Capítulo 14.

18 3 0
                                    

Laura:

Después de haber acabado el primer año de la carrera de bióloga con buenas notas y haber echo muy buena amistad con Noah y con Pat, que estudiaba derecho, aun que no estuvieran haciendo la misma carrera que yo, eran como mis mejores amigas, nos habíamos echo inseparables, junto con Nick, el novio de Noah, que conoció en la universidad donde estudiábamos.

Mis padres estaban bastante orgullosos de mí, jamás habrían pensado que me metería a hacer una carrera y menos que me tendría que ir de mi tierra (Asturias) para poder estudiarla, mientras trabajaba todas las tardes que tenía libres de la universidad para pagarme todos mis gastos, mientras mis padres me enviaban algo de dinero todos los meses ya que tenía que irme a Alicante a vivir, al principio no les convenció mucho la idea, pero ya que quería estudiarlo y sabían que me la iba a sacar por que siempre que me proponía algo lo conseguía al final cedieron y me compraron una casa aquí para poder estudiar y de paso vendrían los veranos y en vacaciones a verme para estar conmigo.

Eso es lo que yo pensaba, hasta que mi madre me llamo la segunda semana de haber empezado el verano.

-Hola mi niña, ¿cómo estás?.- Me dijo muy dulce mi madre, demasiado, algo pasaba, lo intuí.

-Mamiii, que alegría oírte, estoy bien aun que os echo mucho de menos, las chicas y Nick hemos pensado en irnos en Julio a las Maldivas a desconectar y estoy deseándolo, aun que estoy pensando que voy a retrasar el vuelo para estar un poco más de tiempo con vosotros, ¿que te parece?.- Le dije super ilusionada.

-Mi vida, me temo que tengo una mala noticia que darte... me temo que no vamos a poder vernos este verano... hasta las navidades no creo que podamos ir a verte.- Me dijo algo triste y mi corazón se aceleró.

-¿Por qué?, ¿que a pasado?.- Pregunté nerviosa y intrigada.

-Verás pequeña... donde trabajo sabes que me respetan mucho por que soy una de las mejores que trabajan de lo mío y me han ofrecido un puesto de trabajo temporal en uno de los mejores laboratorios de Canadá y tengo que irme 6 meses allí  para enseñar a un grupo.- Me contó.

-Joder mami, que bien, me legro mucho, aun que me da un pena no poder veros hasta navidades...- Dije algo triste.

-No te preocupes pequeña, tu disfruta del verano al máximo que te lo has ganado y en cuanto pueda iremos a verte.- Me dijo y al rato nos despedimos.

Como mi padre es informático tiene el lujo de poder irse, por que solo necesita su ordenador para hacer sus cosas de informático, aun que nunca he sabido bien de lo que trata su trabajo y como mi hermano Carlos aun tiene 17 años tendría que irse con ellos, mi madre era la mejor ingeniera química de todo Asturias y no me extrañaba que la hubieran llamado, hace muy bien su trabajo.

Pasé todo el verano con Pat ya que teníamos que prepararnos para el viaje a las Maldivas con Noah y Nick, que se habían ido a principio de verano para disfrutar también solos, era comprensible.

Cuando llegamos a las islas, dios mio, que maravilla de islas, quería quedarme aquí a vivir. Vino a recogernos Noah en coche ya que teníamos 19 años y ya teníamos todas el carnet de conducir menos Pat que le daba algo de miedo, Nick no sabía nada por lo que sería una sorpresa, nos estuvo contando de camino a la que sería nuestra casa durante estas 2 semanas todo lo que había ocurrido hasta hoy, se les veía muy, pero que muy bien y me alegraba por ellos, siempre habíamos pensado que acabarían juntos.

La segunda noche decidimos irnos de fiesta a una de las discotecas que habían allí y sin comerlo ni beberlo, de camino a los cuartos de baño mi amiga Pat y yo nos encontramos a un par de chicos, dios, eran guapísimos aun que yo me fijé más en el rubio de ojos azules de 1'75 o así y como yo no tengo vergüenza ninguna y menos con alcohol en el cuerpo, nos acercamos a saludarlos.

-Hola chicos, ¿estáis solos?.- Pregunté haciendo como pidiendo permiso para sentarnos a su lado con la excusa de que los tacones nos mataban.

-Sí chicas, podéis sentaros, yo soy Iván y él es Jhota, ¿y vosotras?.- Preguntó sonriéndome, creo que es la sonrisa más bonita que un chico me a podido dedicar en mis 19 años de vida.

-Yo soy Laura, encantada.- Le dije con mi mejor sonrisa.

-Yo soy Pat.- Dijo mi amiga mientras se lanzaba a darle dos besos primero a Jhota y después a Iván, yo hice lo mismo pero saludando primero a Iván y después a Jhota que no paraba de mirar a Pat, le había molado.

Enseguida se acercó la parejita y no se como acabamos más borrachos que una mona bailando y riendo con los chicos después de haber pasado el resto de la noche con los chicos, y sin saber como acabaron en casa.

A la mañana siguiente... 

-Joder... Puta resaca...- Me desperecé y lo vi, estaba en boxers a mi lado durmiendo aún, recé y recé mientras levantaba la sábanas para ver si estaba vestida y para mi sorpresa... ESTABA DESNUDA, solo llevaba mis brasileñas.

Salí como pude al comedor sin hacer ruido y sin despertarlo no sabía que había pasado esa noche, no me acordaba de nada, puto alcohol...

Pat:

Cuando me desperté tenía un brazo rodeándome, al principio pensé que sería Laura que después de lo borrachas que nos pusimos habíamos dormido juntas sin darnos cuenta, pero cuando me giré...

-Ahh!!.- Pegué un chillido que hizo que se cayera de la cama despertándole. 

Aun que no debí haber chillado, mi cabeza me daba vuelta por la resaca que llevaba y cuando nos miramos me di cuenta, estaba desnudo completamente y yo... rezaba por que no lo estuviera, mientras el se tapaba sin saber donde meterse abrieron la puerta y entraron todos a la habitación.

-¿¡Qué pasa aquí!?.- Preguntaron todos al unísono y se empezaron a reír al ver mi cara echa un cuadro de la vergüenza que tenía y ver a Jhon en pelota picada mientras se tapaba con un cojín sus partes íntimas.

-Menos mal, no soy la única...- Dijo Laura riéndose y entonces si que Jhon y yo nos echamos a reír.

Ya que todos estábamos despiertos gracias a mí, decidimos después de vestirnos salir a desayunar a la terraza, había un silencio algo incómodo pero Nick y Noah por lo menos parecían pasárselo bien dándose mimitos delante de todos.

-¿Alguien se acuerda de lo que pasó anoche a partir del.... séptimo cubata dentro de la discoteca?.- Preguntó Laura y la miré horrorizada.

-¿Bebimos más de siete cubatas dentro de la discoteca?.- Pregunté dudosa y todos echaron a reír.

-Yo recuerdo algo... recuerdo haber llegado a la puerta de casa y no atinar al intentar meter la llave en la cerradura y cuando me giré... os vi a los cuatro enrrollandoos.- Dijo Noah mientras se reía junto con Nick.

-Joder... si que íbamos borrachas sí...- Dijimos Laura y yo al unísono mientras Iván y Jhota asentían como que ellos iban igual que nosotras.

-Yo recuerdo haber escuchado gemidos, pero no sé de que habitación, como mi pequeña y yo estábamos también ocupados...- Dijo Nick y nos miramos entre los cuatro.

-Voy a comprobar una cosa...- Dije levantándome de la silla para dirigirme a la habitación a mirar la papelera.

Para mi suerte, encontré un condón y su plástico, sí, estaba usado... de maravilla, había follado con Jhota y ni si quiera nos acordamos ninguno de los dos, esto prometía cada vez más.

Laura hizo lo mismo que yo, supongo que a veces somos igual de listas y digo igual de listas por que ella también tenía un condón usado en la papelera, de color rojo, ósea de sabor a fresa y cuando nos encontramos en el comedor antes de salir a la terraza nos miramos y nos empezamos a reír, por lo menos por muy ciegas que fuéramos habíamos usado protección, conforme nos escucharon entraron y debió ser graciosa nuestra imagen con cada una un condón en la mano cogiéndolo con un trozo de papel por que se unieron a nosotras a reír, después de eso... ¿tendríamos que hablar con ellos,  no?

¿Luchar o rendirse?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora