TIERRA DE NADIE

14

Me acerco a Lina y a Fercho.

- Pero ¡¿qué?! - Dice Fernando sorprendido.

- No sabemos en donde están. Perdimos contacto con ellos en medio de un enfrentamiento entre soldados del gobierno y los Bravo - Lina saca de su bata oscura un aparato y reproduce el sonido.

>> "Aquí equipo Bravo, solicito refuerzos Alfa o Delta, repito, solicito refuerzos. Es una trampa, nos emboscaron, los Caz..."

- Es la voz de Cuatro, - dice Lina - no sabemos que pudo haber pasado, o los Caza nos traicionaron... - miro a Fernando, con los ojos abiertos, y él me mira con sus cejas entre cerradas, - o el gobierno capturó a ambos equipos.

- Dudo mucho que los Caza se hayan puesto en posición de atacarnos... - dice Fernando.

- Es verdad - intervengo, - ellos mismos solicitaron refuerzos Alfa.

- Son solo hipótesis las que estamos discutiendo. Alfa, coloca a Octrua en marcha... - dice Lina y Fernando asiente.

- Alto, ¿y José? - No quiero desanimar a Fernando, pero tampoco quiero que el líder lo coja entre ojos.

- No está, soy su siguiente al mando, mientras él no se encuentre en la Colmena, las ordenes las doy yo. - Dice Lina. Firme. Preocupada. - Fernando, ya sabes que hacer. - Fernando asiente y Lina sale del estadio.

Fernando me mira y dice:

- Como lo prometí, es hora de salir de aquí. - Fernando saca del bolsillo un auricular - ¡Alfas, reúnanse!

****

Después de diez minutos, todo el equipo Alfa está reunido en sala de mando.

- Bien Alfas, de nuevo es nuestro turno de jugar, - dice Fernando al resto del equipo, - pero esta vez, - hace un gesto incrédulo, - tenemos juguetes. - El equipo ríe, - computadora, activa simulación AGCC Octrua.

- ¿Qué es Octrua? - Suelto y la pregunta parece salir por sí misma. Uno de los Alfa que está a mi lado responde.

- El Arma de Gas Camuflaje de Campo Octrua, son pilares, es la primera herramienta tecnológica avanzada que se aplicará en una zona civil bajo guerra. - Lo miro - Julián, mucho gusto. - Asiento.

- Santiago. - Respondo su cortesía.

- Sé quién eres, tu apellido tiene leyenda en este lugar. - Lo miro. No sé si es un alago o un insulto.

- Bien, acérquense. - Dice Fernando - esto es lo que haremos: cuatro de los ocho pilares serán ubicados en el aire ocultados por la altura de los edificios del centro Caleño, - mientras habla, se va expresando y señalando puntos estratégicos del holograma que sale de la mesa sintética - los restantes van a estar en el subsuelo. Estos soltaran una capa de humo a una distancia no más de 10km cuadrado. Seremos invisibles. - El plan parece agradarle a los Alfa. - No vamos a perder comunicación alguna, las mascaras que se les van a asignar permitirán comunicación e identificación. La última señal Bravo "Génesis" fue hace dos horas, detrás del palacio de justicia de ese municipio. Tenemos tres objetivos: el primero rastrear a los Bravo. El segundo, rescatar a los Caza. El tercero, neutralizar soldados del gobierno. ¿Alguna pregunta?

Nadie parece juzgar a Fernando.

- Si. Una sola, - Una mujer: no más de veinticuatro años de edad, estatura mediana, acuerpada cubierta por su uniforme negro, con un tono de piel claro y con el pelo corto y tinturado de un morado claro en las puntas, echado a un lado, y al otro rapado. Da un paso al frente. - ¿Cómo planeas llevar los pilares?

Fernando la mira y sonríe.

- Muy buena pregunta Aura. Iremos en cuatro helicópteros, de a cinco integrantes, cada vehículo aéreo llevara dos pilares. Al llegar serán breves las instalaciones de de estos. ¿Alguna otra? - Fernando pasa la mirada por todos, nadie responde, así que da por hecho que todo ya está planeado. - Bien, es hora de dar un paseo.

Algunos Alfas se dirigen a la armería y otros a preparar los pilares.

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Cuando ya todo está preparado abordamos los helicópteros, no sin antes de que Aura nos pasara las mascaras y los fusiles que Fernando nos había comentado. Estos comienzan a ascender.

El helicóptero en el que voy es el primero en dar despegue. Las compuertas superiores se abren con un ruido chirriante. Cuando ya estoy en lo más alto del cielo puedo ver el suelo tapizado de ajedrez dividido para darle paso a los otros vehículos flotantes.

Nuestra nave comienza a avanzar, y por primera vez veo el caos. El verdadero desorden social. Los autos en llamas. Las cenizas. El fuego de las casetas. Por primera vez en este día veo la desesperación de estas personas. El miedo aborda y corre por mis venas, toda esa destrucción, solo hace que me enfoque en una sola persona, y quién sabe si aún sigue viva, quién sabe si aún sigue pensando en mí, quien sabe si Ángela, realmente salió del país.

Me prometí que no iba a ser débil en este lugar, pero su ausencia es más fuerte cuando veo el desespero de las personas. Ojala esto nunca hubiera pasado, ojala Ángela estuviera conmigo, dándome un caluroso abrazo, un beso que me dice que todo está bien, recorriendo cada parte de su cuerpo. Extraño el olor de su perfume, sus ojos decorados con la luz del sol. Sus caricias. La extraño a ella.

****

En el transcurso del camino, me pierdo en mis pensamientos. Al despertar en la realidad me fijo en que estamos sobre volando una gran zona boscosa, que el día se pinta de gris. Que estamos en guerra. Que estoy solo.

- Prepárense Alfas, estamos cerca - dice Fernando por medio del comunicador. Él me echa un vistazo y asiente en un gesto de que nos irá bien.

- Si sobrevivimos, Fernando gasta las cervezas - dice Aura, y el resto del equipo le sigue la idea. No puedo evitar sonreír, estos momentos entre aliados hacen que la muerte sea menos tenebrosa.

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Llegando ya a la ciudad, se ve igual de oscura, desolada, destruida y caótica que Bogotá y que otra ciudad del país, este es el momento de estar alerta de todo.

No pienso perder la vida en este lugar, hace meses mi vida pasó de ser un estudiante común y corriente, a ser un soldado rebelde.

Mi misión no es rescatar a ningún equipo. Ya no importa nada, mientras el país se destruye por sí mismo Ángela debe de estar perdida, asustada y confundida. Desolada. No pienso perder la vida en esta tumba que no es la mía.