Exquisita Contradicción

Capítulo 4.- "Víctima"

Les presento a Aaron...

Capítulo dedicado a Alee-Becker Por que tu lo pediste :'v
Espero que sea como pensaste, le añadí mucho drama...

Típico de mi.

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-Alexa-

¡¿Por qué?!

¿Porqué me tenía que dar calentura hoy?

Estoy que ardo, literalmente.

Decidí que necesitaba a mi mejor amigo así que lo llamé. Contestó al segundo tono.

-¡Aaron estoy muriendo!- debo admitir que me pasé un poco con el tono desesperado.

-¡¿Qué?! ¡¿Donde estas!? ¡Di me y enseguida estoy ahí!- dijo desesperado. Podía escuchar como se levantaba y buscaba cualquier cosa para ponerse e ir a verme. Solo eran las 09:47am y Aaron jamás se levanta temprano.

-Tranquilo. No estoy tan mal. No lo dije bien, en realidad era: "Hola princeso, tengo calentura, me voy a morir". -tenía que explicárselo, él es muy nervioso, no quiero que le dé un ataque.

-¡oh! Me diste un susto de muerte... Aún es temprano, pasaré a verte un rato, ¿esta bien? ¿Necesitas algo? ¿Pastillas, golosinas, algo? -Aaron siempre ha sido muy sobre protector y se preocupa demasiado por su enana, yo. Eso me hace amarlo más. Como amigo claro. ¡Dios! Si le gustase a Aaron él ya tiene un pase todo pagado directo a la zona del amigo.

-Algo de chocolate estaría bien- bueno, el se ofreció y muero por un poco de chocolate.

-Esta bien nena, te veo en veinte.

-Ok.

Aaron llegó exactamente en 20 minutos.

-Hola- le dije al abrirle la puerta.

-Hola pequeña- me abrazó- aquí está tu chocolate- me dio una bolsa llena de chocolates de diferentes marcas. Lo miré a ver extrañada -¿Qué? No sabía cual era tu favorito, entre en pánico y agarré todos los que vi.

-¡Oh! Aaron -lloré.

-¿Qué te pasa? ¿Porqué lloras? No me asustes -dijo abrazándome fuerte.

-Es la calentura que me pone sentimental -le expliqué. Puso sus manos en mis mejillas y limpió mis lágrimas. Estaba asustado- Estoy bien Aaron. Gracias por los chocolates.

-De nada. Ven, quiero hablar con tu mamá. -Aaron quiere a mi madre como si fuese suya, de hecho le dice mamá, se cree mi hermano y digamos que su madre no es alguien especial para él.

-¡Hola mami!- gritó Aaron cuando la encontró en la cocina.

-Hola Aaron, ¿como éstas, querido no-hijo? -mamá siempre le recordaba que no era su madre, era algo cruel, pero ella trata en vano que Aaron perdone a su verdadera mamá.

-Como dijo el poeta Edgar Allan Poe: "Me sois más querida que la madre que conocí". O algo así, la verdad es que no lo recuerdo, de hecho, creo que habla de una abuela, pero el punto es que la quiero como si fuese mi madre, incluso más. -Dijo Aaron en un perfecto castellano. Ese tarado se cree español.

Mamá rió por eso.

-Esta bien cariño. Digamos que el sentimiento es mutuo -dijo bromeando mamá. Ella lo quería mucho, de hecho, estaba apunto de adoptarlo. Eso sería fabulosamente-horrible.