CAPÍTULO 6

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Elena.

11 de Octubre de 2012

En clases pensaba sobre lo rápido que se había pasado la semana, puesto que al día siguiente sería viernes otra vez. Ese fin de semana me dispuse a estudiar para obtener mejores notas que las anteriores, momento después de profundizar más en mis pensamientos, la profesora de mi último módulo entró al aula, la clase de ese día me pareció un tanto aburrida.

La verdad es que las últimas clases del día, lo son.

Gracias a Dios que solo habíamos escuchado la explicación de la profesora y anotado los apuntes, no hicimos actividad alguna. Era hora de irse y todos se levantaron rápido de sus lugares, «Al menos me siento menos culpable de no ser la única que ya se quería ir» dije en mi mente con sarcasmo, cuando Verónica la mejor amiga de Álex paso y me empujó por querer salir rápido.

Creía que había sido un accidente, pero fué más que eso.


Iba caminando hacia la salida con mis compañeras, creí escuchar de lejos que alguien gritaba mi nombre pero no identifiqué quién lo ha dicho así que continúe mi camino, lo que yo quería era ir a casa para descansar.

Y leer, claro.

Cuando por fin llegué a mi casa, tenía un nuevo mensaje de Álex

- Elena ¿Escuchaste lo de hace rato, lo que dijo mi amigo a la hora de la salida?. Preguntó.

- No, ¿Por qué? ¿Qué dijo?. Respondí.

- No, nada. Todavía no deberías saberlo. Me dijo.


- Ahora me tienes que decir ¿Que dijo?.

- Algo que no es bueno que sepas aún. Y ahí me preocupé.

Leía su respuesta mientras mi instinto de curiosidad se asomaba más y más

Me había pasado como dos horas rogándole a Alex para que me dijera que era lo que su amigo, había dicho y que tenía que ver conmigo.

En cuanto escuchaba que mi celular sonaba, rápidamente abría el mensaje de Alex.

...

- duas semanas eu comecei a gostar não era que eu gosto de você queria dizer a você, mas você me pediu para lhe dizer, isso era tudo. Decía en el mensaje.

- No entiendo, ¿Que dice?. Pregunté frustrada.

- Esta en portugués, traducelo. Me respondió.

Vaya! ¡Es que no se me había ocurrido traducir eso Álex!
Obviamente ya había copiado el texto del mensaje en el traductor, lo que se había traducido del portugués al español no tenía mucha lógica y coherencia.

Le pregunté a algunas de mis amigas pero ninguna sabía lo que eso quería decir así que le dije a Alex que me dijera, pero esa vez en en un idioma que fuera entendible.

- Alex, no sé que dice, ya dime en español. Le dije a casi ruegos

- Está bien, te diré pero a las 12:00pm

Eran las once, faltaba una hora para que me dijera, y yo no esperaría tanto tiempo para ello - ¿Y si muero antes de las doce? ne quedaré con la duda. Le dije. Alex, ya dime, en serio ¿Qué es?

Después de lo que para mi dramatismo parecían ser casí 30 minutos, respondió.

- Es un gusto, es eso, me gustas desde hace 15 días, no quería decirte aún pero tu estabas insistiendo, eso es todo.

-Pero sí hace como 15 días que empezamos a hablar. Respondí con una sonrisa en el rostro.

Ya sabrán porqué la sonrisa.

-Sí ya sé. Dijo. Me gustas , por eso te hablé.

En ese instante no sabía que decir así que me tomé un momento para asimilar lo que el me acababa de decir. Al parecer el sentimiento era mutuo.

Era

Alex era único ante mis ojos, es perfecto, es el único que coincidía con todas las características del supuesto príncipe azul que desde pequeñas a las mujeres nos han introducido en el cerebro. No es del todo atractivo, es alto, con una corpulencia un tanto robusta, su cabello es negro, su mirada profunda y sus ojos de un color oscuro y a la vez claros, de lindas pestañas, labios gruesos que disponen de un color tan natural.
Me gusta su forma de ser.

En esos momentos creía que sí él no me hubiera dicho eso, yo no me habría dado cuenta de que también sentía una atracción por él, pero estaba equivocada porqué yo ya lo sabía, lo descubrí ese sábado, el día de la fiesta, ahí noté por primera vez que algo en él llamaba mi atención.

Una de mis propias reglas en la vida es no denotar demasiada importancia en las cosas que realmente me interesan, creo que ésta es una de las razones por las que he perdido mucho en la vida pero lo prefiero así, sin mostrar muchos puntos débiles. Siempre he sido consciente de que la felicidad es algo que se da por momentos y no algo que se pueda prolongar mucho tiempo.

La emoción que realmente sentía en este instante no era lo que quería que se mostrará en cualquier cosa que yo le pudiera decir.

Mi vida es una constante de:
Nunca se sabe que puede pasar pero es bueno vivir y disfrutar del presente.

Después de procesar todo eso y formular una buena respuesta, respondí:

- Creo que, tu también me gustas.

Era un alivio que me lo hubiera dicho aunque no sabía sí preferiría que no lo hubiera hecho ya que tenía el presentimiento de que algo en mi vida estaba a punto de cambiar.

Ahora lo sé.

ELDANA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora