2. Kit fanfic nuevas especies (COMPLETA)

Capítulo 16

Leo con un rugido frustrado golpeo el primer arbol que vio y retrocedio imponente, estaba ahora claro porque esa hembra que a pesar de estar en celo lo habia rechazado, y era simplmente porque no era a el a quien necesitaba. Los celos y la desesperacion le inundaron y huyo del rio como una tempestad de rabia y lujuria.

El bosque se extendía majestuosamente a lo largo del río, creando un escenario natural de ensueño. Los altos árboles, con sus hojas de un verde exuberante, formaban un dosel sobre el suelo cubierto de helechos y musgo, creando un ambiente mágico y misterioso. La luz del sol se filtraba a través de las hojas, pintando destellos dorados en el agua del río.

El río serpenteaba con gracia a través del bosque, sus aguas cristalinas reflejaban el cielo azul y las copas de los árboles. El sonido suave y constante del agua corriendo transmitía una sensación de tranquilidad y serenidad en el aire. Las piedras redondeadas en el lecho del río y las orillas cubiertas de musgo añadían un toque de belleza natural.

Este rincón del bosque, con su río sereno y su exuberante vegetación, era un refugio lejano de la civilización, un lugar donde la naturaleza reinaba y la magia de la vida silvestre llenaba el aire. Era un entorno perfecto para conectarse con la naturaleza y disfrutar de momentos de paz y reflexión, lejos del ajetreo y el bullicio del mundo exterior.

Kit respiro agitadamente mientras Jaded se acercaba a ella, de un brusco movimiento la pego a ella y sin dejarla hablar la beso, un beso que los estremeció a los dos, Kit ronroneo ante el fogonazo de deseo que la recorrió y agarrándole el pelo la acerco mas a ella.

Jaded le devoraba la boca, le recorría el cuerpo con las manos, lo sentía en todas partes y abrió mas la boca, el macho le agarro las nalgas alzándola contra el . Jaded ronroneo ante el olor que ella desprendía, tan dulce, tan comestible. Mordió su cuello mientras le rompía la camiseta a medio quitar,miro sus pechos, y gruño antes de lamerlos. Kit agarro su cabeza y echo la suya hacía atrás mientras el seguía devorándola.

-Jaded- gimió la hembra- te necesito- por favor- ronroneo intentando soltarle los pantalones- montame- le susurro en el oído.

- SI- respondió ido mientras la giraba, la insto a apoyar las manos en el árbol mas cercano y le bajo los pantalones- absurdamente cortos- gruño celoso mientras miraba su redondeado culo, agarro la liga del tanga y lo rompió, reluciente y mojado su sexo lo tentaba y sin poder evitarlo la beso, pegando sus labios a los suyos la devoro con un ansia primitiva, tocando ese boton magico entre sus piernas con la lengua.

-Joder- gimoteo apoyando la cabeza en el tronco del arbol mientras Jaded la probaba o mas bien la devoraba, sintió su lengua pasearse con seguridad por todo lo largo de sus labios y penetrarla, araño el tronco del árbol cuando reemplazo la lengua por un largo dedo mientras succionaba su clítoris- Jaded ahora- le pidió mientras el seguía masturbandola, incapaz de contenerse mas.

-Tan sabrosa- murmuro mientras continuaba, ignorando las suplicas de la hembra- hueles condenadamente bien Kit- ronroneo contra su brote hinchado y Kit sintió las piernas ceder, pero el no la dejo caer tomo con fuerza su cintura mientras se desabrochaba el pantalón- Joder- maldijo mientras la penetraba- estas muy apretada- gruño mientras seguía su invasión hasta que estuvo completamente dentro de ella, Kit lo envolvia con un guante, estaba seguro que esa sensacion era casi la misma que la de tocar el paraiso con la punta de los dedos.

Kit movió las caderas para sentirlo mas y el empezó a balancear las caderas, adentro, afuera, adentro, afuera, a un ritmo completamente enloquecedor. Sintió los labios de Jaded en su hombro y sus afilados dientes mordisqueándole el hombro mientras seguía bombeando dentro de ella. Sintió sus terminaciones a punto de colapsar, el macho rodeo su cintura bajando por su monte de Venus en busca de su botón del placer, masajeo en círculos su clítoris mientras continuaba su particular tortura.

-Mas fuerte Jaded- ronroneo Kit apoyando su cabeza contra su hombro, el macho aumento el ritmo mientras que con la otra mano le tomaba la barbilla, robo el aliento de su boca mientras golpeaba mas fuerte, mas rápido, mas duro- Siiiii- gimoteo corriéndose.

-Diablos- rugió el macho, sintió los cálidos disparos de su semen en el interior mientras intentaba recuperar el aliento, eso había sido sin duda la mejor sesión de sexo que había tenido en mucho tiempo o que había tenido simplemente penso Kit- Vamos- le insto el macho mientras le subía los pantalones y se ataba los suyos.

-¿Que?- murmuro confundida pero sus labios la acallaron.

-Vamos a tu casa, aun no he terminado contigo- dijo en tono seductor mientras le masajeaba un pecho, se quito lo que quedaba de su arañada camisa y se la puso tapándole los pechos.

-No- respondió  la hembra pero Jaded la ignoro y se la coloco en el hombro.- Bájame- dijo medio molesta medio divertida- Jaded- jadeo cuando este le dio una cachetada.

-Así esta mejor- sonrió el macho mientras salia al trote- cuando estas callada.

La entrada de la casa de Kit era un umbral que parecía abrirse a un mundo de tranquilidad y sencillez. Un sendero de piedra, rodeado de arbustos y flores silvestres, conducía desde la puerta principal hasta el bosque. El jardín estaba cuidadosamente diseñado para que pareciera un remanso de naturaleza en medio del salvaje bosque.

En el porche, dos sillas mecedoras de madera invitaban a los visitantes a sentarse y disfrutar de la brisa y el paisaje. El techo del porche estaba cubierto de enredaderas verdes, que en verano se llenaban de flores coloridas. Una lámpara con un suave resplandor iluminaba la entrada por la noche, creando una atmósfera acogedora.

La puerta principal era de madera sólida, con detalles tallados a mano que le daban un toque rústico. Un pequeño cartel de madera colgaba junto a la puerta con el nombre de Kit y Hanna . El umbral de la puerta estaba cubierto por una alfombra de fibras naturales que daba la bienvenida a los visitantes.

En conjunto, la entrada de la casa de Kit irradiaba calidez y hospitalidad, un lugar donde uno se sentía instantáneamente bienvenido y en paz. Era un reflejo del amor y la atención que Kit dedicaba a su hogar y a quienes lo compartían con ella.

Apenas habían transpasado el umbral cuando Kit fue dejada en el suelo de manera violenta, el hall de entrada de la casa de Kit era un espacio acogedor y funcional. Las paredes estaban pintadas en un tono suave de color beige, que transmitía una sensación de calma y serenidad. En la pared de la derecha, un espejo de marco de madera natural colgaba sobre una mesa con cajones, que servía como lugar para dejar las llaves y otros objetos pequeños al llegar a casa.

Un perchero de hierro forjado se erguía junto a la puerta principal, ofreciendo un lugar conveniente para colgar abrigos y bufandas. Justo debajo, un pequeño banco de madera con cojines acolchados permitía a los visitantes sentarse y descalzarse o calzarse cómodamente.

El suelo estaba cubierto por una elegante alfombra de tonos tierra que añadía un toque de calidez al espacio. A ambos lados del pasillo de entrada, dos grandes macetas con plantas verdes proporcionaban un toque de frescura y vida.

Una lámpara de techo con una pantalla de tela suave proporcionaba una iluminación suave y acogedora. Sobre la mesa junto al espejo, un pequeño jarrón de cerámica contenía flores frescas, aportando un toque de color y fragancia al hall.

Jaded volvió a besarla con ansia mientras la encarcelaba contra la pared. Kit gimio ante la muestra de poder y le devolvió el beso con ardor agarrandole el pelo de forma salvaje.

Bajo sus manos hasta su culo , su preieto y redondeado culo y ronroneo de placer. Con frenesí se desnudaron, arrancandose la poca ropa que les quedaba y Jaded la penetró ahí mismo, contra la puerta de la entrada.

 
Kit rastrilleo sus uñas por la firme espalda del macho mientras este seguía poseyendola. Jaded tomó su rostro cuando los primeros signos del orgasmo recorrieron su cuerpo.

-Mirame- le exigió follandola más duro, Kit hizo lo que pedía, gritó cuando llegó a la cumbre y jadeando vio como Jaded llegaba al maravilloso lugar donde ella se encontraba.