Acaso me estás evadiendo?

-Claro que no, tengo clase y ya voy tarde.

-Como sea, necesito hablar contigo.

-¿Podría ser después?, justo ahora como te dije estoy bastante ocupado. –Me respondió cortante, lo que me sorprendió mucho.

-Bien... no voy a quitarte más tu valioso tiempo. –Le respondí casi de la misma manera mientras me daba la vuelta.

-Oye no, espera... -Me dijo tomándome por el brazo.

-¿Qué?

-Lo lamento, ya sabes, quería parecer enojado, pero no puedo estarlo contigo, aunque si es cierto que ya voy tarde a mi siguiente clase así que hablamos luego ¿está bien? –Me dijo suavizando su tono de voz.

-Claro, ahora ve a clases. –Le dije con una pequeña sonrisa.

-Gracias, eres la mejor. –Me dijo depositando un rápido beso en mi frente y luego salió corriendo hacia su edificio.

-Y bien ¿de qué querías hablar? –Me preguntó John mientras tomaba un bocado de su sándwich.

-No lo sé, es solo que últimamente siento que las cosas no están yendo bien entre nosotros.

-¿A qué te refieres con eso?

-Bueno ya sabes, las cosas han cambiado desde... bueno ya sabes a qué me refiero.

-Zayn. –Dijo comprendiendo de qué hablaba.

-Así es... –Asentí un poco incómoda.

-¿Enserio quieres hablar de eso conmigo? –Me preguntó un poco molesto.

-No lo hago por fastidiarte y lo sabes, es solo que mi amistad contigo es muy importante y no quiero que se arruine por algo como eso.

-Amistad. –Repitió algo incómodo. -¿esa palabra no va a cambiar o sí?

-Bueno aún eres mi amigo ¿no? –Le pregunté un poco confundida.

-Déjame hacerte una pregunta.

-Pues hazla.

-¿Ya no tengo una oportunidad contigo cierto? –Yo solo permanecí en silencio al no saber que responder a eso. -¿Realmente piensas volver con Zayn?

-Definitivamente no. –Le respondí inmediatamente.

-¿Entonces? ¿Quisieras explicarme de qué se trata todo esto? Porque sinceramente yo ya no entiendo nada.

-Realmente no puedo. –Le dije apenada.

-Yo ya no te entiendo ______, todo parecía estar tan bien, luego apareció Zayn de nuevo en tu vida y actúas como si fueras a regresar con él, pero dices que no vas a hacerlo y yo sinceramente no sé si puedo seguir con todo esto.

-Créeme muy pronto lo entenderás. –Dije más para mí que para él.

-¿Qué quieres decir con eso?

-Nada, solo... olvídalo.

-Es a eso a lo que me refiero, yo ya no te entiendo.

-No tienes que hacerlo. –Le dije viendo para otro lado.

-¿Qué te parece si buscamos un lugar en que haya menos gente para así poder hablar más tranquilos?

-Me parece una gran idea.

-¿Recuerdas aquel día después de mi cumpleaños? –Le pregunté cuando ya estábamos en un lugar en el que no había nada de gente.

-¿Cuándo te besé y me diste una bofetada? Por supuesto que lo recuerdo. –Me dijo riendo. -¿Qué pasa con ese día?

-¿Recuerdas que me dijiste que esperarías por mí todo lo que fuera necesario hasta que yo sintiera algo por ti, pero que de no ser así aprenderías a vivir con ello?

-¿No lo has dejado de amar cierto? –Yo me limité a negar con la cabeza algo cabizbaja. –Bien pues, te lo prometí así que...

-No sabes cuánto quisiera no hacerlo.

-Ya sabes lo que dicen, el corazón no se manda. ¿Volverás con él? –Me preguntó suavemente luego de un rato de silencio.

-No puedo hacerlo.

-¿Por qué no? Nada te lo impide.

-¿Estás seguro de que eres John? –Le pregunté con una pequeña risa.

-Más que seguro, mi felicidad está en donde está la tuya, quizá no me agrade la idea, pero si tú eres feliz yo también lo soy.

-Aún así no puedo regresar con él.

-¿Pero por qué? Ya te lo dije, nada te lo impide.

-Son tantas cosas John...

-______, no puedo entenderte si me das respuestas así de vagas.

-El tiempo...

-¿A qué te refieres con eso? –Le dediqué una mirada con la que traté de explicarle todo y al parecer me comprendió porque rápidamente me tomó entre sus brazos. -¿Por qué no dijiste nada?

-Son tantas cosas John, no puedo arriesgarme así, no de nuevo. –Le dije entre lágrimas.