La operación que había tenido lugar meses atrás tan solo era un recuerdo. Una cicatriz apenas visible en su mano. Un marca.
El gato gris le maulló a Leticia Lobo desde el borde de la ventana.
- ¿Qué te sucede Camilo?- Leticia estaba en pleno uso de su Notebook en la mesa de la sala de estar.
- Miau, miau.- se dio media vuelta y saltó del borde de la venta hacia fuera. Letica Lobo salió al patio de la entrada y vio que el gato estaba parado en la puerta de calle. Leticia lo rascó detrás de la oreja. El gato siguió con su insistente maullido y se rascó contra la puerta. Leticia frunció el ceño y alacanzó su mirada a la puerta y luego el buzón. Lo inspeccionó y descubrió un nota escrita con marcador. Alguien andaba rondando las calles y sabía lo que estaba buscando por allí o mejor dicho a quién estaba buscando. Leticia Lobo cerró lo ojos por tres segundos, inspiró aire y leyó la nota.
He visto el más dulce corazón, querida y vendré por ti el día menos esperado.
La boca de Leticia Lobo se dibujaba como una fina línea, estrujando el papel en sus manos. Entró a su a su casa y fue directo a su cuarto y guardó aquella nota.
Al día siguiente Leticia Lobo y su madre fueron a denunciar el hecho a la policía pero no le habían dado mucha importancia ya que solo la prueba se trataba de un papel escrito con marcador negro y Leticia Lobo no tenía ningún enemigo aparentemente dado que no era una persona que hiciera amigos por deporte, solo tenía a su amiga Juliana y con las demás chicas de la escuela había perdido contacto. Entonces le prometieron llevar la nota al laboratorio y que enviarían un coche patrulla por los alrededores para mantener en vigilancia su propiedad y que revisarían los registros de delincuentes y predadores e haber alguno en la zona. Con eso Leticia y su madre se consolaron, no obstante, tendría que avisar del hecho al padre de Leticia.
La policía patrullaba su casa todos los días y también lo hacían por la noche. El informe del laboratorio constató que no habían huellas en aquel papel mas que las de Leticia cuando la sacó del buzón y los registros dictaban que los delincuente de aquella zona eran de poca monta y un violador al que habían encerrado tiempo atrás, que a su vez había sido sospechoso de corrupción de menores pero de eso no había nada comprobable. Éste sería liberado en pocos meses con restricción en esa zona de vecindario y no concordaba con la nota. La policía subrayó este hecho para que los padres de Leticia estuvieran al tanto en lo que atañía el asunto del acosador. Era un barrio bastante tranquilo .
El padre de Leticia compró un equipo de cámaras de vigilancia que los instalaron a los dos días siguientes días del hecho. Uno se trataba de un portero eléctrico con cámara y el otro equipo eran cámaras con visión nocturna que instalaron los técnicos en áreas estratégicas. En la entrada de la casa dos cámaras casi enfrentadas, apuntando a los lados de la calle y otra en el patio de la casa que apuntara hacia la puerta de calle. El monitor a donde iría toda la información visual estaba ubicado en el cuarto de invitados en un escritorio. Camilo se puso al lado del monitor como una estatua. El padre de Leticia acarició lo acarició ,al verlo Leticia, le dedicó una amarga sonrisa apoyada en el marco de la puerta. << Solo me falta custodia personal permanente, o mejor podría ser un ángel guardián >>. Contempló a su padre un momento pensado en lo mucho que hacía que no lo veía, aunque solo en contadas veces, o que él fuera a visitarla. También pensaba que cada vez que se veían ella lo esquivaba sin encontrarle una explicación . Se había ido de su casa cuando ella tenía diecinueve años pero el tiempo no había sanado aquella herida de abandono.
- Papá...- A Leticia se le pusieron los ojos rojos y su padre la miró esperando lo que iba a decir- Te extraño... tanto... - Su voz se quebró a lo último de la frase y rompió en llanto. Se abrazaron fuertemente aunque en el interior de Leticia ya había germinado la semilla de la desconfianza. La madre de Leticia escuchaba desde la otra habitación.
Con la casa llena de cámaras de seguridad, los policías que patrullaban día y noche, Leticia y su madre tuvieron una larga tranquilidad por varios meses.
ESTÁS LEYENDO
Mariposa Escarlata (Seikeigekai)
RandomLeticia es apática en lo que se refiere al amor por ciertas experiencias vividas . Descubrirá con asombro la existencia de una persona en quien, inconscientemente ,depositará cierta confianza.