El Árbol y el Prisionero

Tesoro

Por alguna razón estaba esperando ansioso hasta que llegara la noche, tuve que decirle a los chicos que saldría con Kari para que no se preocuparan, mas que eso me alentaban por tener novia, cosa que no era cierto. Al llegar la hora me levante y salí de la cabaña, Hilu me deseo suerte y le respondí con un pulgar arriba, salí corriendo sigiloso para no llegar tarde, baje con cuidado el pequeño acantilado y mire a todos lados antes de entrar al túnel. Cuando llegue al final y vi el árbol me percate de que ella no se encontraba allí, así que pensé que quizá yo llegué muy temprano, de pronto unas pequeñas manos con guantes negros taparon mis ojos.

- ¿Quien soy?. - Toque sus manos mientras sonreía.
- Kari... - Mi voz fue suave y relajada, extraño de mi.
- Dilo denuevo. - Quite sus manos de mis ojos, me di vuelta y la mire fijamente.
- Kari. - Soltó una risita y sus ojos se encogieron, se veía su color reflejado con los rayos de la luna. - ¿Qué haremos?. - Fue hacia el árbol y tomo una pala que había allí.
- Vamos a ver que hay debajo del árbol. - Mi rostro cambio a confuso. - Quizá encontremos la respuesta a todo esto. - Parecía como un cuento de misterio pero no podía negarme a su inmadurez.
- Ok, dejamelo a mi.

Tome la pala y comencé a cavar lo mas rápido posible 2 metros del árbol, trataba de hacer una bajada para que pudiéramos volver a subir, después de diez minutos me choque contra un suelo grueso, Kari se acerco curiosa, yo la aleje y seguí cavando. Era un pequeño pedazo de escalera, al llegar al final habia una puerta cerrada un tanto deteriorada, apenas golpearla fue suficiente para que se abriera, nos adentramos justo debajo del árbol, eran cuatro paredes y estaba en total oscuridad, fue entonces cuando Kari prendió la linterna que traía consigo e investigamos el pequeño cuarto.

- Parece un cuarto de prisión. - Alumbraba cada rincón. - Ahí hay una cama de metal, ahí esta el toilette y el lavado, y eso... - Dio un paso atrás al ver al esqueleto de un hombre en uno de los rincones, tirado y con su traje puesto. - Elden. - Toque su hombro.
- Voy a ver, alumbrame. - Ella siguió postrando su luz sobre el cuerpo mientras me acerque a revisarlo. - Al parecer este era un cuarto de manicomio, su traje lo dice todo, Instalacion Mental...¿EX...Machine?. - Mis ojos se abrieron mas al leer el nombre de esas instalaciones. - Espera, tengo que ver algo, apunta a la pared. - Kari lo hizo y con fuerza golpee la pared con la pala, ya que era un lugar viejo pude hacer un agujero después de 4 golpes. - Como lo pensé. - Al otro lado se veía otro cuarto.
- ¿Qué sucede?. - Kari pregunto rápidamente.
- Al parecer esta isla era un psiquiátrico. - Volví hacia Kari y escuche el sonido de un papel que se rompía bajo mis pies. - ¿Qué es esto?. - Lo levante, era una carta rota a la mitad. Mire a Kari y me señalo que saliéramos de allí.
- Vamos, leeré la carta esta noche. - Kari puso cara enojada.
- Yo voy a leerlo, yo tuve la idea después de todo. - No podía discutir con ella así que se lo di.
- Bien, ahora voy a tapar de nuevo este lugar.
- No creo que haya problema con que lo dejemos así, después de todo podríamos encontrar mas pistas. - Me parecía que Kari tenia prisa, entonces fue cuando me di cuenta.
- Kari, ¿de dónde sacaste esta pala?. - Me miro confusa.
- Estaba aquí, recostado sobre la parte trasera del árbol, cuando lo vi tuve esta idea. - Mis nervios explotaron y mire a todos lados, luego comencé a tapar el agujero rápidamente. - ¿Qué sucede?.
- Si la encontraste aquí no creo que sea por casualidad, alguien anteriormente estuvo aquí y quizá nos vio. - Kari se asusto. - No te preocupes, es probable que no haya venido por miedo al Chupa Cabras. - O tal ves, esa misma persona sea el Chupa Cabras. No quería ponerla mas nerviosa.

Al terminar fuimos rápidamente hacia las cabañas, ella se veía preocupada pero al acariciar su cabello su rostro se lleno de tranquilidad, en donde se dividían los sectores ella y yo nos detuvimos para despedirnos.

- Bien, mañana me lo cuentas todo. - La mire seriamente pero ella me miraba a los ojos y tenia los labios abiertos.
- Elden... - Mis ojos se abrieron mas.
- Kari. - Parecía incomodo pero no lo sentía así.
- Emmm, estamos en aprietos y eso, pero...quiero decirte que es la primera ves que tengo a alguien como tú y... - Mi cuerpo se adelanto solo y tomandola de sus mejillas mis labios apretaron dulcemente los suyos. En ese momento cerré los ojos, pero un segundo después me aleje por miedo a asustarla.
- Lo siento, no sé que fue eso. - Ella se quedo en shock con sus labios aun abiertos. - Nos vemos mañana. - Mi corazon latía rápido pero me sentía un poco avergonzado, no sabia si le gusto o no, ella dio media vuelta y se fue corriendo sin mirar atrás, esa noche me sentí un verdadero tonto.

Al llegar a la cabaña note que Ténas seguía despierto y al verme me sonrió, y yo no tenia mucho que decir y no pensaba en contarle sobre el beso. Me acosté en mi cama y él saco su cuaderno de historias.

- Te estaba esperando. Lee por favor. - Tome el cuaderno de mala gana y leí donde me había señalado.

"ADVERTENCIA A TODOS LOS JOVENES: El gobierno ha perdido la razón y sus padres ya no pueden ver lo que es correcto, hagan lo que sea para escapar de ese destino, ustedes no están mal, esa empresa esta demente, escapen de sus casas, obliguen a sus padres a entender, no vallan sea como sea. Esa isla es peligrosa y no hay vuelta atrás, no escuchen a los supuestos profesionales, son unos lunáticos, lo sé, los conozco, su examen es una farsa, ustedes están en perfecto estado mental, creanme por favor. Adviertan a sus amigos y compañeros, salven a todos del destino que sufrí, aun queda tiempo, tomen la decisión correcta".

- ¿Tú lo escribiste?. - Movió la cabeza negandolo.
- Lo saque de la pagina web de mi colegio.