we're not soulmates → tomki

Uno

Loki estaba harto de esos molestos e insoportables mortales. Él era un rey, el rey de Asgard que no iba a tolerar aquella burla, ellos pretendían igualarlo ¡Por Odín no eran más que unos simples mortales! ¡Unos que debería dominar! Si no fuese por su odioso hermano todos estarían arrodillándose ante él.

Luego de los acontecimientos de Nueva York se enteró que estaban preparando una película de lo que fue su visita a Midgard hace unos cuatro años atrás. No tenía mucho conocimiento de lo que era una película, pero según su hermano eran actuaciones de los mortales, o una cosa así no le presto en realidad mucha atención hasta que Thor mencionó que harían una sobre él mismo y los otros vengadores, además de Loki como villano.

Loki aceptaba que no era la mejor criatura de los nueve mundos, pero tampoco era un villano. Y eso era lo que detestaba de los mortales, lo veían como un ser despreciable, por eso él los veía de la misma forma.

De seguro no mencionarían su trato con Odín o su verdadero origen, sino que lo mostrarían como un monstruo.

Él estuvo investigando y ya habían escogido a alguien que lo interpretará. Un hombre llamado Tom Hiddleston de 32 años y ni siquiera se parecía a él, tenía el cabello rubio y ondulado, siempre parecía estar feliz y nunca molestarle nada en lo absoluto. Iba a ir hasta allá a obligarlo que renunciara a esa interpretación y si podía también que los responsables de tal película jamás intentarán hacer una de nuevo.

"Heimdall" -llama Loki- "Necesito trasladarme a Midgard de inmediato. ¿Serías tan amable de abrirme el Bifrost?"

Heimdall asiente, clavando la espada y abriendo el puente entre los mundos. En cuestión de segundos Loki se encuentra en Inglaterra, donde vivía aquel hombre. Apareció detrás del edificio donde vivía y los rayos de luz alrededor de él llamaron la atención de varios mortales curiosos. Loki bufa limpiando su capa, y con su cetro en mano entra al lugar. El piensa que está muy fuera de lugar usando sus ropas tradicionales, así que opta por usar ropa común y ordinaria como la de los humanos, se siente muy incómodo con este atuendo.

Camina hasta dentro del edificio por la puerta trasera y ve el elevador, sube a este, marcando el piso número 13, aquello era un pent-house, le recordaba mucho a la torre Stark, que por cierto, ya que vino a Midgard, cuando terminara con el mortal, pasaría a ver a sus "amigos" los Vengadores, ellos no eran rencorosos y ahora toleran a Loki, bueno, la mayoría, Clint por su parte odia estar cerca de él a menos que otra persona acompañe.

Él se mira ante el espejo del ascensor, acomodando su camisa de cuadros roja y azul, no entendía como los mortales podían usar esto sin sentirse ridículos, parecía un dibujo de un niño de 5 años puesto en una camisa. Además, los botones ¿para que existían? Él no sabía cómo funcionaban esas cosas, todo en Asgard eran armaduras y seda, no simple algodón con círculos de plástico. Dejo su camisa con tres botones sin colocar, dejando ver un poco su pálido pecho libre de algún vello.

El ascensor se detuvo varios minutos después mostrando el hogar de ese tal Tom. Su sala de estar fácilmente podría confundirse con una pequeña biblioteca. Había al menos seis estantes repletos de libros, otros tres de ellos estaban casi llenos de libros. Loki se preguntó si en verdad los leía o sólo estaban allí por lujo. En una pequeña mesa que estaba en el centro del lugar notó algo que llamó su atención por completo. Un libro de mitología nórdica.

Al parecer el mortal no era tan idiota para ignorar su pasado. Había una pequeña hoja al lado de este, donde se leía «página 43» supuso que fue la página donde terminó de leer hasta ése día.

Iba a tomar el libro cuando se percató del sonido de agua corriendo. Tom estaba en casa.

¿Qué mejor manera de sorprenderlo? Tomo su cetro con firmeza, caminando muy cautelosamente, siguiendo el ruido del agua caer. La puerta de su habitación estaba abierta, Loki no puedo evitar distraerse con el interior de este, todo parecía tan bien acomodado, pulcro, limpio sin algún rastro de polvo o suciedad, un orden ejemplar. Parecía una versión mortal de sus aposentos en el castillo. Unas cuantas fotos estaban en las mesas de noche, así como otros libros y una lámpara que llamo mucho la atención de Loki, emitía una luz de color azul y era de color dorada, le recordaba a su cetro. Sacudió su cabeza, él estaba aquí por otra razón, además ¿Por qué admirar las condiciones de la casa de un mortal? Él los odiaba, no pretendía admirarlos y mucho menos alagarlos por sus costumbres, al fin de cuentas solo eran otra raza inferior, común, débil que solo sabía destruir y crear caos. Eran mucho peores que él.

La puerta del cuarto de baño estaba entre abierta, asomó un poco su cabeza y divisó una silueta detrás de las puertas de la ducha. A juzgar por su tamaño, solo era unos cuantos centímetros más bajo que el dios, tal vez unos 4 o 5. Loki con curiosidad chasqueo los dedos, haciendo que la puerta de la ducha corriera un poco.

Loki no quería admitirlo, pero aquel mortal de espaldas, lucía realmente atractivo. Su piel era casi tan pálida como la de él, su cabello rubio, se veía castaño por el agua y este lo masajeaba con champú. Su cuerpo estaba muy bien trabajado... casi... casi podría compararse con el cuerpo de un dios o el de un guerrero Asgardiano.

- Ann.